Un día como hoy, Venezuela recuerda con orgullo la histórica gesta del 13 de abril de 2002, cuando el pueblo, en unión cívico-militar, se movilizó para rescatar al presidente Hugo Chávez, quien había sido secuestrado por factores golpistas.
Este hecho, marcado por grandes pérdidas humanas y materiales, demostró la fuerza y soberanía del pueblo venezolano, que reafirmó su resistencia y determinación para defender sus propias luchas.
El 13 de abril de 2002, tras la autojuramentación presidencial de Pedro Carmona Estanga, el titular de Fedecámaras, luego de la Masacre de Puente Llaguno.
En ese momento, el pueblo venezolano protagonizó una acción popular sin precedentes, exigió el retorno al poder del presidente constitucional Hugo Chávez.
La unión cívico-militar se erigió como el factor determinante que impidió las pretensiones conspirativas de la oposición nacional e internacional.
Lo que demostró ,una vez más, la fortaleza del pueblo venezolano en la defensa de su soberanía.
Este acontecimiento histórico no solo marcó el devenir de la Revolución Bolivariana, sino que también influyó significativamente en el futuro político del país.
La resistencia del pueblo venezolano en aquellos días oscuros de abril de 2002 demostró su capacidad para sobrevolar las circunstancias adversas.
13 de abril de 2002 en la memoria
Hoy, al conmemorar 22 años de esta gesta histórica, Venezuela levanta las banderas de la paz en la defensa de su soberanía. También para hacer frente a cualquier intento de desestabilización de la nación.
La memoria del 13 de abril de 2002 perdura como un símbolo de la fuerza del pueblo venezolano y su capacidad para resistir y prevalecer ante los desafíos.
La unión cívico-militar, es fundamental en la historia reciente de Venezuela, continúa siendo un pilar en la defensa de la estabilidad y la paz del país.
A su vez, impidiendo una y otra vez las pretensiones conspirativas de aquellos que buscan socavar la voluntad del pueblo
Al respecto, el presidente Nicolás Maduro expresó a a través de la red social X:
"Hace 22 años el fascismo de los apellidos dirigió el asedio a la Embajada de Cuba en Venezuela y el Golpe de Estado contra Chávez, los mismos que piden sanciones y siempre han atentado contra el pueblo venezolano. ¡Basta de cinismo! ¡Vivan el pueblo libre y consciente de la Patria!", aseguró.
Asimismo, enfatizó en que la oligarquía más nunca volverá, "hace 22 años, la esperanza está en la calle, con las mujeres, juventud y el pueblo venezolano que rechaza la traición y a los lacayos del imperio que siguen arrastrándose estadounidense que hoy siguen arrastrándose, implorando más sanciones y bloqueo contra nuestra Patria. El pueblo venezolano es consciente de su historia".
En este contexto, Venezuela reitera su compromiso con el fortalecimiento de la democracia y determinación para mantenerse firme ante las presiones tanto nacionales.
La gesta del 13 de abril de 2002 sigue siendo un recordatorio de la capacidad del pueblo venezolano para resistir y prevalecer, y su voluntad inquebrantable de defender su derecho a gobernar su propio destino.