Caracas , 28 Jun. AVN.- Durante la reunión, en Caracas, del secretario de Estado de Cooperación Internacional del Gobierno del Reino de España, Jesús Gracia, y el viceministro venezolano de Relaciones Exteriores para Europa, Calixto Ortega, ambos países reafirmaron la disposición de continuar sus relaciones bilaterales sobre la base del respeto.
A través de un comunicado, la Cancillería informó que en el encuentro, Gracia indicó que su Gobierno consideró un error la reciente visita a Venezuela del expresidente español Felipe González, quien a principios de junio visitó Caracas para participar de las campañas de la derecha en favor de la excarcelación de Leopoldo López, procesado por la justicia venezolana por promover actos violentos a inicios de 2014, con el plan golpista denominado La Salida, que provocó la muerte de al menos 43 personas.
Luego del rechazo absoluto del pueblo venezolano, el exmandatario español se marchó intempestivamente de Venezuela.
Comunicado íntegro:
El Ministerio del Poder Popular para Relaciones Exteriores tiene a bien informar que a solicitud del Gobierno del Reino de España, el viceministro de Relaciones Exteriores para Europa, Calixto Ortega, atendió al secretario de Estado de Cooperación Internacional del Gobierno del Reino de España, Jesús Gracia, de escala aérea en Caracas hace dos días.
El secretario de Estado español ofreció los saludos de su Gobierno y el mensaje de absoluto respeto por el Gobierno y la democracia venezolana, en el buen ánimo de hermandad que merece unir a los pueblos de España y Venezuela.
En ese sentido, Jesús Gracia comunicó al vicecanciller Calixto Ortega que su Gobierno consideró un error y un fracaso la reciente visita realizada a Venezuela por el expresidente Felipe González, con la intención de acompañar a factores políticos opositores.
La República Bolivariana de Venezuela reitera al Gobierno del Reino de España su práctica abierta y transparente de una diplomacia de paz, respetuosa de las normas del Derecho Internacional Público y de los principios que rigen el buen comportamiento de los Estados soberanos.
