25 de marzo 2011.-El gobierno de la República Árabe Siria negó este viernes haber ordenado a las fuerzas de seguridad del Estado reprimir y disparar contra los manifestantes que reclamaban más libertades en la ciudad de Deraa (sur), al tiempo que el corresponsal de teleSUR en Medio Oriente denunció que los medios occidentales están tergiversando los hechos en detrimento del presidente Bashar al-Assad.

La portavoz presidencial Bouthaina Shaaban denunció que el clima político y las tensiones son consecuencia de acciones desestabilizadoras de agitadores infiltrados entre la población.

El periodista Hisham Wannous, corresponsal de teleSUR que se encuentra en Damasco, reportó que la situacion en Siria es tranquila, todo lo contrario a lo que publican los medios de información occidentales y algunos árabes.

“No existen ni tiroteos ni muertos en ninguna ciudad de Siria, especialmente en Deraa, donde la gente ha salido a manifestar pacíficamente en respaldo al presidente Bashar al-Assad y en agradecimiento a los decretos que el Gobierno firmó el día jueves, que están encaminados a mejorar la calidad de vida de los ciudadanos”, detalló.

Denunció que algunos medios estan tomando las imágenes de las manfiestaciones en respaldo al Presidente y las alteran con falsos sonidos para mostrarlas como protestas contra el Gobierno.

Wannous sostuvo que las transmisiones de los medios occidentales siguen la línea de una campaña mediática dirigida contra el Gobierno sirio, por ser uno de los que sigue resistiéndose a los planes del imperio estadounidense y de Israel en la región.

Recordó que el jefe de Estado "se opone a los proyectos imperialistas que quieren dividir en dos a la nación y hacer que los sirios se enfrenten entre ellos mismos".

Agregó que algunas investigaciones realizadas por el Gobierno revelaron que elementos externos entraron al país con grandes sumas de dinero y armamento, "con la única intención de generar desestabilización y el caos en el país".

“Ha sido detenida la mayoría de los infiltrados en el país que entraron por la frontera con Jordania (...) Existen manos detrás de las revueltas que ocurrieron hace unos días en Deraa y esas manos vienen desde Israel y el Libano”, expresó.

Wannous añadió que la policía y las fuerzas de seguridad salen a la calle con órdenes de no utilizar armas y no abrir fuego contra los manifestantes. “Su objetivo es tratar de proteger a los ciudadanos de las acciones de los infiltrados que trataron de destruir y quemar instituciones públicas y causar muertes entre la población siria”.

Reiteró que la presencia de sirios en las calles este viernes, es fundamentalmente para celebrar los recientes anuncios gubernamentales, que giran en torno a un conjunto de reformas que benefician a la población.

El Gobierno estudia levantar el estado de emergencia vigente desde 1963, que viola algunos derechos fundamentales del ser humano, adoptar medidas anticorrupción, legalizar los aprtidos políticos, incrementar los sueldos y salarios, entre otras.

No obstante, las principales agencias de prensa internacionales citan a “manifestantes opositores” que denuncian una violenta represión por parte de la policía a las manifestaciones del día viernes, provocando la muerte de al menos 20 personas.

Otros medios informan que la policía se ha llevado detenido a algunos manifestantes y disparó contra la población en la ciudad de Deraa, después que la multitud prendió fuego a una estatua de bronce del fallecido expresidente del país, Hafez Assad.