¿Qué tiene que ver la crisis económica y con las políticas económicas del gobierno y todo esto con el socialismo? La escasez y en general la manipulación de la distribución de productos de necesidad básica, el acaparamiento y el desvío de productos fuera de Venezuela, indirectamente fue alentado por el mismo gobierno, cuando decidió frenar los cambios revolucionarios y apoyar, sin disimulos a los empresarios privados. Podríamos decir que partiendo de la premisa de sustituir el rentismo del petróleo debíamos avanzar hacia una Venezuela productiva y así fue como el gobierno frenó el avance socialista, los controles del Estado para las importaciones, el desarrollo de las empresas nacionalizadas socialistas, la recuperación bajo el esquema de empresas socialistas de las impresas abandonadas o funcionando a media máquina, las nacionalizaciones y confiscaciones.
Al contrario, se les dio dólares a los empresarios que estuvieron conspirando. Esto fue desde el primer día de gobierno del presidente Maduro, extendiéndole la mano a los privados y deteniendo los controles socialistas, la centralización de las importaciones, la administración y control del Estado de nuestra economía. El gobierno entendió que producción, industrialización es sinónimo de empresas y empresarios privados, que ellos sí pueden y nosotros no (nosotros, como si hablara Maduro). Y no hablemos del estímulo irracional al consumo que generó el mismo rentismo que ahora se quiere superar. Hasta ahora estamos esperando los efectos positivos de esas decisiones.
Las decisiones del gobierno en el tema económico no se han modificado. Sigue bajo la tesis del apoyo a los privados, el de "diversificar las fuentes de divisas", porque ya no se habla de superar el rentismo petrolero, porque ahora tendremos rentismo minero y de alimentos.
Es decir, ahora el gobierno, basados en una lógica extraña (que ojalá alguien ahí nos la explicara bien, porque no entendemos nada) quiere hacer de Venezuela un país exportador y vivir de la renta que esta produce. Es decir, y no satisfacer nuestras necesidades directamente de lo que somos capaces de producir.
Estamos viviendo unas escenas y sensación de escasez, verdaderas o ficticias, pero que, sea como sea, se pueden acabar con el control central de la economía por el Estado, quitándole espacios discrecionales a los privados, sacándolos definitivamente del juego económico ¿Acaso de eso no se trata la estrategia socialista?
Ayer escuchamos a Diodado Cabello ganado a la idea de unificar las fuerzas chavistas, todas, e hizo un llamado a la disidencia dentro del socialismo, a todos aquellos que criticamos las decisiones tomadas y la actitud del gobierno que ha asumido hasta ahora, luego de la muerte de Chávez. Nosotros la aplaudimos. Sin embargo hoy leemos las declaraciones del presidente en la firma de uno acuerdos de exportación con unas camaroneras y nos damos cuenta que es imposible actuar unidos para confrontar a la derecha y el capitalismo sin, por lo menos, parar los planes de la Zonas Especiales y la exportadera loca para convertir a Venezuela en el Chuandong del caribe.
Leamos y tratemos de entender esto:
Nicolás Maduro: "Ustedes exportan, recuperan su inversión, pagan sus impuestos en dólares y yo les anuncio que utilizaré mis poderes presidenciales para exceptuar pagos de impuestos para que estimulen la producción y exportación"…
Lo primero que vemos es el absurdo de exportar alimentos para comprar alimentos. Y esto, si acaso el Estado recibe algún tipo de beneficio de estos acuerdos, donde serán exonerados aquellos que exporten con sus dólares de pagar impuestos en dólares o con la moneda que sea.
Pero, lo más grave viene aquí: "Esperamos mil acuerdos más como este, así como que todos los empresarios del país, rompan su cochinito y traigan sus divisas para producir en Venezuela."[i]
¿Cuál cochinito es ese? y ¿Por qué el cochinito está fuera del país? La respuesta es obvia. Porque sus dólares no son suyos, son nuestros, de todos los venezolanos. Son los mismos que el gobierno de Maduro les dio hace tres años (dos años, un año), a través de empresas de maletín, y que ahora van a regresar, para volverse a ir, pero de forma legal, en una especie de legitimación de capitales robados ¿De dónde esos señores camaroneros van a invertir 60 millones de dólares en un año, de dónde los van a sacar o los tienen ahorrado, de cuál cochinito? ¿Cuántos empresarios venezolanos son los que piensan legitimar los dólares que nos robaron a todos?
Gracias a esos emprendedores nacionalistas hoy estamos todos endeudados hasta los tequeteques. Gracias a esos empresarios honestos hoy día nuestros sueldos no valen nada; estamos pagando la deuda contraída por el gobierno con medio mundo, porque acabó con nuestras reservas en divisas. Estamos pagando una parte, entre otras, de la fortuna de Lorenzo Mendoza, que ahora quiere dólares para producir cervezas. ¿Por qué el presidente Maduro no le dice al joven Mendoza que rompa el cochinito y compre su materia prima?
Así no se puede Diosdado. No puede ser que se nos mire como tontos. ¡Crea camarada!, que si nos nosotros nos dimos cuenta de este despropósito, otros también lo hicieron; no crea que más nadie se dio cuenta. El asunto es que se nota, ¡se les nota el desacuerdo! …El asunto es que ¡así no se puede! Debería haber, por parte de la dirección del PSUV, por lo menos, más comunicación, más coherencia en cuanto a las vocerías. O usted no ha debido llamar a la unidad, a los críticos de estas políticas disparatadas, o el presidente ha debido quedarse quieto un tiempo, hasta que sobrepase el revocatorio o el golpe (el que venga primero, o los dos) y así continuar con su empeño de entregarle el país a los capitalistas y protegerles sus propiedades del socialismo. Pero el socialismo está presente, sigue siendo el mismo fantasma de Chávez, y está en el corazón y la inteligencia de muchos. Dicen que la mentira tiene patas cortas y no llega muy lejos, camarada.
[i] En: Luis Maldonado Ravelo: "Gobierno firma Alianza con Camaroneros", Ciudad Caracas, jueves 21 de abril, 2016 p. 11
