Asunción, 17 Sep. ABN.- El presidente de Paraguay, Fernando Lugo, manifestó este jueves su rechazo a la presencia de 500 militares estadounidenses en Paraguay, prevista para el año 2010 en el marco de un programa de ejercicios llamado Nuevos Horizontes.
“No es un rechazo categórico. Simplemente no creemos conveniente que el Comando Sur de Estados Unidos esté presente en Paraguay con 500 efectivos para este tipo de ejercicios”, señaló el jefe de Estado en conferencia de prensa, reseñó la agencia AFP.
El mandatario explicó que un nuevo escenario generado por la Unión de Naciones Suramericanas (Unasur) en términos de defensa, seguridad y soberanía, “apuesta por la integración regional en primer lugar”.
Lugo comentó que en la última reunión del bloque en Ecuador “fue muy cuestionada la gran presencia de soldados americanos en la región”, refiriéndose al acuerdo entre Colombia y Estados Unidos, que permite la utilización de siete bases militares colombianas por parte de soldados norteamericanos.
“Un despliegue de 500 personas, militares y profesionales dentro del país, no pasa desapercibida. Por eso creo que no sea prudente ni conveniente”, señaló el mandatario.
Durante el gobierno del ex presidente Nicanor Duarte Frutos (2003-2008) la presencia de militares estadounidenses en Paraguay era conocido como operativo Medrete y participaban 400 uniformados extranjeros..
Si bien la tropa de Estados Unidos sostenía que su misión en el país era de realizar servicios de atención médica y perforación de pozos, se denunció en reiterada ocasiones que se encontraba haciendo trabajos de inteligencia.
Medios de prensa paraguayos revelaron que la tarea de los soldados era la observación del Acuífero Guaraní, considerando uno de los reservorios de agua más grandes del planeta.
Informes publicados sobre la presencia de los militares estadounidenses en la nación, señalan que solo en 2001 el Comando Sur realizó más de 70 operativos Medrete, que ya antes eran conocidos como Nuevos Horizontes.
Desde los movimientos campesinos paraguayos, mostraron en reiteradas ocasiones su negativa a esta presencia militar, ya que los uniformados están amparado por un convenio de inmunidad y además filmaban a las comunidades.
