07 de Mayo.- El mandatario ruso, Vladímir Putin, durante la reunión con su homólogo suizo, Didier Burkhalter, que también desempeña el cargo de presidente de la OSCE, pidió a las regiones ucranianas de Donetsk y Lugansk, en el este del país, que aplacen el referéndum independentista previsto para el próximo domingo a fin de crear «las condiciones necesarias para el diálogo». Asimismo, anunció la retirada de las tropas rusas situadas en la frontera con Ucrania.

"En la crisis ucraniana los socios occidentales responsabilizan a Rusia después de haber llevado ellos la situación a un callejón sin salida", expresó Putin. Puntualizó el presidente ruso, que los responsables de los recientes acontecimientos en Ucrania son los organizadores del golpe de Estado que tuvo lugar en febrero, que no desarman a los grupos de extrema derecha.

El diálogo directo entre Kiev y los manifestantes antigubernamentales del sureste de Ucrania es clave para acabar con la crisis, dijo Putin.

El mandatario ruso indicó que el cese de la violencia es una condición indispensable para que pueda iniciarse un diálogo nacional en Ucrania. "Rusia demanda a las autoridades de Kiev que cesen inmediatamente las operaciones militares en el sureste de Ucrania", subrayó Putin.

"Quiero enfatizar que las elecciones presidenciales previstas por Kiev en sí mismo son un paso en la dirección correcta, pero no decidirán nada si todos los ciudadanos de Ucrania no entienden cómo se garantizarán sus derechos después de estas elecciones", dijo el mandatario ruso.

Comentando la situación en el este y el sur del país, Putin llamó a los partidarios de la federalización a aplazar el referendo programado para el 11 de mayo.

Asimismo, el presidente indicó que es comprensible que los partidarios de la federalización ucraniana estén perplejos, ya que no entienden por qué se puede tomar por la fuerza el poder en Kiev pero a ellos no se les permite defender sus derechos.

Rusia retira sus tropas de la frontera con Ucrania

Rusia retiró sus tropas de la frontera con Ucrania y ahora se despliegan donde se realizan los ejercicios regulares, subrayó el presidente ruso.

"Nos decían que es preocupante que nuestras tropas estén cerca de la frontera con Ucrania. Las retiramos y ya no están en la frontera con Ucrania, sino en el polígono donde se llevan a cabo los ejercicios regulares", explicó Putin.

"Esto se puede comprobar fácilmente con ayuda de recursos de reconocimiento, incluso todo se ve desde el espacio", añadió el jefe de Estado ruso.

'Hoja de ruta' para la crisis de Ucrania

Por su parte, el actual presidente de la OSCE ofreció una 'hoja de ruta' orientada a estabilizar la situación en Ucrania que contempla alto el fuego, la desescalada de las tensiones, el dialogo nacional y la celebración de elecciones en el país.

"Todos tenemos un gran interés en alcanzar una solución pacífica y sostenible a largo plazo. Debemos actuar en términos de la lógica de la desescalada de las tensiones, así como de la recuperación y la reconstrucción", dijo Burkhalter.

En las próximas horas la propuesta de la OSCE será presentada a otros participantes en las negociaciones de Ginebra, mientras que el organismo internacional está dispuesto a asumir la coordinación en el marco de la 'hoja de ruta'.

Lavrov pide que cese la violencia

El ministro ruso de Asuntos Exteriores, Serguei Lavrov, hizo un llamamiento a Kiev a parar inmediatamente el uso de la fuerza contra su propio pueblo.

El jefe de la diplomacia rusa dijo que Rusia no permitirá silenciar la investigación del incendio en Odessa, donde el pasado viernes fallecieron 46 personas.   

«No permitiremos que se oculte a la sociedad la investigación», anunció el titular de Exteriores ruso, durante una ceremonia en recuerdo de diplomáticos rusos muertos en la Segunda Guerra Mundial.

Según agencias locales, el ministro calificó de fascismo «lo que pasó en Odessa» y aseguró que Moscú hará todo lo posible para aclarar las causas de lo ocurrido tras los violentos enfrentamientos entre manifestantes antigubernamentales y ultranacionalistas.

Anteriormente, Lavrov dijo queno le sorprenderia que las autoridades ucranianas encarpetaran la investigación de esta tragedia.

Citó como ejemplo el caso de los francotiradores, que disparaban a los manifestantes opositores y a los policías, durante los días de febrero en que se desató la mayor violencia en Kiev contra el gobierno del ahora depuesto presidente Viktor Yanukovich.