Carta Abierta al Dr Manuel Castro Pereira - Rector (UNA)

Una Aclaratoria Necesaria

El día 18 de febrero del corriente los trabajadores del Centro Local Aragua de la UNA, fuimos convocados a una reunión de carácter "obligatorio" en la que estaría presente Usted Dr. Manuel Castro Pereira, Rector de nuestra Universidad. Para nuestra sorpresa Usted dedicó gran parte de su intervención a hacer referencia a la lucha que, una larga lista de trabajadores de nuestra institución, hemos tenido que dar por el bienestar de nuestra UNA. Esta lucha se ha caracterizado por las múltiples denuncias que hemos llevado ante las instituciones correspondientes, tales como la Fiscalía, Contraloría General de la República, Inspectoría del Trabajo, Tribunales, tanto laborales como contenciosos, Inpsasel y Defensoría del Pueblo. Todas esas denuncias se han hecho para hacer respetar tanto los derechos laborales del personal (académico, administrativo y obrero), como los derechos de nuestros estudiantes UNA.

Lamentablemente en esa reunión, realizada en la biblioteca del Centro Local Aragua, en la que Usted Dr. Castro fue la figura principal, Usted se dedicó a hacer reclamos infundados a mi persona, señalándome como responsable de haberlo demandado más de 10 veces, cuando lo que he hecho es defender mis derechos laborales, derecho que han sido cercenados, no sólo a mí, sino a un grupo importante de trabajadores en múltiples oportunidades por su administración.

Es importante destacar que, para hacer valer mis derechos laborales demandé al Consejo Directivo de la UNA, al cual Usted preside, en tres oportunidades. La primera vez introduje un Amparo Constitucional por el derecho al estudio, porque gané una beca para realizar estudios doctorales en Alemania, beca otorgada por Fundayacucho. En este caso el Consejo Directivo me negó el permiso cuando lo solicité por primera vez. Yo me pregunto: ¿Qué autoridad, en su sano juicio, le niega un permiso no remunerado a un profesor universitario para realizar estudio doctorales?. Por supuesto que la justicia me dio la razón. En la segunda oportunidad demandé a su administración por su negativa a evaluar mi trabajo de ascenso, a lo que su administración tardó más de un año en dar respuesta. (ver expediente 398 – Tribunal Contencioso Estado Aragua). ¿Qué esperaba Usted entonces Dr. Castro Pereira?, que yo me resignara a los caprichos de su administración?, y aunque no les gané en esa oportunidad, el caso está en apelación. En la tercera demanda (exp 2013-398), debí denunciar a su administración porque hicieron caso omiso a una solicitud de cambio de dedicación de medio tiempo a tiempo completo hecha por mí. Ese derecho está garantizado en nuestra acta convenio, y ante la designación de una persona externa en el cargo, no me quedó otra alternativa que demandarlos. Por su puesto a Usted le hubiera encantado que eso no ocurriese, y que yo me dejara atropellar por su administración. ¿Cuál fue la sentencia del juez en este caso?, ¿Usted leyó la sentencia?. La sentencia dice que el Consejo Directivo, presidido por Usted, violó flagrantemente el acta convenio ya mencionada, y se les ordenó darme el cargo inmediatamente. Pero este no es un caso aislado, recientemente en el Consejo Superior se aprobó un reglamento de ingreso a nuestra institución, el cual respeta la estabilidad laboral de decenas de profesores contratados, a quienes tanto en su administración como en anteriores, no se les aperturaron los concursos de oposición a tiempo. Y ¿qué hizo su administración?, desconoció ese reglamento, hizo caso omiso a la solicitud de esos profesores para apegarse al nuevo reglamento, obligó a los profesores a concursar, y muchos fueron reprobados. Sin embargo, las cosas no salieron como a Usted le hubiese gustado, nuestros colegas enfrentaron ese abuso de autoridad, lo demandaron por medio de la Inspectoría del Trabajo, y muchos de ellos fueron reenganchados. Y como si fuera poco, su administración acaba de ordenar que no se reciba ningún caso de la inspectoría del trabajo en los estados en donde se ubica la UNA, o sea , por ejemplo el trabajador que vive en Tucupita tendrá que llegar a Caracas para notificar el reclamo laboral, ¿Usted evaluó ese escenario Dr. Castro?, ¿Le parece justo?.

El segundo punto al que Usted hizo mención en la reunión fue a una denuncia realizada por mi persona formalmente ante la Contraloría General de la República (CGR) ya hace más de seis años, por unas presuntas incompatibilidades (Expediente 5341 – CGR). Para poner en contexto a la opinión pública nacional, las incompatibilidades ocurren cuando alguien pretende ejercer dos cargos públicos simultáneos, y para el caso de la UNA eso está prohibido según nuestro Reglamento sobre Dedicación e Incompatibilidades. Pues resulta que después de seis años que la CGR le ordenó la investigación al auditor interno de nuestra universidad, Usted mismo informó mediante memorando del Rectorado N 002-2016 los resultados de esa auditoria. ¿y cuál fue el resultado Dr. Castro?, Usted sabe que se confirmó lo denunciado por mi. Sin embargo, Usted dijo en la reunión que los acusados eran inocentes, que se violó el derecho a la defensa, cosa que no le compete decirlo a Usted, sino a la CGR. Si Usted no me cree puede revisar el Reglamento de la Contraloría Interna de la UNA (artículo 13, numeral 8). Usted también sabe que el auditor interno remitió el informe a la CGR, a la cual le corresponde iniciar el proceso sancionatorio, entonces: ¿qué buscaba Usted al darle esa información "errada" a los presentes, involucrados y no involucrados, en la mencionada denuncia?.

