Caracas, 30 de mayo de 2012.- El gobierno colombiano "vendió la idea" de que el conflicto interno en el país se "acabó y así no es", expresó este miércoles el periodista francés, Roméo Langlois, luego de ser entregado por las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (Farc).
El comunicador, que estuvo un mes en poder de la guerrilla, brindó nuevas declaraciones desde el campamento donde fue recibido por una misión humanitaria, en una zona rural del Caquetá, departamento ubicado en el sureste del país.
"Creo que la guerrilla no quería hacer política conmigo", afirmó Langlois, rodeado por campesinos de la zona, integrantes de las Farc y por la ex senadora Piedad Córdoba, los tres delegados del Comité Internacional de la Cruz Roja (CICR) y el representante del Gobierno francés, Jean-Baptiste Chauvin.
El comunicador expresó que "nosotros nos vamos y este conflicto va a seguir, los campesinos van a seguir sin carreteras", y llamó a los periodistas a "preguntarse cómo se cubre el conflicto", ya que "se ha vuelto invisible".
Langlois, de 35 años, reiteró que durante su cautiverio nunca fue amarrado y los guerrilleros que lo cuidaban "siempre han estado muy pendiente" y "entre lo poquito que tenían me lo daban".
El periodista manifestó que no comparte "la decisión de guardarme 33 días", por parte de las Farc.
También remarcó que los soldados del Ejército colombiano como los miembros de la insurgencia son personas humildes, y que estos últimos "están convencidos de que su lucha es justa".
Langlois fue capturado como prisionero de guerra, el pasado 28 de abril por el frente 15 de las Farc; vestía uniforme militar y participaba en una operativo de destrucción de laboratorios de droga.
Al ser liberado más temprano, el periodista francés señaló que los guerrilleros "siempre me han tratado como un invitado. Me han dado buena comida (...) y siempre han sido muy respetuosos".
Criticó además que su captura haya sido utilizada como propaganda política y que el conflicto colombiano sólo sea noticia cuando hay retenciones.
Langlois desmintió que el operativo en el que resultó capturado fuera para destruir un laboratorio de droga de gran magnitud.
"Era un pequeño, un modesto laboratorio, como muchos que se destruyen de manera repetida (...) y era de un campesino que contaba con esto para sobrevivir", detalló.
Conocida esta noticia, el presidente francés, François Hollande, expresó su "grandísima alegría" por la liberación de Langlois.
"Es un momento de una grandísima alegría y me uno a la felicidad y al alivio de la familia, de sus allegados y de la redacción de France 24 (la cadena de televisión donde trabaja Langlois)", señaló el mandatario.
Hollande dio las gracias "a todos los que contribuyeron a este final feliz y en especial a las autoridades colombianas y al Comité Internacional de la Cruz Roja, cuya ayuda fue inestimable".