Orlando Chirino, dirigente de la Corriente Sindical C-CURA (Corriente Clasista Unitaria Revolucionaria y Autónoma) y Coordinador Nacional de la UNT, exige derecho de réplica al Diario El Mundo por falsas informaciones, vertidas en un reportaje, firmado por el periodista Jesús Hurtado, cuyas fuentes de información son –a criterio de Chirino- completamente “equivocadas y evidentemente malintencionadas”.
La información objeto de reclamo aparece en un recuadro titulado “Quién es quién”, inserto en el artículo “Pugnas políticas atentan contra relanzamiento de la UNT”. Allí se presenta una supuesta caracterización de las corrientes o tendencias sindicales que hay dentro de la UNT: El “Masperismo”, “C-CURA”, “FBT”, “Rondonismo”, “Autonomía Sindical” y “Alfredo maneiro”. El periodista coloca a la de Marcela Máspero como primera y principal corriente, además de darle especial importancia a su previa “formación socialcristiana”. En el caso de C-CURA, la redacción la coloca como segunda fuerza, encabezada por Chirino (y por Stalin Pérez Borges), pero presenta a Chirino como “…ligado en el pasado a la CTV…” y seguidamente pone entre paréntesis “(AD)”, con lo cual, evidentemente trata de dar la impresión de que Chirino era adeco. Orlando Chirino responde indignado a esta manera presentar las cosas, que para él es malversar y enredar con la finalidad de causar daño, apelando al recurso de las ambigüedades y mentiras.
Al respecto protesta Chirino: “En primer lugar, es una manipulación burda y, por supuesto, un absurdo, relacionar el haber pertenecido a sindicatos afiliados a la CTV en el pasado (cuando aún no existía la UNT) con ser de Acción Democrática. Esta es una manera de intentar manchar, a propósito, mi trayectoria de dirigente y esto no puede ser por casualidad o por equivocación del reportero, sino que obedece, en mi criterio, a una finalidad; la de favorecer a ciertos intereses oponentes a nuestra corriente C-CURA. Es una torpeza y falta de lógica decir que quien fue afiliado alguna vez de la CTV fue también adeco, cuando todos sabemos que anteriormente la gran masa laboral pertenecía a esa central, aunque trataba de sacudirse a su nefasta dirección predominantemente adeca”.
Chirino prosigue diciendo que: “Todo el mundo sabe que la CTV, burocrática y corrupta, la dominada AD en conchupancia con COPEI, URD, dirigentes que pertenecían al MEP y al MAS, pero desde los sindicatos siempre luché contra ellos de manera rabiosa e intransigente. El que conoce la historia sindical e investiga con un mínimo de responsabilidad, sabe que yo pertenecía primero a la fracción sindical del MIR (proletario) y luego al Partido Socialista de los Trabajadores (La Chispa), organización marxista, socialista revolucionaria, influida por los aportes del bolchevique ruso y dirigente de esa revolución, León Trosky, junto con Lenin”.
A nosotros nos llamaban los “Troskystas”, dice Chirino. Siempre fui un trabajador clasista y luchador. Nos formamos combatiendo a las bandas armadas de Acción Democrática en las fábricas textiles y en el sector manufacturero privado, en el Edo. Carabobo y los estados centrales. Estuvimos un tiempo en la CUTV, central minoritaria dominada por el PCV, pero decidimos dar el combate donde estaba la mayoría de los obreros; o sea en la CTV, para tratar de arrancarle la dirección a la burocracia pro-patronal de Acción Democrática y todos los demás comparsas que hoy forman parte del golpismo y de la derecha”.
“Luego fuimos fundadores de la FBT (Fuerza Bolivariana de Trabajadores)”, continúa su relatando Chirino. “Eso fue cuando Chávez aún no era ni siquiera candidato a la presidencia. Tratamos de dar la batalla en el interior de la CTV hasta donde fue posible y luego cuando ya era irreversible su degeneración estuvimos entre los promotores y fundadores de la UNT. Desde el punto de vista político impulsé el lanzamiento del Partido Revolución y Socialismo por la necesidad de una organización política revolucionaria de la clase trabajadora. Nos apartamos de la FBT por discrepancias que no pudimos superar, relacionadas con nuestra defensa de la autonomía de la UNT respecto del Gobierno, siempre en el marco de la defensa del proceso revolucionario y del gobierno de Chávez frente a la oligarquía golpista y el imperio. También tuvimos diferencias respecto a la conducción de esta revolución, en cuanto a la manera darle de verdad un rumbo hacia el Socialismo y que la clase trabajadora sea la que ejerza el poder”.
Volviendo a lo dicho en la información publicada en El Mundo declaró: “Exijo más seriedad y por supuesto, una rectificación. Por otra parte, es una arbitrariedad y una ligereza decir que somos la segunda fuerza y que tal o cual dirigente la primera o la tercera. Eso no se calibra por lo que diga algún otro dirigente, coordinador o coordinadora de la UNT, ni por la frecuencia de apariciones en los medios privados y del Estado, ni por datos recogidos a la ligera sin contacto directo con el movimiento obrero, desde una mesa de redacción, sino por la observación de la correlación de fuerzas real que hay en la base el movimiento sindical, del número de sindicatos y afiliados de cada corriente, más las acciones de lucha y trabajo cotidiano de los dirigentes y su reconocimiento dentro de la UNT”.
“Reclamamos que se publique mi respuesta y rechazamos que se informe a los trabajadores y lectores de manera tan poco profesional”, concluyó.