Posiblemente estas dos palabras, estos dos sustantivos no tengan mucha relación con usted, a menos que por alguna casualidad tenga algún amigo con ese nombre y ese apellido. Pero como estoy seguro que para la gran mayoría de lectores de estas líneas esas dos palabras le son, de alguna manera ajenas, quiero y debo aprovechar 1a circunstancia de su interés en saber quién es el personaje, para esbozar el estas breves lineas una semblanza biográfica de quien, sin duda ninguna, es un héroe anónimo. Veamos:
DOMINGO LEÓN es un venezolano de origen muy humilde. Nació el 26 de mayo de 1939, en una barriada del Sur de la ciudad de Caracas, en la zona de El Cementerio, así conocida por la presencia del mayor camposanto de la ciudad. Es hijo de una pareja de obreros: ella ocupada en múltiples oficios donde los domésticos predominaban, y él gastando sus fuerzas y su salud como pregonero, despachador de gasolina en una bomba de servicio, etc, etc, etc: ese largo etcétera que forma la pesada cruz cargada por los hombros del pueblo. Ambos le dieron el magno ejemplo del bien, del trabajo honrado, del esfuerzo por ganarse el pan de cada día, y los demás bienes necesarios. Domingo aprendió pronto y bien a enfrentar las carencias y a merecer el pan.
Gran parte de su niñez transcurrió al lado de dos tías y de su abuela paterna, quienes también sembraron buenas semillas en la tierra fértil del corazón del niño. En 4to. grado vio truncarse su sueño de estudiar y superarse al tener que abandonar, a los 12 años, sus estudios para comenzar a trabajar como ayudante de carpintería, cargando bolsas en el mercado, y hasta de monaguillo por la exigua remuneración de un bolívar con 50 céntimos... Finalmente consiguió emplearse en el Hipódromo, (donde había trabajado su madre), como mensajero primero y luego como liquidador de taquillas.
Paradójicamente es aquí donde Domingo va a iniciar su ya larga carrera de Revolucionario con más de 40 años de actividad y entrega, asumiendo todos los retos y todos los riesgos. En el Hipódromo hace contacto con los hijos de los ricos propietarios de caballos, con hijos de militares, así como con jóvenes de otras clases y otros estratos sociales, lo que le permite empezar a entender porque las diferencias sociales y cuáles sus consecuencias. Su empleo fue deseado, sin necesitarlo, por el hijo de algún propietario de caballos así que es despedido y va a engrosar la larga lista de desempleados. Todo esto ocurría durante la dictadura del Coronel Marcos Pérez Jiménez, de triste recordación para muchos y no tanto para otros. El joven desocupado se dedicó a la práctica deportiva, destacándose en cuanta disciplina ensayó. Junto con otros jóvenes creó un Centro Deportivo en su comunidad revelándose como un hábil organizador y alcanzando un desarrollo atlético personal impresionante.
Domingo se va involucrando cada día más en el quehacer social y en la lucha política. En 1957, con 18 años, participa junto con los estudiantes de la escuela Normal Gran Colombia, en las protestas y en la huelga contra la dictadura militar que arreciaba cada día la represión contra las fuerzas populares. Toma contacto con los dirigentes de la Juventud Comunista que conducían en su zona la lucha insurreccional. Se mantiene activo y en compromiso creciente contribuyendo con su modesto aporte al derrocamiento de régimen el 1ro. de enero de 1958. Durante dos años militó en las filas de esa organización política, de papel decisivo en los sucesos históricos que reseñamos. En 1960 lo más avanzado de la juventud militante del partido Acción Democrática (AD), ante la traición de Rómulo Betancourt y el resto de la entreguista dirigencia adeca, abandona las filas de ese partido y funda el Movimiento de Izquierda Revolucionaria (MIR). Domingo es uno de los primeros dirigentes juveniles en formar parte de la nueva organización, mostrando sus dotes y formando parte importante del Comando Juvenil de la Zona al sur de la capital. En este año termina los estudios de primaria y se incorpora al Liceo Juan Vicente González. Ya en 1961 es el Responsable Político Estudiantil de la Juventud del MIR. En este mismo año se incorpora a las primeras Unidades Tácticas de Combate (UTC), y participa en las operaciones iniciales de la lucha armada contra el gobierno proyanqui de Betancourt.
