"Es un error mío"

El Papa pide disculpas por "ignorar" a la clase media

El papa Francisco durante la conferencia de prensa a bordo del avión de regreso a El Vaticano desde Paraguay

El papa Francisco durante la conferencia de prensa a bordo del avión de regreso a El Vaticano desde Paraguay

Credito: Reuters

13 de Julio.- El Papa Francisco ha admitido que había pasado demasiado tiempo centrado en los pobres sin tener en cuenta las preocupaciones de la clase media, ofreciendo una rama de olivo a los católicos conservadores que temen que sea demasiado radical.

En declaraciones a bordo del avión oficial, el Papa en su camino de regreso de una gira de una semana por América del Sur, dijo que tenía que ponerle más atención a los desafíos que enfrenta la clase media.

Al preguntársele por qué rara vez había hablado de las familias de clase media que pagan impuestos, en vez de concentrarse solamente en las marginadas y pobres, dijo: "Tienes razón es un error mío no pensar en esto".

Las declaraciones conciliadoras pueden haber sido dirigidas a estadounidenses que han visto su crítica a la globalización y el capitalismo, con alarma.

El Papa Francisco hará su primera visita oficial a los Estados Unidos en septiembre, visitará Filadelfia, se dirigirá a una sesión conjunta del Congreso en Washington y pronunciará un discurso ante la ONU en Nueva York.

Rush Limbaugh, conservador que tiene un programa de radio, ha descrito los puntos de vista del Papa de la economía mundial como "marxismo puro".

Líderes republicanos rechazaron su encíclica sobre la amenaza que representa para el planeta el calentamiento global y el desarrollo económico sin restricciones, cuando se publicó el mes pasado.

Jeb Bush, quien está haciendo campaña para la presidencia, dijo que el Papa no debería haber hecho una clara relación entre el desarrollo económico y el cambio climático.

"No obtengo mi política económica de mis obispos, mis cardenales o mi papa", dijo Bush, un ferviente católico.

Durante una sesión de una hora respondiendo preguntas a los corresponsales del Vaticano, el Papa dijo que estaba dispuesto a abrir un diálogo con los estadounidenses que no estaban de acuerdo con sus advertencias sobre los excesos del capitalismo y los peligros de poner el lucro antes que a las personas.

"Me enteré de que había algunas críticas por parte de los Estados Unidos ... no he tenido tiempo de estudiar esto bien, pero toda crítica debe ser recibida, estudiada y luego debe venir el diálogo", dijo.

"El mundo está polarizado. La clase media se vuelve más pequeña. La polarización entre ricos y pobres es grande. Esto es cierto. Y, tal vez esto me ha llevado a no tener en cuenta a esta (la clase media)" dijo. "Necesito ahondar más en esto".

En su elección en 2013, el Papa habló de su deseo de crear "una Iglesia pobre para los pobres" y ha acusado con frecuencia al capitalismo moderno de causar desempleo, desesperación social y daño al medio ambiente.

Durante su gira de ocho días de Ecuador, Bolivia y Paraguay, describió la persecución "sin restricciones" de dinero como "el excremento del diablo".

El pontífice de 78 años, criticó un sistema económico que "ha impuesto la mentalidad de lucro a cualquier precio, sin ninguna preocupación por la exclusión social o la destrucción de la naturaleza".

Cuando se le preguntó sobre la crisis económica griega, el Papa tuvo cuidado de no criticar abiertamente a los acreedores internacionales que han obligado a Grecia a tragarse un doloroso programa de austeridad a cambio de un tercer rescate.

"Sería demasiado simple decir que la culpa es sólo de un lado", dijo en el avión que lo llevó de regreso a Roma.

Pero sí dijo que prestarle cada vez mas dinero a un país para pagar sus deudas en constante aumento, no era sostenible.

"Espero que encuentren una manera de resolver el problema griego y también una manera de supervisar, de manera que el mismo problema no vaya a ocurrirle a otros países. Esto nos ayudará a avanzar, porque este camino de préstamos y deudas, al final nunca termina".

Uno de los momentos más memorables del viaje de América del Sur fue cuando Evo Morales, presidente de Bolivia, le regaló al Papa una escultura con el cuerpo de un Cristo crucificado clavado a una hoz y un martillo.

Fue visto como un gesto provocador, pero el Papa dijo que no se había ofendido por el regalo y lo llevaba consigo al Vaticano.

Era una réplica de una diseñado por un sacerdote jesuita que fue torturado y asesinado por los escuadrones paramilitares de Bolivia en 1980.

El Papa negó informes de que había bebido un té hecho de coca, el principal ingrediente de la cocaína.

Fue ampliamente informado que en el avión desde Ecuador hasta Bolivia, bebió una mezcla de hojas de coca, manzanilla y semillas de anís con el fin de combatir los efectos del mal de altura cuando aterrizó en el aeropuerto internacional más alto del mundo, en las afueras de La Paz.

"Yo nunca he probado la coca (hojas), vamos a estar claros sobre eso", dijo.

Su manera de sobrevivir a la agotadora gira por el continente fue beber mate, una infusión rica en cafeína, que es popular en su natal Argentina, dijo.

Traducción: Aporrea.org

Fuente: http://www.telegraph.co.uk/news/worldnews/the-pope/11736927/Pope-apologies-for-ignoring-middle-classes.html



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