16/07/2016.- Fuentes de inteligencia en la zona señalan que luego del fallido golpe militar liderado por una facción rebelde del ejército de Turquía; los agentes de inteligencia turcos, que habían estado entrenando al grupo terrorista Nureddin al Zinki, han recibido la orden de abandonar de inmediato el campo de batalla de Alepo (República Árabe Siria). A esto se suma el fuerte avance de las fuerzas del Ejército sirio y sus aliados, quienes han decidido ampliar un cerco sobre aquellos sectores en donde se mantiene la resistencia terrorista.
Así mismo las fuentes indican que: “Por otro lado, algunos grupos terroristas no tienen intención de participar en la batalla de Alepo contra las fuerzas del gobierno sirio. Todo esto ha obligado a Turquía a comenzar a evacuar a sus oficiales de inteligencia e instructores de Alepo”, añadieron.
Balance del conflicto en los últimos cuatro días
“Más de 500 terroristas han muerto en los últimos cuatro días en la ciudad siria de Alepo.
Turquía y otros patrocinadores del terrorismo en Siria han llegado a la conclusión de que los grupos terroristas en Alepo no pueden resistir la ofensiva del Ejército sirio y sus aliados en la ciudad”, señalan las fuentes.
Ahrar al Sham ha sido acusado por el Ejército Sirio Libre y los grupos vinculados a Al Qaida, incluyendo el Frente al Nusra, de traición por negarse a enviar a más combatientes a este frente.
El jueves, Abu Yusuf al Muhayir, un portavoz de Ahrar al Sham, subrayó que el grupo terrorista no iba a participar en los combates en las Granjas de Maalah, en el norte de Alepo, contra el Ejército sirio y las fuerzas populares señalando que los militantes que tomen parte en la batalla de Alepo estarán condenados a experimentar una “derrota aplastante”.
Turquía retira de urgencia tropas invasoras en la vecina Irak
Por otra parte,el portal Web Al-Manar informó que el conflicto militar interno en Turquía, ha obligado al gobierno en retirar de manera apresurada a sus tropas “estacionadas” en Irak y vuelvan a sus guarniciones correspondientes del país.
El Ejército turco de manera unilateral y contraviniendo leyes internacionales decidió invadir territorio iraquí, enviando a cientos de tropas a una base militar en el norte de Iraq con “la excusa” de entrenar a las fuerzas kurdas que luchan contra el Ejército Islámico (Daesh en árabe).
El gobierno y el pueblo presentaron una queja formal ante la ONU por la invasión del gobierno turco. Iraq rechazó este despliegue militar el cual trajo recuerdos de la materialización de los sueños expansionistas del presidente turco, Recep Tayyip Erdogan y sus seguidores.