En 1963 se unió a la reserva de las Fuerzas Armadas de Liberación Nacional (FALN), brazo armado y vanguardia militante de las fuerzas de oposición al régimen, formadas esencialmente por el PCV, la UJC y el MIR. Domingo pasó a formar parte del Destacamento "NOVOA", y posteriormente del "TRUJILLO". Participó en diversas operaciones importantes de expropiación financiera y en otros objetivos militares en calidad de combatiente, posteriormente como Combatiente Responsable de una UTC. León combinaba su trabajo y sus responsabilidades políticas y de combatiente con sus estudios de teatro en la Escuela del Ministerio del Trabajo. Llegó a actuar como personaje principal en la obra Túpac Amarú. Intentó hacer cine experimental en películas que quedan inconclusas. Cada día se involucraba más en la lucha revolucionaria de su patria entregándose en cuerpo y alma al ideal que lo movía.
El 30 de junio de 1964 es el día de la gran prueba para el combatiente y héroe, casi anónimo, que es Domingo León. Ese día, en una operación de expropiación revolucionaria cae herido de 3 disparos. Logra salvarse por extraordinaria constitución física y enorme fuerza de voluntad y amor a la vida. Sin embargo quedara paralitico al ser cercenada su médula espinal por una de las balas. En esa acción muere, junto a é1, su amigo de toda la infancia, ELY EDUARDO PEREZ, de apenas 17 años de edad. Domingo es recluido en el hospital de emergencia de la esquina de Salas. Durante 10 meses se debate entre la vida y la muerte, y luchando contra los vejámenes de las autoridades encargados de su custodia. A pesar de su gravedad era interrogado sin miramientos por los esbirros de la policía política del régimen de Raúl Leoni gobernante que había sucedido en el despacho de Miraflores a Betancourt.
El gran apoyo que recibe de su compañera de vida, de algunos médicos sensibles, así como de enfermeras y personal obrero, mas su extraordinaria capacidad de resistencia y deseos de vivir, le permiten sobrevivir a la dura prueba a la que fue sometido. Finalmente por órdenes de las autoridades policiales es sacado del Hospital de Salas y llevado a la enfermería de la Cárcel Modelo de Caracas. Allí va a resistir y a sobrevivir también aferrado su enorme constitución física, moral e ideológica, así como por el apoyo de algunos presos, de algún custodio civil y sobre todo: de su compañera y de la solidaridad del movimiento revolucionario que en ningún momento lo abandonó. El 12 de abril de 1966, por una orden judicial sale de la prisión a la extraña figura jurídica de "casa por cárcel", lo que significaba que estaría recluido en una casa de un barrio popular, pero sin poder abandonarla sin una orden judicial. Rápidamente Domingo se integra a la problemática de la comunidad que le prestara todo tipo de apoyo y solidaridad, protegiéndolo y evitando un deterioro mayor de su ya de por sí grave situación. También algunos cuadros políticos asumen la responsabilidad de su protección.
Finalmente en 1971, luego de arduas jornadas por lograr el sobreseimiento de su causa, las fuerzas revolucionarias logran trasladarlo hasta ciudad de México y de allí, a los tres días, viaja hasta Cuba, la invicta Isla de la Libertad, donde fue recibido por los brazos abiertos de ese pueblo martiano el mas solidario y, paradójicamente, el mas crístiano: si ser cristiano es amar al prójimo, hacer lo mejor por é1, ayudarlo en sus dolores y necesidades... Desde entonces DOMINGO LEÓN vive y comparte sus sueños con el pueblo de JOSE MARTÍ, CAMILO, CHE, FIDEL y su enorme corazón, ayuda de construir EL SER HUMANO NUEVO.
*(Ccas, 12-11-06.) Comité “Ely Eduardo Pérez” de Solidaridad con Domingo León.