16 de abril de 2009.- El presidente de Estados Unidos, Barack Obama, anunciará durante su
visita a México que su gobierno hará públicos los cuatro memorandos que
recogen todos los métodos autorizados para realizar interrogatorios a terroristas -algunos de los cuales su ejecutivo ha calificado como tortura- por la Administración Bush pero no actuará contra los empleados de la CIA que los utilizaron.
Así lo ha desvelado el portavoz de la Casa Blanca, Robert Gibbs, en el
Air Force One durante el viaje del presidente estadounidense rumbo a
México. Con esta decisión, Obama trata de contentar a dos partes
claramente enfrentadas en esta asunto.
Por un lado, al dar a
conocer estos memorandos, elaborados por los asesores legales del
Departamento de Justicia de Bush en 2002 y 2005, da satisfacción a lo
que pide el grupo de derechos civiles Unión de Libertades Civiles
Americanas, que había impuesto una demanda contra el gobierno en Nueva
York pidiendo su publicación invocando la Ley de Libre Información, que obliga al ejecutivo a publicar este tipo de documentos.
Sin embargo, Gibbs ha matizado que estos memorandos se publicarán censurados en parte.
Luz verde a la CIA
Por otro, cierra la posibilidad de que los trabajadores de la CIA que
usaron estas técnicas interrogatorios sucios a través de una
declaración oficial del fiscal general, Eric Holder, diciendo que sus actuaciones iban en línea de los consejos legales que se produjeron en aquella época.
Obama, que ha ordenado paralizar este tipo de interrogatorios
internacionalmente condenados, ha asegurado en un comunicado que
"nuestra intención es asegurar a aquellos que han cumplido con su deber
confiando en la buena fe del consejo legal que le dió el Departamento
de Justicia no estarán sujetos a actuaciones judiciales".
La
CIA reconoció haber usado la asfixia simulada, una técnica usada en
Camboya por los jemeres rojos que supone atar al preso de pies y manos,
cubrirle su cabeza y tirarle agua para producirle la sensación de ahogo
suficiente para creer que va a morir.
La agencia de espionaje
estadounidense la utilizó contra tres detenidos en 2002 y 2003 que se
consideraban jefes terroristas con el permiso de la Casa Blanca y el
Departamento de Justicia, en parte gracias a los memorandos que ahora va a publicar Obama.
La lista de los horrores
En cuanto a los memorandos, en ellos se detalla que la asfixia simulado
representa "una amenaza inminente de muerte" para el sospechoso de
terrorismo pero que no constituye tortura porque no hay evidencia de
que provoque daño mental, según uno de ellos realizado en 2002.
Por ese motivo, lo considera legal, junto con otras técnicas como poner
un insecto en la celda de confinamiento, privarle de sueño, darle
bofetadas y empujar a un detenido contra un muro.
Otro de ellos específicamente autorizaba el método de combinar múltiples técnicas sucias de interrogatorio,
algo que las asociaciones de derechos humanos consideran que es
particularmente doloroso y que es por sí mismo tortura aunque cada uno
de los métodos sea legal.
Aunque el pasado mes el gobierno
estadounidense dió a conocer nueve memorandos relacionados con el
programa de interrogatorios, los cuatro hechos públicos contienen la lista más completa de los métodos autorizados por el gobierno y usados por la CIA.
Entre estos métodos estarían mantener a los detenidos desnudos durante
largos periodos, dejarlos en una posición dolorosa también en largos
periodos, privarlos de comida sólida, usar un collar de plástico para
atarlos a muros, dejarlo pasando frío durante largos periodos,
privarlos de sueño y golpearlo y patearlo.
Estas técnicas fueron aplicadas a al menos catorce detenidos sospechosos de ser dirigentes terroristas.
La publicación de estos memorandos supone también su retirada como documentos legales válidos.