Estocolmo, 16 Feb. ABN.- Suecia y la Unión Europea manifestaron su preocupación ante el 'gran número' de ciudadanos, entre comunicadores sociales y funcionarios del sistema judicial, 'que son objeto de persecución y interceptación de comunicaciones' por el Gobierno colombiano.
Así dice afirma la cancillería sueca en Estocolmo en una entrevista hecha por Dick Emanuelsson, aparecida en la página web Café Stéreo.
Durante gran parte de la semana pasada los jefes del departamento de asuntos del Hemisférico Americano de la cancillería sueca se reunieron para definir una posición ante los temas que podrían vulnerar las relaciones entre las dos naciones.
En una entrevista radial en Colombia el presidente Uribe acusa directamente a colombianos residentes en Suecia de estar al servicio de las Farc, y afirma que 'A todos, a todos los tenemos que acabar' ”.
En la nota de Café Stéreo se denuncia el 'rol cada vez más activo que cumplen las embajadas colombianas como centro de inteligencia contra todo lo que huela a oposición política en el exterior contra la política de guerra de Uribe'.
'Las relaciones entre dos naciones son delicadas. A pesar de eso, la Cancillería sueca hace entender a Uribe que no debe meterse con los refugiados políticos en Suecia por que son protegidos por las leyes y las autoridades suecas', continúa el artículo de Café Stéreo.
“De acuerdo con la política de migración sueca, un gran número (de personas colombianas) con necesidad de protección han recibido residencia permanente en Suecia. Ciudadanos suecos y personas con un permiso de residencia son cobijados por la seguridad jurídica sueca y disfruten libertad de expresión y de prensa”, dice la Cancillería.
En Suecia existe desde más de 15 años la Asociación Jaime Pardo Leal, nombre en homenaje al líder popular y el primer candidato presidencial de la Unión Patriótica que fue asesinado el 11 de noviembre de 1987. La organización también posee desde más de diez años una emisora, Radio Café Stéreo. Ambos han sido acusados por el gobierno de Álvaro Uribe de “colaborar” con los grupos de resistencia en el país.
