17 de diciembre de 2013.El gobierno de Estados Unidos lobotomizó aproximadamente 2.000 veteranos con enfermedades mentales, y probablemente cientos más, durante y después de la Segunda Guerra Mundial, según un archivo de olvidados memorandos, cartas e informes del gobierno desenterrados por el diario estadounidense, The Wall Street Journal.
"Tenían la noción de que iban a venir a darme una lobotomía", dijo Roman Tritz, un piloto de bombardero de la Segunda Guerra Mundial, al diario en un informe publicado el miércoles. "Al diablo con ellos".
Tritz dijo que los enfermeros en el hospital de veteranos lo inmovilizaron en el suelo, y que inicialmente luchó contra ellos.
Unas semanas más tarde, justo antes de cumplir 30 años, fue lobotomizado.
Inundada por las tropas psicológicamente dañadas que regresaban de los campos de batalla de África del Norte, Europa y el Pacífico, la Administración de Veteranos realizó la operación cerebral a ex militares que diagnosticó como depresivos, psicóticos y esquizofrénicos, y ocasionalmente en personas identificadas como homosexuales, según el informe.
El uso de la Administración de Veteranos de la lobotomía, en el que los médicos cortaron las conexiones entre partes del cerebro que se pensaba entonces que controla las emociones, era conocido en los círculos médicos a finales de 1940 y principios de 1950, y es ocasionalmente citado en los textos médicos. Pero la práctica de la Administración de Veteranos, nunca publicado ampliamente, hace mucho tiempo desapareció de la vista pública. Incluso el Departamento de Asuntos de Veteranos de Estados Unidos dice que no posee registros que detallan la creación y la amplitud de su programa de lobotomía.
La serie de informes del diario The Wall Street Journal comenzó con el archivo llamado Soldados Olvidados el miércoles y incluyó un documental, fotos archivadas, mapas y registros médicos.
Los archivos de lobotomía olvidados, registros militares y entrevistas con los familiares de los veteranos revelan detalles de vidas que han ido terriblemente mal, según informa el diario.
Traducción por Ivana Cardinale para el Correo del Orinoco
