08 Mar. 2013.- A las 3:35 de la madrugada de este viernes era mayor el número de personas que arribaba al Paseo Los Próceres, que el que salía. Entrar al salón de honor de la Academia Militar, donde se encuentra el presidente Hugo Chávez, es el objetivo.
Desde la autopista Valle-Coche, en dirección Maracay, se ven personas caminando hacia la entrada a Fuerte Tiuna, por la Alcabala 2, que comunica con la parroquia El Valle.
Grupos de dos, tres y hasta ocho personas caminan con sus banderas, vistiendo prendas alusivas a cualquier campaña electoral, jornada social o actividad de la Revolución Bbolivariana.
Una vez dentro de la majestuosidad de este paseo erigido para honrar a los héroes de la Independencia, la gente va y viene de un lugar a otro, al encuentro del final de alguna cola, lugar donde comienza la esperanza de ver a Chávez de cerca y persignarse frente a él. Tal y como ha hecho la mayoría de los seguidores que ya han entrado.
De acuerdo al ministro para la Comunicación e Información, Ernesto Villegas, para las 4:00 de la tarde del pasado jueves, los visitantes superaban a los 2.000.000 de venezolanos.
Desde el patio de la Academia Militar hacia Los Monolitos hay camiones, identificados como "Teatro Móvil", animando a los militantes en activa vigilia.
"He dormido, he estado unas horas paradas en la cola y ahora me turno con la señora que va aquí, delante de mí", comentaba María Beatriz, ubicada en la mitad de una de las cosas que más se acerca al punto final.
Ella, cargando con un bolso que dice "Chávez vive y vivirá" está "armada", como dice, con agua, sanduches, jugos y manzanas.
"Yo me vine preparada para no pasar hambre. Ahora se levanta mi hijo a relevarme un rato para yo ir a descansar las piernas", mencionaba otra de las señoras en la cola, mientras reía al ver a unos muchachos bailando las canciones de la agrupación "Lloviznando cantos".
Al caminar un poco más, en dirección al paseo Los Ilustres, bastante alejados del punto final, allá en el patio de honor de la Academia Militar, otro camión con música anima a los presentes.
"Eso ha sido toda la noche", relata Marcelo Vargas, en referencia a las constantes canciones revolucionarias que suenan.
A las 4:00 de la mañana un hombre bailaba al ritmo de "!Uh, ah! Chávez no se va" y el resto de sus hermanos compatriotas lo aplaudían y celebraba la hazaña de distraerlos un poco de la agotadora jornada.
Pero más que el baile, lo que realmente era el detonante de aplausos y lágrimas en el lugar era escuchar ese pedacito de canción donde habla el Comandante.
"Estaré con ustedes, siempre. Pasé lo que pase" fue una de las frases repetidas por Chávez en la canción de Rodbexa que emocionó a Elisa Marín.
"Estoy clara que debemos seguir. Seguir la lucha por él, en su nombre, y así será. Vine a verlo para decírselo: "Mi Comandante, por ti" dijo en medio de llanto.
