Se espera que las conversaciones del lunes se centren en la liberación de rehenes y el fin de la guerra, después de que Israel matara a 63 personas en Gaza el día anterior.
5 de octubre de 2025.-Los negociadores llegaron a El Cairo antes de las conversaciones del lunes, que se espera se centren en la liberación de los rehenes retenidos por Hamás en Gaza y en un fin más amplio de la guerra, mientras Israel continúa con sus ataques contra territorio palestino, que han causado la muerte de 63 personas en las últimas 24 horas, informó El Guardian.co.uk.
Las conversaciones del lunes se centrarán en la primera fase del plan de Donald Trump para poner fin a la guerra en Gaza, según informó el Ministerio de Asuntos Exteriores egipcio, que consiste en la liberación de los 48 rehenes restantes retenidos por Hamás a cambio de prisioneros palestinos retenidos en Israel.
Según medios israelíes, se espera que el enviado estadounidense Steve Witkoff se una a las conversaciones, además de los negociadores israelíes y una delegación palestina encabezada por Khalil al-Hayya, subdirector de la oficina política de Hamás.
El portavoz del gobierno israelí, Shosh Bedrosian, declaró a la prensa que las conversaciones en Egipto se limitarán a unos pocos días como máximo.
El domingo por la noche, Trump afirmó que las conversaciones avanzaban rápidamente y añadió que la primera fase "debería completarse esta semana".
"Les pido a todos que se muevan con rapidez", declaró Trump en una publicación en redes sociales.
La liberación de rehenes y el intercambio de prisioneros significarían el fin inmediato de los combates en Gaza, según Trump. Desde que Hamás aceptó parcialmente su plan para poner fin a la guerra de casi dos años en Gaza el viernes, Estados Unidos, Israel y Hamás han manifestado su creencia de que un alto el fuego está a la vista.
El secretario de Estado estadounidense, Marco Rubio, afirmó en una entrevista con ABC el domingo que las conversaciones de El Cairo fueron "lo más cerca que hemos estado de liberar a todos los rehenes". Advirtió, sin embargo, que las conversaciones aún podrían fallar por cuestiones logísticas y que los detalles de la liberación de los rehenes debían resolverse.
Rubio afirmó que la implementación del acuerdo presentaba desafíos a largo plazo, en particular la creación de un órgano de gobierno tecnocrático que supervisara Gaza en lugar de Hamás. Subrayó que la prioridad actual es la liberación de los rehenes y garantizar que las tropas israelíes se retiren a la línea acordada en Gaza.
El plan de Trump implicaría que Hamás liberaría a todos los rehenes en un plazo de 72 horas, cedería el poder a una autoridad transnacional encabezada por el presidente estadounidense y depondría las armas. A cambio, Israel retiraría gradualmente sus tropas de Gaza y devolvería a más de 1.000 prisioneros palestinos. El acuerdo liberaría un aumento repentino de ayuda humanitaria a Gaza, donde algunas zonas sufren hambruna, así como fondos para la reconstrucción.
El sábado por la noche, Trump compartió un mapa de Gaza que delineaba la línea de retirada inicial de las tropas israelíes, que abarcaba desde 2 km hasta 6,4 km de profundidad en el territorio. Aseguró que si Hamás aceptaba la línea de retirada, se iniciaría un alto el fuego de inmediato.
Según los términos del plan, las fuerzas israelíes se retirarían completamente a una zona de amortiguación en el límite de Gaza, aunque el primer ministro, Benjamin Netanyahu, ha declarado que, independientemente del acuerdo, las tropas permanecerían en la mayor parte de Gaza.