¿Y la zona socialista?

El Táchira camina hacia la instalación de la Zona Económica Especial

Mapa del Estado Táchira, Venezuela, y ubicación de las poblaciones de Ureña y San Antonio, que serán abarcadas por la creación de la ZEE prevista.

Mapa del Estado Táchira, Venezuela, y ubicación de las poblaciones de Ureña y San Antonio, que serán abarcadas por la creación de la ZEE prevista.

San Cristóbal, 26 de diciembre de 2014.- Un conjunto de importantes incentivos tendrán los empresarios que instalen sus fábricas o industrias en la Zona Económica Especial del eje fronterizo San Antonio-Ureña, que además incluye a los municipios Junín y San Cristóbal. El gobernador Vielma Mora asegura que “con la ZEE seremos un portento de economía y productividad”; sin embargo hay otras voces en el ámbito intelectual y sindical que alertan contra posibles efectos nocivos para la soberanía y para la integridad de los derechos laborales. Algunos también se preguntan por qué no se han establecido con igual entusiasmo "Zonas Especiales Socialistas".

La ZEE del Táchira es un proyecto que cuenta con el apoyo del ejecutivo regional del gobernador José Gregorio Vielma Mora. El objeto que oficialmente se le atribuye a la ZEE es industrializar, sustituir importaciones y promover las exportaciones, bajo el concepto de trabajar con economía pública, economía privada y el sistema de economía mixta. No se sabe con certeza si en el carácter “mixto” están o no incluidas las empresas de propiedad social que se concebían en tiempos de Chávez en la llamada “transición al socialismo” y el “desarrollo endógeno sustentable”.

Las ZEE, productividad y desarrollo capitalista... ¿Y el socialismo?

Las ZEE a escala internacional y en países como China son concebidas como regiones geográficas que poseen leyes económicas y de otro tipo que se orientan en mayor medida a una economía de libre mercado, en el cual las leyes de alcance nacional pueden ser suspendidas dentro de dicha zona especial, a los fines supuestos de “mejorar” la economía y fomentar su desarrollo, en el sentido capitalista. No estamos hablando, entonces de Zonas Económicas Especiales para la implantación del Nuevo Modelo Productivo Socialista basado en la Propiedad Social y en el ejercicio del Poder Popular. Es decir; son zonas más capitalistas. Estas pudiesen abarcar zonas de libre comercio, zonas libres, parques industriales, puertos libres y zonas de emprendimiento urbano, con el objetivo básico de incrementar la inversión extranjera o maximizar los rendimientos empresariales en las regiones delimitadas. Recientemente el presidente Maduro incluyó las ZEE entre las últimas leyes de la Habilitante y ya ha comenzado a desatarse una polémica al respecto.

La Gaceta Oficial Extraordinaria N° 6.151, contiene la Ley de Regionalización Integral para el Desarrollo Socioproductivo de la Patria, que permitirá crear zonas económicas especiales donde las empresas participantes podrán operar libres de impuestos. Fue anunciada por el presidente Nicolás Maduro recientemente, como parte de las que firmó en ejercicio de sus poderes habilitantes. Dicha Ley es para "regular la creación, funcionamiento y administración de las distintas unidades geográficas de planificación y desarrollo, en el marco del Sistema de Regionalización Nacional", según lo señala el Artículo 1. Establece que se podrán crear a distintas escalas geográficas Zonas de Desarrollo Estratégico, Zonas Económicas Especiales y Zonas Económicas Especiales Fronterizas. En éstas el Ejecutivo está en la potestad de autorizar liberaciones de restricciones arancelarias, para-arancelarias, así como eximir de impuestos para importaciones de materiales de desarrollo de infraestructura o materias primas e incluso del impuesto sobre la renta por un lapso. Además, "las condiciones para el disfrute de los beneficios" serán establecidas por el Ejecutivo y estarán sujetas al cumplimiento de la "satisfacción del mercado local". Otro de los estímulos para empresas privadas o públicas que participen en estas zonas es que el Ejecutivo "podrá decretar mecanismos especiales de simplificación de trámites" e incluso dictar "un régimen especial de contrataciones". Con esta Ley se derogó la anteriormente aprobada por el Comandante Chávez, que apuntaba hacia una política de economía social sustentada en el desarrollo endógeno.

Para esta ZEE del Táchira tendrán prioridad los sectores estratégicos del plástico; agroindustria; textil, carrocero, autopartes y metalmecánico; madera y muebles, calzado, curtiembre y marroquinería, según lo dicho por el gobierno regional.

Plan Económico Productivo y Autoridad Unica

Se prevé un plan económico productivo y la creación de una autoridad única. No parece estar claro todavía cómo se construirá dicho plan y qué papel jugarán en su diseño el sector público (gobierno regional y nacional) en su relación con el empresariado y con la clase trabajadora, las comunidades organizadas o el Poder Popular. ¿Lo dictará todo la “autoridad única” no electa por sufragio popular?

