El Comandante, un pueblo y la Revolución


Recientemente se realizó en Venezuela el Segundo Encuentro Mundial de Solidaridad con la Revolución Bolivariana. En este evento internacional, que se llevó a cabo el pasado mes de abril en Caracas, se ratificó y consolidó el respaldo del movimiento progresista mundial. Allí sentí y viví, uno de los sentimientos más hermosos que jamás y nunca había experimentado en mi alma y espíritu revolucionarios. Jamás ninguna otra situación me había subyugado de esta manera.

En primer lugar; el encuentro directo y frontal con el Comandante Hugo Chávez en tres oportunidades en menos de una semana. Ciertamente, sentimos que estamos en la presencia de un escogido. Si, ¡Un escogido! - Y es entonces, cuando comprendemos, el porqué unánimemente, los venezolanos lo percibimos de este modo. La firme energía, carácter, bondad y generosidad en darse todo por entero, son características normales en éste ser humano.

La absoluta ausencia de arrogancia y mezquindad. Un hombre magnánimo, para quien la majestad Presidencial y el protocolo, son sinónimos de alejamiento y de encumbramiento, por eso carece de cualquier formulismo o pompa que pudiera hacerlo sentir alejado de su pueblo. Todo en Hugo Chávez; su contacto franco, llano y directo. Su común y sencilla naturalidad con los que lo rodean, hace inevitable pensar que nos encontramos frente a un hermano o un amigo leal y sincero. Alguien a quién le entregamos todo. Todo, Es lo que algo más de un ochenta por ciento de los venezolanos le ha entregado.

Y en ello va, no sólo la confianza electorera; por que eso, ya se lo había entregado bajo engaños a otros que prometían el cielo y la tierra. No, esta vez el pueblo le entregó su propio corazón pleno de amor. Amor que es recíproco, y como bien lo dice el poeta. -- El amor no termina jamás, el querer pronto puede acabar -- El amor resiste a las adversidades, y ésta pareja ha demostrado largamente en cinco años de unión; que lucharan fieramente para defender esa unión natural y ese amor incontestable.

Si personalmente, pude haber tenido temores en mi encuentro con el segundo encuentro; temores de aquellos naturales y normales; cómo el de haber podido idealizar excesivamente al proceso bolivariano. Todo temor, se disipó frente a aquel hombre y frente a todo lo hermoso que de este proceso pude constatar aún más de cerca. Frente a un pueblo del que hago parte; que hierve en fervor revolucionario bolivariano y chavista.

No exagero al decir, que tal vez me había quedado corto en mis apreciaciones y en el amor que siento por esta revolución. Sin cegarme por supuesto y reconociendo los defectos y errores de toda obra en construcción. Las fallas humanas. Los infiltrados de la cuarta república y algunos de la Quinta; que muy poco o nada les importa o conocen del concepto Revolución.

Aún cuando este proceso, no tiene doctrinas ni aspiraciones RobinHoodiana. Esa de quitarle a los ricos para darle a los pobres; se ha llegado a una situación en la que el reparto equitativo de los beneficios de la renta petrolera se hace cada día más evidente y constatable. Aquella aparente pasividad con la que los venezolanos aceptaron el deterioro de sus condiciones en los últimos cuarenta y cinco años antes de la revolución; es definitivamente y para siempre cosa del pasado.

Hoy los venezolanos imponen su voluntad de existencia, sin llegar y sin aspirar a dictaduras del proletariado, - Cómo lo ha indicado el mismo Comandante - Simplemente, su intención es de hacerse tomar en cuenta, luchando contra las desigualdades sociales, participando en este proceso democrático, de la que él es protagonista en la definición de las reglas del juego, en la Venezuela de la Revolución Bolivariana.

Aquél pueblo, que fue considerado entonces como peligroso, que fue reprimido para que viviera con la cabeza agachada, y aquellos que de alguna manera conectados y utilizados, debían contentarse con migajas, mientras la gran mayoría padecía la miseria que la desgracia politiquera había echado sobre sus vidas. Hoy, el mundo debe saber, que estos cambios y esta revolución bolivariana; son irreversibles cueste lo que cueste.

