Nueva York, 30 Sep. ABN.- La embajadora de Ecuador ante la Organización de las Naciones Unidas (ONU), María Fernanda Espinosa, propuso a la Asamblea General del organismo dejar atrás el desarrollo económico basado en el crecimiento y el mercado en favor de una nueva concepción social del bienestar.
“En nuestro país hemos dejado atrás el desgastado concepto de desarrollo basado en el crecimiento y en el mercado y estamos trabajando activamente y con resultados sorprendentes por elevar la calidad de vida de nuestros ciudadanos”, dijo Espinosa en su intervención en el debate de la 63 sesión de la Asamblea General, difundieron agencias.
La representante ecuatoriana comunicó “con agrado al mundo” la aprobación, en el referendo del domingo, de la nueva Constitución impulsada por el presidente Rafael Correa, que calificó de nuevo el paso dado por Ecuador en el afianzamiento de la democracia.
Aseguró que su país ha cambiado los principios económicos tradicionales por el concepto del buen vivir, que significa vivir con dignidad, de acuerdo con sus valores culturales y en armonía con la naturaleza.
Espinosa llamó la atención sobre la actual crisis de los mercados financieros, que en su opinión son una muestra más de la decadencia del sistema económico vigente que sobrepone el capital especulativo por sobre el capital productivo.
“Esta no es la crisis de un país, es la crisis sistemática del capitalismo que requiere respuestas profundas e integrales”, señaló.
Aseguró que todos los países en desarrollo esperan que la Conferencia de la ONU sobre la Financiación para el Desarrollo, que se celebrará en Doha los próximos 29 de noviembre y 2 de diciembre, arroje resultados positivos.
Entre ellos están el acceso a la financiación externa, el alivio de la carga del servicio de la deuda externa, la reforma de las instituciones financieras internacionales, así como “la alineación de la ayuda oficial al desarrollo con las estrategias y políticas nacionales adoptadas soberanamente”, precisó.
Espinosa instó a los países más desarrollados a alcanzar la meta de dedicar el 0,7% de su Producto Interno Bruto (PIB) a la cooperación internacional y recordó que los países en renta media concentran el 41% de los pobres del planeta.
Reiteró la preocupación de su país con la directiva europea de retorno de inmigrantes en situación irregular por su posible vulneración de los derechos de los emigrantes.
“Tanto la emigración, como el retorno, deben ser expresiones de libertad”, expresó.
Al mismo tiempo, solicitó la colaboración de la comunidad internacional para poder asistir a los más de 200 mil ciudadanos colombianos que, de acuerdo con la Alta Comisaría de la ONU para los Refugiados (Acnur), han buscado refugio en Ecuador.
Asimismo, apoyó la agenda del actual presidente de la Asamblea General, Miguel D'Escoto, de democratizar los organismo de Naciones Unidas y las instituciones financieras multilaterales como el Fondo Monetario Internacional (FMI) y el Banco Mundial (BM).
