La huella de inclusión del Satélite Simón Bolívar se extiende por Venezuela

El despegue del cohete Larga Marcha 3B portando el satélite venezolano

El despegue del cohete Larga Marcha 3B portando el satélite venezolano

Credito: Xinhua

1º Nov. 2010 - El pasado viernes se cumplieron dos años años del lanzamiento del Satélite Simón Bolívar (SSB), el primer satélite de telecomunicaciones propiedad del estado venezolano y operado por nacionales, que le dio presencia al país en el campo espacial.

“El satélite está, a sus dos años de funcionamiento, completamente operativo y en expansión en términos de lo que es la penetración y el alcance social del satélite”, afirma Ricardo Menéndez, ministro del Poder Popular para Ciencia, Tecnología e Industrias Intermedias (MCTI).

Lo primero que destaca es la “visión geopolítica de parte del gobierno del presidente Chávez que le ha permitido a todos y a todas las venezolanas contar con un satélite de telecomunicaciones”.“Eso era impensable hace algunos años” , dice Menéndez. Y es “consecuencia de las acciones del presidente Chávez para abrir la posibilidad de un futuro distinto para todos los venezolanos”, afirmó al Correo del Orinoco.

“La meta grande que tenemos en 2011 es aumentar la interconectividad de los sistemas de salud y educación. Esa es nuestra prioridad. La segunda es el uso efectivo de la teleducación y la telemedicina, es decir la aplicación de todos los proyectos”, manifestó Menéndez.

Considera que el SSB “es una demostración fidedigna del compromiso de democratizar esa tecnología, que siempre fue asumida como de élites, y que en el caso de las telecomunicaciones, el camino para hacer más dinero”· Agregó que el SSB, a diferencia de otras señales que buscan “dominar a los pueblos”, es una tecnología para liberarlos y permitirles la conexión en zonas remotas”. Apuntó que esta plataforma pertenece a una nueva geopolítica a nivel latinoamericano. Y en este sentido, explicó que 20% de la capacidad del satélite se dirigirá a extender su huella a otros países como Uruguay (sobre cuya órbita está ubicado el SSB), Bolivia y Ecuador, con fines exclusivamente sociales, sin fines de lucro.

“No le damos un uso comercial al satélite, el fin es netamente social”. Afirmó que parte del proyecto es “ir generando plataformas a nivel de América Latina”. Explicó que parte de la potencialidad del SSB-cerca de 10%- está en convenio con Uruguay, por cuanto el proyecto se desarrolló en conjunto con ese país. Pero adicionalmente existe la posibilidad de compartir la capacidad “en función de la integración”. Hasta ahora, en este esquema se han dado pasos con a televisión satelital con la señal de Telesur la cual utiliza la plataforma del SSB.

UN PAÍS CONECTADO

El 01 de noviembre de 2005 se firma el acuerdo con la República de China, para llevar a cabo el satélite y fue el 29 de octubre de 2008 cuando se lanza al espacio. “Han corrido toda suerte de rumores sobre la operatividad del satélite y sus alcances, pero hay una realidad inexpugnable y que algunos medios de comunicación pretenden obviar”. Menéndez da cifras de la operatividad del satélite. “Tiene cerca de 2.500 antenas conectadas que permiten el desarrollo en el área de educación, seguridad y defensa, energía y petróleo, alimentación, salud y conexión de poblaciones”.

Las áreas de cobertura de satélite reciben el nombre de huellas, y proporcionar conexión a poblaciones remotas de la geografía nacional donde, en algunos casos como en el estado estado Delta Amacuro, no llegaba ni siquiera una llamada de telefonía móvil, se le ha llamado “huellas de inclusión”. “Son cómo esas huellas nos ha permitido incluirnos a todos los venezolanos en una visión distinta”, dice.

La interconexión vía satélite de los servicios de internet, permiten abarcar distintas áreas de interés social como la telemedicina, en el que se han incluido 17 ambulatorios rurales ubicados en sitios lejanos de los estados Amazonas, Zulia y Delta Amacuro, para implementar el Sistema de Información Nacional Público de Salud para la Inclusión Social (SINAPSIS).

“Nuestras poblaciones indígenas y rurales pueden ir a los ambulatorias y allí se interconectan a través del satélite para el diagnóstico con médicos, en tiempo real, tanto con el Hospital Cardiológico Infantil Latinoamericano Dr. Gilberto Rodríguez Ochoa como con el Hospital Universitario de Caracas”. La meta para el 2011, refiere Menéndez es sumar 100 ambulatorios más a este Sistema. “Con la experiencia que hemos desarrollado, podemos fortalecer el área de la telemedicina”, dice. Incluso, a través del Sistema de salud se pueden conectar con Cuba, Nicaragua, Brasil o especialistas en Francia.

Los beneficiarios de la teleducación con 1.669 puntos, alcanza a 470.000 usuarios y usuarias aproximadamente. Además, 828 escuelas que manejan en programa Canaima tienen conexión satelital. “El satélite nos ha permitido generar una plataforma de vida distinta para la población”. Advirtió que aunque “queda muchísimo por aprovecharlo” se ven los alcances que tiene el satélite en beneficio de las poblaciones más desasistidas.

Las aplicaciones del satélite abarcan también algunas investigaciones como la que realiza el Instituto Venezolano de Investigaciones Científicas (IVIC) en la isla Las Aves sobre el cambio climático, la cual utiliza la interconexiones del SSB. Los mismo sucede con la radiobase ecológica en la isla de Los Testigos.

