El plan separatista del Zulia a propósito de la independencia de Kosovo

Separatismo y dominación

Con el anuncio de la independencia de Kosovo el pasado 18 de febrero y el gran respaldo que esa acción ha recibido del gobierno de Washington y los países de la OTAN, varios movimientos con planes de separatismo en países estratégicamente importantes para los intereses de Estados Unidos, el imperio de las multinacionales y el complejo militar industrial, han renovado sus intenciones y expectativas. Uno de esos movimientos es Rumbio Propio de Venezuela, que ha estado activamente promoviendo la separación del estado Zulia de la República Bolivariana de Venezuela desde el año 2005.

Pocos días después de que se hizo pública la independencia de Kosovo, el dirigente del movimiento separatista zuliana, Néstor Suárez, declaró al diario regional La Verdad que “adelantan plan separatista en Venezuela.” Suárez, quien aspira a la gobernación de Zulia, dijo que si “fuera gobernador…convocamos a una constituyente, y podremos constituirnos en un Hong Kong del Caribe, una zona económica y política especial distinta a las demás regiones.” El proyecto de Rumbo Propio incluye “autonomía fiscal y normativa, economía de libre mercado, capitalismo liberal y propiedad privada, incluyendo la privatización de la salud.” Según Suárez, “eso es lo que queremos hacer en Zulia, convertirlo en una región capitalista del primer mundo.”

El plan separatista del estado Zulia ha sido alimentado y promovido por el gobierno de Washington, cuyo ex-embajador en Venezuela, William Brownfield, frecuentemente visitaba la región occidental, denominándola públicamente “la república independiente de Zulia.” Rica en petróleo y otros recursos naturales, y fronteriza con Colombia y el mar Caribe, Zulia es el objeto de ocupación en el nefasto “Plan Balboa”, la estratégia de invasión contra Venezuela diseñada por el Pentágono. El Plan Balboa fue practicado por primera vez en mayo del 2001 como parte de un ejercicio “ficticio” junto con las países de la OTAN. Se realizó como una maniobra “simulada” desde la escuela de las fuerzas armadas españolas, pero desde ese momento, el “plan” se ha ido desarrollando en la práctica. El golpe de estado de abril 2002 que contó con presencia militar estadounidense tanto como apoyo estratégico, político y financiero de Washington y sus agencias, fue la primera manifestación de Balboa. Pero luego de su fracaso, Balboa se ha ido adoptándose a los sucesos y desarrollos en el país para asegurar su ejecución exitósa en el momento determinado.

Aseguraron la gobernación de Zulia en el 2004, aunque perdieron en Falcón, Apure y Táchira, otros estados fronterizas que aparecen “ocupados” dentro del Plan Balboa. Entonces, comenzaron el trabajo fuerte desde Zulia, con la llegada del ex embajador Brownfield justo en aquel momento y el lanzamiento del movimiento separatista “Rumbo Propio” que proclamba su afinidad por el sistema neo-liberal capitalista de Washington. También durante el reino de Brownfield en Venezuela, el conflicto entre Colombia y Venezuela se agudizó, con varios incidentes “diplómaticos” entre los países que culminaron en un estado de “congelación” de relaciones entre los dos gobiernos, y una batalla verbal que ha sido aprovechado por Washington para respaldar más su gran aliado suramericano. El conflicto con Colombia ha permitido que Estados Unidos aumenta su presencia militar en la zona fronteriza con Venezuela, reforzando sus bases militares en la región y equipando mejor el ejército colombiano. Durante este tiempo, Washington también ha clasificado al gobierno venezolano como “narcotraficante” y “colaborador de estados y/o grupos terroristas”, dos denominaciones que “auto-permiten” a Estados Unidos sancionar a Venezuela y manchar su imagen internacional. Pero más importante, estas clasificaciones “justifican” el aumento en presencia militar de Washington por la zona del Caribe (reforzando sus bases operativas en Curazao, Aruba, San Martín, Trinidad y Tobago, República Dominicana, Honduras, Puerto Rico y Panamá) y por la zona fronteriza con Colombia y Guyana.

No es coincidencia que la primera “revolución de colores” o el también lllamado “golpe suave” fue realizado con éxito en lo que antes era Yugoslavia, y lo que hoy se ha convertido en siete países. Esta misma estratégia, que hoy en día se ejecuta en Venezuela a través de sectores de la oposición y movimientos estudiantiles vinculados con la derecha, fue la mecha final que acabó con un estado socialista que ocupaba una zona estratégicamente importante para la dominación de Estados Unidos en el Medio Oriente y Asia Oriental.

Yugoslavia fue picada en pedazos durante y después de la Guerra Fría. Lo que antes se llamaba La República Federal Socialista de Yugoslavia desde el año 1963 (era una monarquía hasta 1945) fue sujeta a una guerra interna promovida por la OTAN y Estados Unidos a partir del 1991 que duró 10 años y resultó en la separación de las seis principales regiones de Yugoslavia. Para mediados del 1991, Bosnia y Herzegovina, Croatia, Macedonia y Slovenia habían declarado su independencia como países separados, dejando solo a Montenegro y Sebia conformando la República Federal de Yugoslavia. Kosovo estaba incluido como parte de Serbia, a pesar de ser una región principalmente habitada por Albanos que siempre habían luchado por su autonomía e independencia. Slobodan Milosevic, quien antes era el Presidente de la región de Serbia del 1989 hasta 1997, ganó la presidencia por el partido socialista, convertiéndose en el primer presidente de la República Federal de Yugoslavia en 1997.

Pero durante todo ese tiempo, la región de los balcanes estaba en guerra. La OTAN atacó a Yugoslavia con una campaña de bombardeo del 1998-1999, terminando la guerra en Kosovo, que había causado la muerte de docenas de miles de personas y permitido la ejecución de crímenes de guerra y crímenes contra la humanidad. Pero la OTAN mantenía como condición la independencia de Kosovo de Serbia, algo que Milosevic no aceptaba. El año siguente, nació el grupo OTPOR y lograron derrotar a Milosevic con las tácticas y estratégias del golpe suave, con el gran apoyo del gobierno de Estados Unidos y sus agencias (la CIA, la USAID, el Departamento de Estado, el Instituto Republicano Internacional, el Instituto por la Paz, etc). Kosovo pasó a manos de la OTAN y luego a las Naciones Unidas, siendo declarado un “territorio bajo la administración de las Naciones Unidas”, y en el 2003, lo que quedaba de Yugoslavia se murió, convertiéndose en la Unión de Serbia y Montenegro. Tres años después, en el 2006, Serbia y Montenegro se declararon estados independientes de uno al otro, y el 18 de febrero del 2008, Kosovo hizo lo mismo.

La estratégia del separatismo es una de las técnicas empleadas por el imperio de Estados Unidos para mantener su dominación sobre los recursos geopolíticos y naturales en regiones importantes para asegurar su poder global. Esta última situación en Kosovo debe servirse como una alerta para Venezuela, ya que Estados Unidos vienen promoviendo el separatismo en el país desde hace unos años. Este año en particular, con las elecciones regionales, podrían intentar ocupar más terreno con sus aliados para poder adelantar el plan separatista.

23 febrero 2008


Esta nota ha sido leída aproximadamente 13867 veces.



Eva Golinger


Visite el perfil de Eva Golinger para ver el listado de todos sus artículos en Aporrea.


Noticias Recientes: