Es lo que les queda. Ni siquiera se detienen a pensar en las consecuencias de una patraña del tamaño del montaje a Mario Silva. No les importa ya nada. Esos tipos son capaces de hacer cualquier cosa. Son supremamente burdos, el colmo de la audacia estúpida, de la torpeza. Es ganancia para nosotros el saberlo, que son operaciones que enseñan en las facultades de “ciencias políticas” gringas como de lo más natural, sin comportar ningún tipo de moral. O mejor dicho, la moral de lo inmoral, de lo sucio, el fin justifica los medios... y los "medios de comunicación"
Pero pensemos que hay una enorme cantidad de gente con esa moral, que cree en esos despreciables seres. Hay un registro contable muy reciente. Habría que inferir que media Venezuela está mentalmente envenenada, enferma, intoxicada; que es posible creer que haya gente que la comulgan con ruedas de molino, y que la basura sea su razón política. Asunto grave. O sea media Venezuela con disociación psicótica. Media Venezuela que siendo pleno medio día con un sol brillante, afirmaría que es noche oscura. Y han pasado 20 años de tinieblas para esta pobre gente. Como para una tesis de psicología.
Este hecho sociológicamente entendido, es la consecuencia de siglos de cultura y tradición, que como plomo ha pesado históricamente estructurando mentes y corazones en todos los sectores de la población venezolana y latinoamericana. Carlos Fuentes en México y Vargas Llosa en Perú, histerias y estridencias literarias, berrinche social de orilla como dice Rothe, por citar algo de lo más encumbrado, son ejemplos de ese malinchismo. Y de ahí para abajo. O mejor, de ahí para arriba.
Queda la mitad de la tarea por hacer, y digo mitad porque nuestro Comandante Chávez nos dejó la otra mitad hecha. Hay que ir al rescate de esos siete millones de compatriotas que no pueden ser oligarcas y que están en las tinieblas. Es el trabajo político-económico-educativo, de integración y unidad, con El Plan de la Patria, lo que hará que día a día la escoria de la derecha quede aislada de lo más puro que tiene Venezuela, su bravo pueblo.
¡Chávez vive!
¡La lucha sigue!
