San Juan.- El reciente asesinato de un ciudadano a manos de un policía en Puerto Rico y las denuncias constantes de ciudadanos pobres sobre el abuso y crímenes policiales provocó la ira del dúo boricua de reggaetón Calle 13, que compuso la canción “Tributo a la policía”.
“Con su casco y con su chaqueta, botas negras, uniforme azul con dos baquetas, modelando en su motocicleta, por ahí va el policía analfabeta repartiendo galletas (golpes), con cara de padrastro abusivo, un orangután con cerebro primitivo, amante de partir costillas”', dice una de las primeras estrofas.
La tonada irreverente, característica del estilo de Calle 13, se puede escuchar en Internet. La letra condena el asesinato de Miguel Cáceres a manos del oficial Javier Pagán Cruz, el 11 de agosto en Humacao, una ciudad en el este de Puerto Rico.
El incidente, en el cual el policía mató al civil con cinco disparos, fue grabado en vídeo por un ciudadano y difundido por televisión y por la red.
Ayer, ocho policías puertorriqueños fueron arrestados en Mayaguez, ciudad del oeste, por fabricar evidencia contra ciudadanos y arrestarlos ilegalmente.
La copla reggaetonera, que contiene la percusión característica del género y en la cual destaca el sonido de una guitarra eléctrica, fue escuchada por un legislador que fue policía, quien invitó al dúo a una reunión. El funcionario, el representante Héctor Torres, pensó que la canción abonaba a la desconfianza de los ciudadanos en las autoridades.
“Sería sumamente peligroso mantener un clima de desconfianza... que podría empujar a civiles a tratar de tomar la ley en sus manos”, comentó.
No fue posible conseguir una reacción por parte del dúo, que se encuentra en Argentina.
La canción recuerda que policías han asesinado en el pasado a inocentes y han perseguido a personas que luchan por la independencia de Puerto Rico.
“También mataron a Arnaldo Darío y Santiago Mari Pesquera, a Carlos Enrique por estar agarrados a una misma bandera”, dice.
Los jóvenes independentistas Arnaldo Darío Rosado y Carlos Enrique Soto Arriví fueron asesinados por policías en un cerro del centro de Puerto Rico en 1978, y varios agentes terminaron en la cárcel.
El caso de Mari Pesquera, hijo de un prominente líder independentista, nunca se ha esclarecido, pero la familia asegura que fue asesinado por las autoridades.
“A los policías, no se olviden que los celulares ahora tienen camaritas, los estamos grabando...”, concluye la canción.
