11 abril 2013 - Piden justicia. A 11 años de los sucesos ocurridos el 11 de abril de 2002 en Puente Llaguno, víctimas y familiares de personas que perdieron la vida en ese suceso aún reclaman al Estado que se investigue la participación de varios dirigentes opositores que llamaron a desviar la marcha opositora hacia Miraflores, con la intención de crear un enfrentamiento con seguidores del presidente Hugo Chávez, que estaban frente al Palacio de Gobierno.
Por este llamado opositor 19 personas fallecieron luego de la intervención de efectivos de la Policía Metropolitana (PM), entonces dirigida por el alcalde Alfredo Peña.
La mayoría de las víctimas fatales (11) ocurrieron del lado de los revolucionarios, quienes se apostaron en las cercanías de Puente Llaguno en defensa de la concentración chavista apostada en Miraflores.
Yesenia Fuentes era una de estas personas. Ese día recibió un disparo en el rostro. Hoy preside la vocería de la Asociación de Víctimas del 11 de Abril que aún reclama justicia, a pesar de que Lázaro Forero, Henry Vivas, Iván Simonovis y otros policías de la PM, de baja jerarquía, están presos con condena a 30 años de cárcel por delitos de lesa humanidad.
“Necesitamos que el Ministerio Público siga investigando quiénes fueron los autores intelectuales, muchos de los cuales el pueblo sabe quiénes son. Entre ellos que se encuentra hoy como candidato presidencial de la Mesa de la Unidad Democrática (MUD), Henrique Capriles Radonski, que no solo asedió la embajada de Cuba sino que participó, como autor intelectual, de la masacre de Puente Llaguno porque el estaba en la tarima de Chuao que llamó a desviar la marcha de la oposición hacía Miraflores.”, reclamó ayer Fuentes durante un acto conmemorativo en Puente Llaguno que se prolongará hasta el próximo 13.
Indicó que, además de Capriles, varios diputados de la oposición también estuvieron presentes, tal como María Corina Machado, quien incluso estuvo en Miraflores durante la autoproclamación del empresario Pedro Carmona como presidente de la República una vez concretado el golpe.
“Este capítulo de Puente Llaguno nunca va a cerrar porque está en la historia, en la conciencia y la mente de todos nosotros. Esta historia (del 11 de abril) la escribe el pueblo de Venezuela. Por eso pedimos que la fiscalía siga investigando. Todavía hay víctimas sin justicia”, indicó.
Según el exfuncionario Guillermo Garroz, director de Protección Civil en abril de 2002, en total el golpe dejó 85 fallecidos y 573 lesionados producto de la fuerte represión que ocurrió en los días posteriores,
PERDIÓ A SU PADRE ESE DÍA
Anabel Ochoa tiene 18 años y es huérfana. Tenía siete ese fatídico día en el que una bala le segó la vida a su padre, César Matías Ochoa, justo debajo de Puente Llaguno.
“Estoy aquí en su nombre. Aún no se ha hecho justicia y su muerte está impune. Quiero que averigüen, que busquen al culpable; fueron tantas víctimas que sé que es complicado pero la justicia tiene que llegar”, dice mientras su voz tiembla y la vista se humedece.
“Lo poco que recuerdo de mi papá es que era una persona luchadora, siempre amó la Revolución. Nunca podré ser como él, pero sí guardaré los valores que sentía por el país. No creo que eso lo pueda borrar nunca”, concluyó Anabel.