Se ha llevado a cabo una experiencia pilotos de televisión satelital abierta con 36 poblaciones fronterizas venezolanas. “Esto es un componente geopolítico de amplia trascendencia porque de otra forma no les llegaba la señal de lo que es nuestra televisión”.

TRANSFERENCIA DE CONOCIMIENTO E INDUSTRIALIZACIÓN

Resalta el titular del MCTI la formación del talento humano en la República Popular China, no sólo con entrenamiento especializado, sino también con estudios académicos. El propio Francisco Varela, director ejecutivo de la Agencia Bolivariana para Actividades Espaciales (ABAE), ingeniero electricista, está doctorado en el área de sistemas y circuitos en aplicaciones espaciales, por la Universidad de Aeronáutica y Astronáutica de Beijing, China.

Explica Varela, que hace 3 meses, la primera generación de venezolanos recibió entrenamiento de los compatriotas que se formaron en China.


Un alcance adicional, señala Menéndez, es la industrialización de componentes de telecomunicaciones vinculados directamente con el SSB. En conjunto con China se está instalando en Borburata (Carabobo), una fábrica de satélites pequeños, para la observación terrena del territorio venezolano en “temas como el cambio climático, procesos de desertificación de suelos y estado de las cuencas hidrográficas”. Pero también la observación terrena tiene una aplicación en lo concerniente a seguridad y defensa porque permite alertar “sobre cambios de patrones de cultivo y vegetación que pueden ayudar a la detección de siembras de droga en zonas fronterizas”.

Asimismo, con estas antenas, que se ubican en otras órbitas a menos distancia del planeta, se pueden localizar pistas ilegales para tráfico aéreo, y cambios en los suelos y cauces de río, lo cual es de mucha utilidad en lo pertinente a protección civil.

Otra fábrica se instalará en la zona de Carimao, en Filas de Mariche, en Petare, para producir antenas receptoras diseñadas especialmente para trabajar con SSB. Están en fase de fabricación de prototipos y pruebas con el satélite. Informó Menéndez que la primera unidad de la fábrica de antenas de satélite se llevará adelante con los comités de saberes y producción de los consejos comunales de las comunidades aledañas, de manera que serán los habitantes de los barrios quienes fabricarán estas antenas, con la formación y las directrices del Ministerio.
VENEZUELA ENTRA A LA ESCENA DEL CAMPO ESPACIAL

Expresa el ingeniero Francisco Varela, de la Agencia Bolivariana para Actividades Espaciales (ABAE), que lo “importante del proyecto del SSB es que fue concebido de tal manera de que Venezuela ingresara definitivamente al campo espacial y de allí se originó el Centro Espacial Venezolano (CEV), que dio cabida a la ABAE, que tiene la responsabilidad de llevar las políticas especiales a nivel nacional”.

Agrega que Venezuela tomó esta decisión de manera estratégica, no simplemente para la compra y puesta en órbita de un satélite de telecomunicaciones. “Aunque hemos dado pequeños pasos, estamos empezando en la parte formativa, y transitamos un estado incipiente, es importante resaltar que la voz de Venezuela a nivel internacional desde ya es considerada”.

Explica que las políticas internacionales se discuten y deciden en el Comité para la exploración y uso pacífico del espacio ultraterrestre, que depende la Organización de las Naciones Unidas. “Venezuela empieza a ingresar en todo lo que es el manejo de política espacial”. Antes sólo existía una presencia diplomática de parte del país, pero ahora la presencia es técnica y política. A este foro internacional, Venezuela ha llevado la visión de que la prioridad, en el uso del espacio ultraterrestre, deben tenerlo los “pueblos y los estados por encima de los intereses corporativos”.

Agrega que la Constitución de 1999 enfatiza el derecho de la nación “al acceso del espacio suprayacente, a lo que es considerado patrimonio de la humanidad”. Pero existen poderosos intereses económicos detrás de la asignación de las órbitas para satélites geoestacionarios como el SSB. Señala Valero que aunque el universo es infinito, las ubicaciones orbitales son “un recurso limitado”, puesto que deben estar a una distancia determinada del planeta. “Muchos satélites están ocupando esas órbitas o posiciones geoestacionarias con intereses completamente corporativos, sólo para el alquiler de servicios de telecomunicaciones”, refiere Valero.

“Debe garantizarse un acceso equitativo y donde la necesidad de los pueblos y de los Estados” deben anteponerse a intereses con fines de lucro, afirma Valero. Agrega que se está promoviendo a nivel internacional, con el apoyo Grupo Latinoamericano y del Caribe (Grulac) una declaración de Estado, en la que se expresa que lo “primordial son los proyectos de inclusión social que se generen desde los estados”.

CONEXIÓN SIN LÍMITES

* 2.428 localidades son atendidas con el ABA (internet de CANTV) satelital

* 1.669 puntos en educación conectados a través del satélite Simón Bolívar

* 470 Centros Bolivarianos de Informática y Telemática (CBIT)

* 459 Infocentros

* 358 Escuelas

* 289 Centros de Gestión Parroquial (CGP)

* 36 Misión Sucre

* 57 Otros Educación

* 135 puntos de seguridad y defensa conectados en el territorio nacional

* 89 puntos de la plataforma de Petróleos de Venezuela

* 214 puntos de la plataforma de alimentación

* 42 puntos en salud

* 133 poblaciones distantes de la capital


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