(Cumaná, 10 de diciembre.- El sector pesca y específicamente sus industrias llevan varios años con la pérdida de empleos, caída de la producción y una alta inflación en sus artículos (enlatados), lo que conllevó al Gobierno en el año 2016 a crear el Ministerio del Pesca y Acuicultura, y el motor pesca, sin embargo, y por tercer año consecutivo el balance de los sindicatos del sector vuelve a ser negativo.
Durante una rueda de prensa llevada a cabo este jueves en la ciudad de Cumaná en el estado Sucre, los sindicatos de las industrias de la pesca dieron a conocer el balance en el plano laboral, productivo y de gestión de las intituciones públicas con competencia en esta actividad.
Roger Palacios vocero principal de la pesca quien estuvo acompañado por las organizaciones sindicales de este sector, inició el balance con la situación laboral, al respecto indicó, que aún continúan más de 2500 trabajadores despedidos, también informó que el 85% de los trabajadores en estas empresas perciben salarios equivalentes al mínimo nacional y que más del 80% de los dirigentes sindicales han sido víctimas de acoso laboral, calificaciones de despido y despidos.
Agregó que el 78% de los sindicatos tienen sus convenciones colectivas vencidas con lo que en 2016 solo se firmaron 3 contratos colectivos de trabajo, afirmó además que, el incumplimiento de distintas cláusulas de sus contratos ha sido recurrente durante todo el año.
Respecto a la producción, indicó que esta no superó más de 30% en promedio para este año, que la escasez de enlatados se ubicó en más de 60% y los precios se incrementaron hasta más de 800% en los últimos 11 meses.
El también directivo de la Federación de Trabajadores URT Sucre, finalizó su balance con los organismos de Gobierno, donde señaló que el funcionamiento de la inspectoría del Trabajo estuvo signada por retardo en los procesos de reenganche incluso de años, silencio administrativo, obstáculos para la tramitación de los reclamos de los afectados (trabajadores y sindicatos), desentendimiento, falta de acompañamiento y del deber legal para garantizar la libertad sindical (fuero, tramitación de reclamos y discusiones de convenciones colectivas) y se eximió de su facultad de aperturar procedimientos de sanciones contra los empresarios.
También afirmaron que el SUNDEE no fijó precios y que, por el contrario, se permitió la especulación de los mismos tanto en el atún fresco como los enlatados, incluso en empresa estatales como La Gaviota quien vende enlatados más caros que las empresas privadas.
Por último, le tocó el turno al Ministerio de Pesca, organismo que ante el balance presentado este jueves quedó a juicio de estas organizaciones develado de no haber cumplido su tarea, por lo que solicitaron la destitución del titular de esta cartera y su reestructuración