Saludos amigos(as) lectores, seguramente quienes me adversan políticamente dirán: “ya este metió la pata… “, porque algo si es cierto; nadie, absolutamente nadie puede dudar de la buena intención y la buena fe al promulgar la ley de Precios y Costos Justos, dirigida a proteger a los consumidores de los atropellos del mercado capitalista, solo que quien o quienes la propusieron y trabajaron en ella están faltos de conciencia, no saben o no entienden lo que significa revolución y quizá la confunden con la revisión o la reforma que en términos criollos significa “pañitos de agua tibia”; no se va al fondo porque no hay plena conciencia de la problemática, no hemos indagado sobre las causas, las acciones y los efectos, entiendo la frase “inventamos o erramos”, es motivante en la acción, pero yo la comparo con los efectos de un bateador con los ojos vendados, es posible que de alguno que otro batazo, pero su estadística estoy seguro será desastrosa y en política sobre todo en materia de macro economía no podemos darnos ese lujo máxime cuando tenemos que enfrentar a un enemigo sumamente poderoso como es el criminal imperio yanqui y sus aliados que jamás cejaran en su empeño de seguir explotando nuestros pueblos.
Irreverencia en el debate y unidad en la acción, si es cierto, solo que los debates se van a un pozo sin fondo, (cuando los hay) los cuadros medios desde viceministros para abajo no se interesan mucho en ellos, por tanto no se sistematizan, y si por casualidad aparece una idea o propuesta que llame la atención de inmediato son tomadas, editadas, descontextualizadas y presentadas como trabajos suyos cercenando en la mayoría de los casos su objetivo principal y su fundamento dando como resultado acciones como la referida ley.
La propuesta de Ley de Producción, Distribución y Precios que presenté, www.aporrea.org/actualidad/a118932.html nunca fue para proteger a los consumidores ya que mientras predomine el modelo capitalista esa acción de protección se pierde ante la intermediación, el acaparamiento y la especulación del libre mercado, los capitalistas usureros siempre se la ingenian para tratar de burlar las leyes y el estado no está aún en capacidad cuantitativa ni cualitativa para evitarlo, mi intención perfectamente fundamentada va dirigida a proteger al sector productor originario, al campesino, al pequeño y mediano productor, el sector mas desprotegido de la cadena de producción de alimentos para de esta manera comenzar a revertir el nefasto plan Fox, aplicado en America Latina a partir de 1950 y que tenia como objetivo principal el de consolidar la hegemonía económica gringa en la región con la implementación del tristemente celebre ALCA, en el año 2000 fecha en la que los documentos del plan fueron desclasificados incluso publicados en algunos diarios de nuestro país donde se pudo observar como el Dpto. de Estado Norteamericano a través del plan nos convirtió en una masa de consumidores de sus productos elaborados y a nosotros nos dejo la tarea de solamente exportar materias primas; es por esto que es necesario devolver a quienes se hacinaron en las grandes ciudades a su lugar de origen, utilizando para ello un plan estratégico con los incentivos que aun prevalecen en nuestra población, que no es otra que la ganancia, cambiar el dicho de: “caracas es caracas… lo demás es monte y culebra”, por la de: “caracas es caracas… lo demás es campo y progreso”; estoy seguro que cuando veamos campesinos, productores, gananciosos o porque no decirlo ricos, que no requieran de las misiones para satisfacer sus propias necesidades que puedan con su ganancia comprar su vehiculo, su buena casa, educación para sus hijos, en fin cuando la población advierta tal situación estoy seguro al estado le van faltar recursos para apoyar la iniciativa propia, para procurar los servicios públicos, vialidad, transporte, acopio, industrialización, exportaciones, etc., tierra hay suficiente, y si partimos del principio de que el 80% de la población hacinada en las grandes ciudades tiene alguna conexión familiar con el sector campesino el éxodo de la ciudad al campo sería épico
Mi propuesta contradice la falsa idea revisionista de execrar el capitalismo, muchos camaradas pregonan esta idea, no entienden lo que significa proceso, llegan a decir que capitalismo popular es una gran contradicción, no hay la conciencia suficiente para entender que los capitalistas fueron en su época revolucionarios, tal como hoy día pregonamos la lucha contra el capitalismo y su fase máxima el imperialismo, hace varios siglos, los comerciantes, artesanos, banqueros junto a los trabajadores y el pueblo lucharon a muerte para supuestamente “acabar” con el odioso, oprobioso y nefasto sistema de gobierno Monárquico, ¡o no!, será por eso que quedó registrada en la historia como ¿la revolución industrial artesanal?, o mejor conocida como ¿la revolución Francesa?, ahora yo me pregunto: será que la revolución capitalista hoy en su fase máxima y ya con tendencia a decaer logró acabar con el sistema monárquico?, que yo sepa en España existe y con gran poder la monarquía, ni se diga en el Reino Unido, Suecia, Mónaco, Vaticano, Japón, en la mayoría de los emiratos, en África, y pare de contar, entonces nuestro incipiente proceso revolucionario ¿podrá derrotar el capitalismo a corto plazo?, ¡cuidado!, las utopías son referencias para alcanzar y avanzar en los procesos, no para cegarnos y convertirnos en ultra revolucionarios, solo elevando nuestro nivel de conciencia, mediante el estudio, el debate, el análisis de las causas, acciones y efectos de los hechos o acciones políticas, sociales, económicas, et., et., podremos dar buenos batazos y avanzar así hacia la consolidación del socialismo que en buena hora y en buen momento propone nuestro presidente Hugo Chávez para bien de los pueblos, Hasta la próxima
Para el debate, Gonzalo8adiaz@gmail.com
