"estamos mal pero vamos bien….estamos entrando al primer mundo"
Carlos Menem, Febrero de 1990
En estos días me entretenía haciendo zaping entre VTV, VIVE y Telesur (obviamente soy un típico televidente chavista) cuando me detuve a seguir el programa "Mesa Redonda Internacional" que transmite Telesur, donde tres especialistas cubanos analizaban la actual situación política y económica de América Latina. Muchas precisiones y argumentos interesantes se expresaron en ese programa, por ejemplo como en Ecuador, donde el experimento neoliberal había llegado a su non plus ultra con la "dolarización", se abría una nueva etapa con el triunfo de Correa, después de la torta de Lucio Gutierrez. Así sucesivamente se hacia un recorrído por los cambios en proceso en Venezuela, Bolivia, Nicaragua, etc. Al momento de comentar la situación en Argentina me sorprendió que uno de los participantes se refería a la catastrófica gestión de Menen entre 1989 y 1999, como aquel Presidente que acuñó la lamentable y cantinflérica frase de "Estamos mal pero vamos bien…."
Confieso que tuve una extraña molestía, pues aunque por razones sobradas Teochoro no es santo de mi devoción, pensé "bueno pero este especialista cubano no sabe que esa frase es original de nuestro inefable Teodoro", el histórico fundador del Movimiento Anti-Socialismo (MAS). A fin de cuentas es natural como venezolano, que uno se preocupe si a Simón Diáz le plagian "Caballo Viejo", al margen de las opiniones políticas de Tio Simón, o por ejemplo que salga por ahí alguien diciendo que "Moliendo Café" es la letra original de un tango de Gardel, es motivo para dejar de lado las diferencias ideológicas y salir en defensa de los derechos del autor vernáculo. A fin de cuentas Teodoro será un traidor pero siempre se le ha tenido como un tipo creativo y original. Y eso hice en efecto, me fui directo a la computadora y en el buscador de costumbre introduje "estamos mal pero vamos bien" (hagan la prueba).
¡Oh sorpresa!. Me encuentro con lo siguiente: "Carlos Menem solía decir: "estamos mal, pero vamos bien". Muchos creyeron eso en 1995 y votaron su reelección. Es que, pese a las penurias y barquinazos, parecía "ir bien" el proyecto de inserción de Argentina en la globalización. Hoy, la percepción popular es diferente (y más acertada): "estamos mal y vamos peor" (Crisis de la economía argentina:Triste, solitario y final...por Roberto Ramírez y Ariel Orbuch)
En otra entrada se lee: "Se podría utilizar una frase que empleó en los comienzos de su primera presidencia Carlos Menem para sintetizar el sentir de la opinión pública: "estamos mal, pero vamos bien, estamos entrado al primer mundo".
Menem comenzó su primera presidencia en 1989, es decir siete años antes de que Teochoro fuera designado flamante Ministro de Cordiplan de Caldera II en 1996, donde por cierto Caldera había designado antes a Asdrúbal Baptista, Enzo del Bufalo y a un tal Corrales entre 1994 y 1995.
Otro desencanto más…! Diría el matacura. Pues es así, resulta que Teochoro simplemente se fusiló la frase de Menem, que para nada esa expresión es fruto de la "genialidad" del "catire del Batey" (aunque parece que ahora tampoco está claro eso de donde nació, según el libro "El Código Petkoff" fue en Bulgaria). Pues bien resulta que esta es una nueva faceta que se le descubre al personaje, la cleptomania, el fusile, el plagio descarado. Si a esto le suman la blancamitomania que ha confesado recientemente, no hay la menor duda, Teochoro es un clásico tramposo de la política.
Pero al menos hay que reconocerle al cleptómano Petkoff que a la hora de copiar es mas o menos selectivo, fíjense que al menos tuvo la decencia de no fusilarse la frase completa de Menem, así al menos nos ahorro el verlo hacer el ridículo con aquello de
"estamos entrando al primer mundo", nada más y nada menos que de la mano del FMI con aquel esperpento de la Agenda Venezuela.
Es bueno entonces que quede para la historia cual es el origen de esta frase, que muchos creen que es un destello de ocurrencia original de Petkoff en su "momento estelar" como ministro de Caldera, cuando en realidad debe ser recordada como el triste momento en que Caldera se arrodilló ante el FMI y su Ministro parlanchin se fue a echar mano del arsenal retórico del Turco Ladrón, como conocen a Menem en Argentina. Una frase tramposa que ofrecía el paraíso después de apretarle el cinturón al pueblo, el intento de justificar con un futuro mejor la sangría de privatizaciones y la entrega de la soberanía económica del país. Menos mal que Teocopión sólo se quedo en la frase plagiada y en el calco del esquema…los venezolanos le cortamos el camino en diciembre de 1998.
Es triste ver al final de su vida a este personaje, en el que algunos creyeron en el pasado, revelado como un tipo gris e intelectualmente deshonesto. No me extrañaría que en el futuro algún acucioso investigador encontrara que buena parte de la ideas y frases que este individuo escribió en los sesenta y los setenta, no fueron más que vulgares plagios de los escritos de los eurocomunistas franceses e italianos. Pobre Teocopión
