23 oct. 2016 - Cientos de personas marcharon por las calles de Washington, protestando por las deficiencias del sistema electoral que contraviene los principios democráticos.
Denuncian manipulación en las elecciones por parte del sistema político imperante, que responde a los intereses corporativos y no al grueso de la población estadounidense.
Cientos de estadounidenses marcharon en contra de lo que consideran un sistema electoral amañado. Bajo el denominativo ‘Marcha para recuperar nuestra democracia’, denunciaron las falencias del sistema que favorece al ‘establishment’ corporativo.
Durante las primarias, el senador demócrata estadounidense Bernie Sanders, había denunciado que ser víctima de un sistema amañado, denuncia corroborada por correos electrónicos publicados por Wikileaks. Ahora es el propio Donald Trump que hace similares las acusaciones al sistema. A su paso por la Casa Blanca, los manifestantes reclamaron la devolución del sistema de un ciudadano, un voto.
El activismo dice que el sistema político vigente utiliza los medios de comunicación como su aparato propagandístico para desinformar a los estadounidenses y acusan al Gobierno de EE.UU. de ejercer presión sobre Ecuador, para evitar más revelaciones de Wikileaks.
La eliminación del colegio electoral y la implementación de términos máximos para funcionarios electos, son otras demandas del activismo.
