Médicos cuasirevolucionarios y Mario Silva

Perdí la cuenta de los años que tengo que no cotizo a un Colegio de Médicos y al Impres, creo que son mas de 15. La Federación Medica Venezolana hace ya décadas que secuestró ese ente que alguna vez debió ser gremial y que luego en la IV República se transformó en instrumento político de la derecha, y al cual había que plegarse para poder ingresar a un post grado , tener un cargo en un hospital o ambulatorio. Es decir, el completo control del sector salud durante mas de 40 años; léase MSAS,IVSS,IPASME, etc. Los médicos que desde nuestra época de bachillerato eramos consecuentes con una formacíón política humanística(comunistas como ello nos llamaban de forma genérica y despectiva) estábamos marcados para toda la vida, es así que cuando me gradué y solicité trabajo en una Dirección Regional de Salud lo primero que pidieron fue el carné de AD, intentaron coartar el derecho a la organización gremial de internos y residentes, mas tarde amañaron los concursos de post grados y solo los hacían (en su mayoría) quienes mantenían una postura rastrera. Con el pasar del tiempo vimos con impotencia como el clientelismo adeco-copeyano se devoraba (devora aún) las nóminas del MSAS, se deterioraba la infraestructura , el equipamiento de hospitales y red ambulatoria ,además se era permisivo con el cabalgamiento de cargos y horarios por parte del personal médico.

Además de todo lo antes expuesto si sumamos el hecho de que la formación del médico ( pre y postgrado) ha sido dirigida hacia el individuo y no a las comunidades;con un alto componente mercantilista cuyos orígenes mas claros se encuentran en la primera administración Caldera cuando este crea las pólizas HCM para el sector público, es fácil entender el porque un importante sector de médicos venezolanos se encuentran del lado de la oposición, también se deduce entonces quienes son los que han luchado por privatizar la salud y mantener el status quo de ineficiencia y cobro de grandes comisiones y demás corruptelas en el Ministerio de Salud.

La práctica de las solidaridades automáticas ha sido una vieja manera de evadir responsabilidades por mala praxis, impericia o negligencia médicas, invocar el Código de Deontología Médica para casos como el presentado acertadamente por el camarada Mario Silva refleja ignorancia de la Leyes venezolanas y es hasta similar actitud a esa que tomaron Carmona y su séquito de golpistas de estar por encima de la Constitución y el Estado. No es la FMV la que vá a sentenciar penalmente a un médico infractor, como lo explica el artículo 216 del Código de Deontología; solo a través de un Tribunal Disciplinario se realizaran las sanciones disciplinarias que incluyen la recomendación y trámite de suspensión del ejercicio profesional ante los organismos competentes del Estado. Razones sobran para justificar Barrio Adentro, pero sobre todo para que médicos venezolanos como yo la defiendan aún a costa de mi vida. Sin Barrio Adentro nuestros compatriotas mas humildes estarían engrosando cada día a las estadísticas de morbi-mortalidad, serían historia; hoy la hacen defendiendo junto a médicos cubanos y venezolanos los Núcleos de Atención Primaria ,( mal llamados consultorios populares)los CDI,CAT,CRI,CSI,el Cardiológico Infantil Latinoamericano y Misión Milagro. Cualquier médico venezolano que trabaje en Barrio Adentro o esté haciendo el post grado de Medicina General Integral puede dar fé que las relaciones profesionales y académicas se han llevado dentro de un clima de respeto mutuo. Los médicos venezolanos revolucionarios hemos tenido que enfrentar los ataques groseros y absurdos de otros colegas que han lanzado especies contra los médicos cubanos como la falta de formación profesional ( han dicho que son técnicos) o hasta descabelladas ilusiones de ser espías del G2. Algunos colegas disociados han llegado al extremo de no aceptar remisiones ( referencias hospitalarias) por el solo hecho de ser elaborados por un médico cubano o de ser emitidas de un CDI hacia un hospital público, colocando la vida del paciente en riesgo.

En conclusión, un médico que se auto denomine revolucionario, humanista y socialista mas allá de las palabras debe demostrarlo con los hechos y estar al lado de las mayorías populares, invocar prácticas inmorales y antitéticas heredadas de un pasado igualmente oscuro es inexcusable.
El maestro y padre de la deontología en el país Dr. Luis Razetti, atribuía mayor énfasis en el aspecto sacerdotal del ejercicio médico, a su hondo contenido humano, y no se cansaba de recalcar que el objeto de la Medicina es hacer el bien, dijo entre otras sabias palabras ¨llegar a la cumbre de la riqueza dejando en las zarzas del camino jirones de dignidad ,no es haber cumplido un deber,sino haber realizado una autolísis moral incompatible con el honor¨. Moral y luces para un sector de médicos y estudiantes de medicina de la elitistas universidades públicas.

guanaguanare@yahoo.es


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