He allí la razón del '' Resignado '' discurso de las elites que cada día bombardea la psiquis de sus muy escasos seguidores y de la ultraderecha republicana-americana en su intento desesperado de solicitud de una invasión tipo Irak a Venezuela. Ellos la recibirían con los brazos abiertos, sin importarles cuanto les cueste en entrega de la soberanía nacional, de vidas humanas, ni cuantas generaciones pasaran para que sus descendientes recuperen un poco de dignidad y respeto aún frente a un espejo.

Hoy los venezolanos dignos e íntegros; ya no agachan la cabeza, porque tienen la constitución más moderna del mundo, que en cada capítulo, párrafo, línea y considerando; nos da el más absoluto derecho a levantarla muy decorosamente para reclamar nuestras reivindicaciones y cumplir nuestras obligaciones.

El venezolano de la Revolución; nunca antes había tenido la atención y respeto con los que hoy día puede contar. Desde el servicio público de transporte mejorándose con Metros en varias ciudades; pasando por las Misiones, que le dan atención médica de calidad y gratuita. Educación desde las primeras letras hasta un grado universitario gratis. Acueductos de agua potable en los más intrincados rincones del país -- Cómo bien pude constatarlo -- La apertura de canales de igualación social y promoción popular que han pasado a convertirse en factores primarios en la lucha contra la discriminación social. Las Escuelas Bolivarianas y el Plan Simoncito; donde todos los estudiantes y niños en bajas edades tienen dos comidas y merienda en el día.

Los mercales y el último recurso de los mercales. Son extraordinarias obras de este proceso bolivariano. En los Mercales, el ciudadano se abastece de productos de la cesta básica mucho más baratos que de ordinario. Y los mercales de último recurso; otra etapa en marcha, que se hizo pensando en aquellos ciudadanos que ni tan siquiera tienen para el mercal. Consiste en comedores en todos los barrios de las ciudades donde aquellos que carecen de todo, puedan ir a desayunar, almorzar y cenar completamente gratis, sin por ello sentir que se le da una limosna, sino beneficiarse del derecho que tienen a ser asistidos por el Estado.

Si mis amigos y Camaradas. Eso es pensar prioritariamente en el pueblo. Eso es llevarle el más grande grado de felicidad y bienestar al ciudadano. Eso y mucho más; qué por cuestiones de espacio, aquí no puedo enumerar. Es a lo que menos de un veinte por ciento de la población, con recursos que incluye a las grandes elites oligarcas; están apuntando sus innobles intenciones, para destruir con ardid, zancadillas y estratagemas en un referendo donde de todas maneras saldrán derrotados por octava vez.

Pero lamentablemente, no les bastará - Estamos seguros - Perdieron muchos privilegios con la llegada de la revolución. No habrá nada que los haga desistir, sería ingenuo pensar que después de un referendo que les adverse, se quedaran tranquilos y resignados. Sabemos a ciencia cierta que continuaran despotricando, calumniando, desinformando, infamando y conspirando y todo ello por que tienen el dinero y los grandes medios de comunicación en sus manos. Si, ellos pretenderán con todos sus recursos y por siempre arrebatarle al pueblo, lo que el pueblo en un tiempo record, por la buena gerencia y la buena voluntad ha adquirido.

Acabar con todos esos beneficios y el bienestar certero que el venezolano a corto plazo, ha obtenido y obtendrá en la ruta revolucionaria, es su único objetivo. Pero la lógica aplicada y la masa conformada por algo más del ochenta por ciento de la población, no se los permitirá. Pues si para algo este pueblo despertó, es para poner en su lugar a los poderosos que pretenden seguir explotando, engañando, robando y abusando de los desposeídos.

Carlos level
21 /06 / 2004
Circulo Bolivariano de Montreal



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Carlos Level / Circulo Bolivariano de Montreal

Militante Bolivariano. Ex-coordinador del Círculo Bolivariano de Montreal, Canadá.

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