Por último, en la reunión Usted hizo mención a varios trabajadores de nuestra institución, que denunciaron ante la Fiscalía una distribución irregular de recursos de nuestro Fondo de Pensiones y Jubilaciones. Este hecho le produjo un importante daño al patrimonio de la República. Debo resaltar que Usted fue advertido a tiempo por la Consultoría de nuestra Universidad de que estaría cometiendo un delito sí lo hacía. Esa denuncia fue formalmente presentada ante la Fiscalía, se realizó el proceso legal, a Usted se le garantizó el debido proceso, y de acuerdo a copia de una sentencia publicada por mí en un grupo de Facebook relacionado con la UNA, Usted se habría declarado culpable en la audiencia preliminar que se realizó en el Juzgado Décimo Cuarto en Primera Instancia en Funciones de Control del Circuito Judicial Penal del Área Metropolitana de Caracas, para así lograr un beneficio procesal, y estaría bajo régimen de presentación. En ningún momento en la reunión Usted desmintió lo publicado por mí. Ahora, por eso le pregunto ante la opinión pública: ¿es cierto que Usted se declaró culpable en la audiencia preliminar del delito que se le acusa en la causa N 14C-20.197-15?, y sí eso es cierto, entonces ¿qué me reclama?, sí Usted se declaró culpable de un delito penal, ¿no debería presentar su renuncia por razones de mera ética profesional?. Usted se excusó en esa reunión diciendo que no podría renunciar porque un tribunal, con competencia electoral, le ordenó mantenerse en el cargo hasta nuevas elecciones, pero todos sabemos lo que eso es, una excusa. Debo aclarar a la opinión pública que al publicar esa denuncia no pretendía destruirlo moralmente, lo que hice fue desmentir a un grupo de personas irresponsables, quienes a través de las redes sociales publicaban informaciones falsas con referencia a la mencionada audiencia, diciendo que lo habrían librado de toda culpa, cosa que parece no ser cierta. Invité a esas personas a desmentirme en el momento que publiqué la información, y ninguno me desmintió.

Como si fuera poco, en esa reunión le pedí que no me mencionara directamente en dos oportunidades, invitándolo a reunirnos en mi oficina en caso de que tuviera algo que decirme, ya que nunca se me informó que en esa reunión se iba a hacer mención exclusiva a mí, y a mis denuncias. Cuando me retiré, tres empleadas se dedicaron a gritarme: "Cobarde!", "Da la cara!", sin que Usted hiciera llamado de atención alguno, lo cual deja mucho que pensar respecto al objetivo que perseguía la reunión. En mi opinión, cobardes han sido las personas que de forma anónima se han dedicado a enviar correos electrónicos al personal del Centro Local Aragua, correos en donde tratan de descalificarme. Por mi parte, todas las denuncias que he hecho mencionan mi nombre y mi apellido.

Ante todo lo narrado, yo, Luis Enrique Ramos García, portador de la cédula de identidad número V.- (En archivo), mayor de edad, casado, de ocupación Profesor Universitario, y profesión Ingeniero Industrial, residenciado en Maracay, Edo. Aragua, miembro del Personal Académico de la UNA, le exhorto públicamente, primero: a que no vuelva a abusar de su autoridad para convocar a reuniones en la que se dedique a someter al escarnio público a la gente que le reclama sus errores. Sí Usted considera que se le está dañando su imagen, o que alguien está mintiendo, respecto a Usted, hay medios legales o disciplinarios para resolverlo, no tiene que convocar a todo el personal de una dependencia, más de 50 personas, para ventilar diferencias personales que tenga con algún trabajador, además de suspender la atención a los estudiantes. Segundo: le exhorto a que aclare su situación ante la comunidad universitaria de la UNA, ya que miembros de esta comunidad, quienes declaran ser "amigos suyos" se han dedicado a publicar en las redes sociales información favorable a Usted en la causa penal arriba mencionada, diciendo que Usted fue librado de toda culpa, cosa que no parece ser cierta. Considero que Usted está obligado a desmentir formalmente lo publicado por mi persona. Se han enviado hasta cadenas de whatsapp a grupos de trabajadores UNA alegando la comprobación de su inocencia, pero nadie ha llegado a enviar una comunicación oficial a las dependencias de la UNA a nivel nacional. Esas informaciones informales son para mí una muestra de irrespeto a la institución. Tercero: en caso de que efectivamente Usted se haya declarado culpable del delito de Malversación Genérica de Fondos, delito previsto y sancionado en el artículo 56 de la ley anticorrupción, el cual se le imputó en la causa penal mencionada, lo invito a que renuncie definitivamente a su cargo de Rector en la Universidad Nacional Abierta (UNA) y deje que nosotros, los miembros de esta comunidad, nos labremos un mejor destino.

En Maracay, a los 29 días del mes de Febrero de 2016

Luis Enrique Ramos García

V.- (En archivo),

Representante Profesoral por el Estado Aragua en APAUNA y Delegado Electo INPSASEL por el Estado Aragua

Contacto: lramos@una.edu.ve

"Tengamos una conducta recta, y dejemos al tiempo hacer prodigios".

Simón Bolívar. 20 de Abril de 1825.

c.c MPPEUCT,

c.c CGR,

c.c Despacho de la Presidencia de la República,

c.c Comunidad UNA



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