Madrid, junio 2 - Alberto Garzón presenta esta semana su libro La Tercera República. Lo hace en el momento más apropiado, en plena abdicación del Rey Juan Carlos. Para el diputado de Izquierda Unida esta etapa supone una oportunidad para cambiar el sistema y consolidar la participación democrática.

¿Qué supone la abdicación del Rey en este momento?

Es un reflejo de la crisis del sistema porque el bipartidismo se acompaña de una tercera pata, que es la monarquía, que son los responsables en última instancia de esta forma de hacer política corrupta y casi clientelar, y que nos ha conducido a esta crisis. Por lo tanto, se trata de una crisis de sistema y se abre una oportunidad para el país, para los que somos jóvenes, para una generación estafada, robada, y es hora de un proceso constituyente con otra política, otra economía, y donde la Casa Real no cabe en absoluto. La única forma de evolucionar de la Casa Real es desapareciendo. Ahora mismo, por principio democrático, es hacer un referéndum de monarquía República.

¿Es el próximo plazo?

Mantenemos esa petición de referéndum, porque es el momento perfecto de que la gente tenga derecho a decidir y librarnos del parasitismo real.

¿Y qué plazos manejáis?

El calendario es inminente. No hay tiempo. Va a ir muy rápido. Pero Felipe no va a contar con la legitimidad de una parte del parlamento. Eso supongo que supondrá un obstáculo notable.

Tal y como está planteado el sistema, ¿hay oportunidad real de que ese referéndum se lleve a cabo?

Formalmente no. Formalmente lo echarán atrás, se va a bloquear. Falta por conocer la postura del Partido Socialista, que siempre está en una contradicción en este tema. Pero está la presión social. Por ejemplo, hoy nos reuniremos en las calles y plazas a las 20:00 y creo que puede ser un símbolo muy poderoso de la voz del pueblo, que reclama otro funcionamiento.

¿Esta abdicación era esperada?

Todo esto es parte de una cronología esperada, pero la precipitación con la que la han hecho después de las elecciones europeas refleja que lo que ha ocurrido es un adelantamiento de los fenómenos.

¿Entonces este anuncio es una estrategia tras las elecciones europeas?

Creo que ha sido una improvisación tras haber visto la debacle del bipartidismo en las europeas. Tienen miedo a esos resultados, a ese menos del 50% de bipartidismo y son los únicos partidos monárquicos en el parlamento. Y no son ni un 20% del censo. Le ven las orejas al lobo después de estos resultados, después del ascenso de IU, de Podemos, de los movimientos sociales… Saben que la segunda República llegó con unas elecciones municipales, saben que el clima es el que es e intenta cerrar este proceso.

¿Esto es una segunda transición?

Ellos van a intentar hacer otra transición dirigida desde las élites del poder, tanto económico como político, y vamos a romper con eso. Tenemos que hacerlo. Vamos a intentar aprovechar esta oportunidad y hacer democracia desde abajo, de la gente que sufre el desempleo, la pobreza y la miseria, y no desde los ricos.

Su libro llega en el momento más adecuado…

Sí, porque la República es un símbolo de una oportunidad para el país, y eso significa una nueva forma de hacer política, participativa. La República puede ser de derechas e izquierdas, pero hay que entenderla como participación, no como pactos entre oligarcas y millonarios entre pasillos. La República es una participación de la gente en la toma de decisiones y no solo votar cada cuatro años. El libro va de repasar todas las experiencias repúblicanas para demostrar que eso es participar, en vez de delegar.