Dentro de los incentivos se incluye la exoneración del IVA a la importación de materias primas. Se anuncia que uno de los principales beneficios será la creación de nuevos puestos de trabajo, pero no se tiene certeza acerca de la posibilidad de que entre los “incentivos” para los inversores privados pueda haber algún tipo de flexibilización en materia laboral y salarial, como suele suceder en este tipo de zonas; al menos dentro de su típica concepción capitalista y tal como se han aplicado en muchos países.

Algunos detalles proporcionados por la Oficina Regional de Información y Comunicación del Táchira (ORIC) y por el gobernador Vielma Mora son los siguientes:

En este momento el eje fronterizo San Antonio-Ureña, cuenta con 469 fábricas instaladas y en capacidad de producción. La mayor cantidad de ellas pertenece al sector textil. Ese total de empresas se dividen en 227 dedicadas al ramo textilero;  184 pertenecen al sector de la marroquinería, calzado y afines; 50 industrias están en el área de plástico y 8 empresas pertenecen al sector carrocero, en lo que al área industrial respecta. Pero igualmente en el sector comercio se cuenta con 7.351 medianas y pequeñas empresas entre almacenadoras, tiendas y bodegas.

La capacidad productiva de las industrias actualmente es de la siguiente forma:

INDUSTRIA

Textil:                                                             5.240.000 unidades al mes.

Carrocero:                                                     2.124 autobuses al año.

Calzado y marroquinería:                           168.000 pares de zapatos.

                                                                        150.000 unidades de marroquinería.

                                                                        123.000 guantes al mes.

 

La aspiración del mandatario regional y el equipo gubernamental que trabaja en el desarrollo de la ZEE, es que una vez instalada y activada ésta, se aumente tanto el número de plantas industriales como la capacidad productiva de ellas tanto en los sectores ya citados y en otros que se estima se incorporarán a la actividad, en el sector manufacturero y en la producción de bienes y servicios, e incluso en el área de la agro producción.

Por lo que se sabe, todos estos nuevos emprendimientos se basarán en las viejas relaciones sociales de producción capitalistas, porque nada se ha hablado del papel de la propiedad social  ni de condiciones especiales para ella.

Empleos actuales y estimación de empleos nuevos

En la actualidad y sumando el total de las factorías instaladas y en producción, la plantilla existente es de 12.000 empleos directos en el estado Táchira. Al iniciar en firme y totalmente activada la Zona Económica Especial, se cree que el número de nuevas fuentes de trabajo será de 14.412, con lo cual se estará hablando de un total de 26.076 empleos directos en la ZEE. Tener más empleos, indudablemente es positivo, pero eso debe estar asociado a la mejora de las condiciones de trabajo y beneficios que hayan de proporcior dichos empleos a la población.

Pesos colombianos, dólares y bolívares

El gobernador Vielma Mora, ha opinado, desde el momento en que el presidente Nicolás Maduro Moros decretó la creación de las Zonas Económicas Especiales en los estados Falcón y Táchira, que “debemos darle un valor real a nuestro signo monetario y equipararlo con el peso colombiano”. En ese sentido, ha declarado que “la Zona Económica Especial de la frontera se ha concebido con la idea de que los empresarios nuestros trabajen con bolívares, peso colombiano y dólares. Así está establecido y eso es lo que vamos a lograr”. Recalcó Vielma Mora que “buscamos con este sistema de recibir peso colombiano y dólar americano darle a nuestra moneda el valor que debe tener”.  ¿Cuál será ese valor?, cabría preguntarse.

Dando un poco más de información respecto a lo “especial” de las “Zonas Económicas Especiales”, el Gobernador Vielma Mora dijo que “seguimos evaluando y diseñando un plan general, se contempla disminución del Impuesto Sobre la Renta, hay un régimen especial para la Comunidad de Estados Latinoamericanos y Caribeños (CELAC), está previsto un cordón aduanero y se van a manejar almacenes de depósito en general, almacenes de factoría, y todo lo que se relaciona con la evaluación correcta del valor al de nuestra moneda en frontera”.

¿Necesidades y proyectos de los empresarios o necesidades y proyectos de todo el pueblo?

La prensa de la gobernación reporta que “el gobernador Vielma Mora ha recorrido la frontera en busca de conocer de cerca las necesidades y proyectos de los empresarios e industriales de la zona”. Ha de suponerse que lo mismo estará por  hacer con las comunidades populares, con los artesanos y con los trabajadores y campesinos del Táchira.

Son por ahora más las preguntas que las respuestas: ¿Podría haber fábricas socialistas en la ZEE del Táchira? ¿Se democratizará la planificación de la economía en esa zona con mayor participación social o las cosas las dispondrá el gobierno con los empresarios nacionales y extranjeros? ¿Se mantendrán los derechos y beneficios de la LOTTT y la inamovilidad laboral o habrá un relajamiento de las normas laborales y del despido?  Incógnitas que habrá que aclarar.

 

 



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