Diálogo de tontos y peleas callejeras

Diálogo para qué. De qué va hablar el gobierno con sus enemigos ¿Acaso van a intercambiar presos? ¿Van a regular la guerra económica? ¿Para qué dialogar con alguien que no quiere? Eso es una tamaña necedad política. Si tus contrarios quieren quitarte el poder de la forma que sea –lo que parece un propósito legítimo, viniendo de un adversario - ¿Para qué quieres dialogar con él? ¿Acaso quieres que te sigan engañando? ¿Será que necesitas que te engañen cada tanto tiempo? ¿Cuál es el peo con buscar un diálogo con alguien que no está dispuesto a dialogar, que no tiene tema de qué hablar contigo? ¿Cuál es el peo con un diálogo que no cuenta con un motivo claro, un asunto concreto que tratar? Creo que hay algo indigno en todo esto, alguna trampa, una puesta en escena.

O una actitud rastrera con los representantes de la oligarquía criolla. Porque los oligarcas ven en cada diálogo, con un gobierno como este, una oportunidad franca de hacer negocios. Pero Aristóbulo quiere dialogar con la oposición, es decir, con el mensajero ¿Le tienen miedo a los violentos? Si es así, díganlo y los disculpamos. Pero, si mañana mismo murieran todos los dirigentes visibles de la oposición, seguro que aparecen más rápido que inmediatamente sus sustitutos. Igual, si pasa lo mismo del lado de acá.

Y es que los empresarios, propietarios, oligarcas, pelucones que hoy forman parte de los planes de "productividad", del Consejo de economía productiva y del Arco minero son los superiores de la MUD. No solo es el imperio. También sus agentes asociados criollos: Cisneros y Lorenzo Mendoza.

Y es que la MUD y Leopoldo López (primo de Lorenzo) solo significan para estos grandes capitalistas los sustitutos eventuales del gobierno socialdemócrata de Nicolás Maduro. Y esa insistencia de diálogo en el gobierno, de Aristóbulo no es otra cosa que defender su derecho ante la oligarquía de servir al capitalismo junto a su "socialismo en lo social". A los pelucones les da igual si son adecos, neoadecos o si son fascistas ("¡Como si regresa el feudalismo!"), quienes estén en el gobierno, mientras sean ellos los que manden.

Por eso es vergonzoso ese insistente llamado a diálogo a la Mud, solo quieren que los dejen gobernar con el capitalismo sin tantas interrupciones.

Pero a los judas nadie los quiere. Nadie. Inclusive son despreciados por los mismos que compran su traición.

Chávez peleó contra el capitalismo. Su estrategia fue el socialismo. Y su gobierno estuvo por encima de muchos aduladores, traidores y pícaros capitalistas. Por encima; nunca dejó que otro pensara por él porque tenía su idea de revolución, sus principios y convicciones, y se quedó solo. Muerto el comandante, emergieron todos pícaros oportunistas y pusilánimes. Sin convicciones, sin ideas, sin estrategia, les vendieron el alma al diablo. Y ahora compiten con la Mud.

Mientras Chávez luchó contra el capitalismo, el reformismo y la socialdemocracia, y enfrentó con dignidad al imperialismo, sin ambigüedades. Este gobierno solo se le permite pelear en le calle contra el mensajero, contra la Mud. No tiene talla para aguantarle la mirada de los "grandes señores" del capitalismo y del imperio, de Cisneros y de Kerry.

¿Diálogo con la oposición? ¿Para qué? ¿Para que la Mud gobierne con ellos? No podría ser más vergonzosa la derrota, la traición.

Parece más bien una puesta en escena. Mientras, desde lo alto, desde el palco imperial, el imperialismo y sus agentes regionales y criollos se divierten cagados de la risa.



Esta nota ha sido leída aproximadamente 2097 veces.



Héctor Baiz

http://hectorbaiz.blogspot.com/

 hecto.baiz@gmail.com

Visite el perfil de Héctor Baiz para ver el listado de todos sus artículos en Aporrea.


Noticias Recientes:

Comparte en las redes sociales


Síguenos en Facebook y Twitter



Héctor Baiz

Héctor Baiz

Más artículos de este autor