1. El llamado "bastón de mando" pertenece a una tradición indígena muy vieja. El bastón de palo se usó para ayudar a caminar a viejos o lesionados, pero también como instrumento de defensa. Se le impuso la palabra "mando" porque el bastón se convertiría en una amenaza para los gobernados. No sé si la idea entró a la política, por puro oportunismo, durante los 71 años que gobernó el PRI, en los 12 años del PAN o fue en los cinco años que lleva el partido Morena. Sigue siendo muy ridículo hablar de ello, pero lo aplaudiría si por cada "bastón de mando" entregado en ridícula ceremonia, aumentaran los ingresos económicos de todos los indígenas, obreros y desempleados, con el fin de reducir la desigualdad.
2. El bastón es masculino, pero en las fiestas indígenas de Yucatán se nombraban en algunos lugares a "bastoneras" (una especie de policía de juego) mujeres para imponer el orden en las fiestas. Otra vez el bastón tuvo que ver con el mando, con el orden. En la actualidad no se necesitan bastones de mando ni bastoneras porque, por lo menos desde mediados del XIX, manda el capitalismo empresarial que es el que impone a los políticos. ¿O alguien duda que algún gobernante mexicano no haya sido impuesto por los grandes empresarios y el dinero que entregan para las campañas? Por ello los anteriores presidentes, López Obrador y quien lo sustituta, debe reunirse mil veces con los empresarios y nombrarlos sus asesores.
3. ¿Quién tiene entonces hoy el "bastón de mando"? El pueblo, diría López Obrador, que es el que dice todo lo que se hace en política, en inversiones, en salud, educación, seguridad; dice AMLO que el pueblo manda y nada puede hacerse sin el pueblo. Por ese muy repetido discurso, en el que el pueblo es todo, parece entenderse que el pueblo es López Obrador mismo, en persona. ¿Es ese pueblo el que ha tenido vergonzosamente de rodillas a Ebrard, Monreal, Adán López, Noroña, al exministro de la Corte, a la misma Sheinbaum y muchas decenas de políticos que ahora son gobernadores y legisladores? ¿Se enterará la población de que miles o millones de políticos hablan en nombre del "pueblo", dice que apoya o autoriza, sin consultarlo nunca?
4. Siguiendo lo mucho que se habla hoy del "bastón de mando", tengo la impresión de que esa ceremonia mística/religiosa que se le tuvo mucho respeto, pronto podrá convertirse en asunto lucrativo porque cualquiera –con disfraces adecuados y mucho humo- podría organizarla. Lo que nunca se podrá organizar mientras exista el capitalismo, es un gobierno honrado, decente, que no robe y defraude. Los jóvenes de los sesenta, que nunca participamos en procesos electorales, porque teníamos la convicción de que haríamos la revolución de los trabajadores haciendo crecer el movimiento de masas en las calles. Cosa que nunca pudimos hacer porque el capitalismo mexicano y el imperialismo, fueron 100 veces más poderosos. (14/XI/23)
