9 de marzo 2008 / Con la fuerza que caracteriza al pueblo revolucionario la Asociación Nacional de Medios Comunitarios, Libres y Alternativos (ANMCLA), realizó en la montañas de Miranda, la 2da asamblea de voceros comunitarios. Más de cien compañeros delegados y delegadas de todo el país, nos encontramos para debatir y organizar la construcción de un sistema público de comunicación en manos de las comunidades. Durante tres días de caluroso de bate se consensuaron las líneas estratégicas para el avance del movimiento en el primer semestre de este año.
Vivimos un momento difícil de la revolución bolivariana. Ante la ofensiva del imperialismo y sus lacayos nacionales, y la consolidación de sectores reaccionario a lo interno del proceso, el movimiento reivindica la construcción autónoma, la democracia de la calle y el poder del pueblo. En las luchas diarias de nuestra s comunidades y en la capacidad de concretar sus sueños se define el futuro de nuestra revolución.
La agenda comprendió un ambicioso plan educativo con énfasis en la construcción de transmisores, creación de unidades de producción audiovisual y radial, talleres de habilitación, y formación sociopolítica, desde un criterio de articulación de las redes. El plan alcanza la cualificación de 400 compañeros de más de cien colectivos. También se duplicarán las diez unidades de producción audiovisual que se instalaron en el 2007.
El colectivo debatió la posición de An mcla frente a la reforma de la ley de Telecomunicaciones y el reg lamento de radios comunitarias. La actual ley, creada por Miquilena y con abierto contenido neoliberal, debe ser sustituida por una que socialice el espectro radioeléctrico, que eleve a los medios comunitarios, libres y alternativos a rango de ley y que contribuya a multiplicar las diversas voces, imágenes y sonidos del pueblo en lucha, desde su autonomía, es decir la creación del sistema público de comunicación en manos de las comunidades populares .
Después de un análisis de coyuntura y con los insumos del diagnóstico por estado, terminamos este exitoso encuentro con la organización de un plan de lucha y movilización.
¡Hacia la construcción del sistema público de comunicación en manos de las comunidades populares!
En decisión colectiva y con fervor militante.
Alegres, subversivos y siempre desobedientes....
¡Todo el poder para el pueblo!