04 de enero de 2009.- El caos económico
en que tiene el sistema capitalista mundial la economía de los más
diversos países, ha venido significando que en países como España
por ejemplo, nueve de cada diez trabajadores que tienen un empleo en
el sector automotriz se vean afectado por la crisis recesiva, depresiva
y de debacle, en que se encuentra sumido el sistema económico y financiero
internacional, cuyos únicos responsables son los asesores, expertos
y gurúes de la pésima gestión económica del gobierno del criminal
de guerra G.W.Bush, y que ha contado además con la complicidad de las
mafias especuladoras y financieras de la vieja Europa y el Japón.
El turismo,
la construcción y el sector del automóvil son de los más afectados
por la debacle creada por el capital ultra neoliberal en países como
España. En donde la cesantía alcanza ya a tres millones de parados
y que solo en el rubro automotriz esta ya llega a 70 mil trabajadores.
Ahora los
esfuerzos reales por reducir los costos de la crisis no han sólido
ser muy efectivos y solo se traducen en llamados a los capitalistas
(empresarios) a minimizar las consecuencias que esta generando dicha
situación. Lo cierto, es que en la medida que se va profundizando la
debacle, no se puede prescindir de nuevos efectos en lo que ha puestos
de trabajo se refiere, pues empresas como la Nissan ya tienen en plantilla
el presunto despido de 1700 trabajadores.
Pero no solo
eso, también ya se han realizado anuncios de extinguir puestos de trabajo,
suspensión temporal de los contratos y otras medidas adicionales que
permitan salvaguardar los intereses de los grandes empresarios y no
de los trabajadores. De allí que 25 mil trabajadores tendrán que enfrentarse
a la cesantía, con todas las consecuencias económicas y sociales que
esto significa. Las organizaciones empresariales ya han dado a conocer
que durante el presente año nadie se escapara de suspensiones temporales
del empleo.
Es más dentro
de España y la Unión Europea, incluso se habla de la reducción de
los salarios de los trabajadores, pero no se habla de la bajada de los
ingresos de los grandes ejecutivos de las empresas estatales o privadas
que perciben multimillonarios sueldos y un montón de otras regalías.
Dentro de
las empresas que ya comienzan a poner en práctica estas medidas se
encuentra la Ford en Almussafes con 4577 trabajadores afectados por
la paralización de actividades, la Seat de Martorell afectará con
sus medidas la situación de 5.300 trabajadores, la Nissan de Barcelona
anunció la prescindencia de 3322 puesto de trabajo. Mientras que la
paralización de faenas en las plantas de Renault afectara a 10.000
trabajadores, así, suma y siguen los efectos del caos económico que
vive el sistema capitalista en los más diversos lugares del mundo.
Ahora no
solo estamos hablando de los efectos de las crisis en las grandes empresas
automotrices, sino que también de los coletazos que llegan a
la mediana empresa y que produce diversos tipos de accesorios para la
industria del automóvil y que también esta anunciando el despido o
la suspensión temporal de su personal.
La organización
empresarial que agrupa a este sector (Sernauto) estiman en 24.700 los
trabajadores que serán afectados por desahucios definitivos o temporales,
debido a la reducción de la producción de las fabricas de la península
ibérica.
Ahora el
sector empresarial Faconauto ya daba a conocer la perdida de 18.000
empleos durante el año 2008, ello debido a la caída de las ventas
de automóviles.
Si bien es
cierto el movimiento sindical español ha dado muestras de preocupación
ante la debacle del sistema, no es menos cierto que su capacidad de
lucha esta reducida a minimizar los efectos de la crisis entre los trabajadores,
los cuales se manifiestan cada vez más inquietos por la situación,
y amenazan con sobrepasar a sus dirigentes, ante los acuerdos tibios
a los cuales llegan con la patronal, donde los efectos más duros los
tiene que pagar la clase trabajadora.