St. Paul 4 de Sept. 2008.- El candidato republicano a la presidencia de Estados Unidos, John McCain, prometió ayer que de llegar a la Casa Blanca, su nación dejará de enviar miles de millones de dólares anualmente a los países exportadores de petróleo "que no nos quieren mucho".
"Cuando sea Presidente nos vamos a embarcar en el proyecto nacional más ambicioso de las últimas décadas", precisó McCain durante su discurso ante la convención republicana en St. Paul, en el estado de Minnesota.
"Vamos a dejar de enviar 700 mil millones de dólares cada año a países que no nos quieren mucho", dijo el senador por Arizona.
En medio de una de las mayores ovaciones de la noche, aseguró que desarrollará una nueva política energética para que Estados Unidos reduzca su dependencia de los exportadores de crudo. Entre los cuatro primeros proveedores de petróleo de Estados Unidos figuran dos países latinoamericanos México y Venezuela.
"Vamos aproducir más energía", afirmó McCain, quien prometió que, de ser Presidente, "vamos a perforar mar adentro, vamos a construir más plantas nucleares" y "vamos a desarrollar tecnología carbonífera limpia".
Leve guiño a los hispanos.
McCain, aseguró que tanto los descendientes de los primeros inmigrantes como los hijos de los recién llegados al país son "hijos de Dios" y "estadounidenses". En un pequeño gesto hacia los latinos norteamericanos, dijo que "creo que todos tienen algo con qué contribuir y merecen la oportunidad de concretar el potencial que les brindó Dios".
Ante 20 mil personas en el estadio de hockey sobre hielo Xcel Energy Center, fue recibido por 2.400 delegados y agradeció al presidente George W.
Bush, por su conducción del país en tiempos de guerra.
Minutos después dos mujeres del público comenzaron a protestar contra la guerra en Irak interrumpiendo a John McCain, y fueron retiradas del evento por personal de seguridad en medio de abucheos de los presentes.
