Producción de empresa estatales se desploma en plena crisis económica

(Cumaná, 12 de junio). Mucho se ha hablado en los último tres años de las causas de la escasez de alimentos y quiénes son sus responsables, y este domingo la Federación de Trabajadores URT Sucre y la Central Obrera UNETE en palabras de su vocero José Antonio García, abordo este tema desde la responsabilidad de las empresas del Estado, al afirmo que, plantas en manos del Gobierno contribuyen a la escasez e inflación de alimentos.

Según indicó el portavoz de estas organizaciones, el Gobierno posee 10 centrales azucareros de los 14 existentes en el país, 19 platas para la producción de maíz pre cocida de las 27 que hay en Venezuela, y plantas procesadoras de Atún y Sardinas (Fextun y La Gaviota), no obstantes, afirma que la producción a descendiendo en las mismas en algunos casos en más de 80% debido a sus paralizaciones y falta de insumos.

Explico que los centrales azucareros han disminuido sus operaciones paulatinamente, hasta llegar a cifras críticas que registran a 8 de estos 10 central paralizados, dejando según sostienes el peso de la producción en los centrales privados. "Hoy solo podremos cubrir menos de un tercio de la demanda nacional de azúcar (…) detallo García.

En este mismo sentido dijo, que 12 de las plantas de producción de harina precocida propiedad del gobierno durante el año 2.015 según datos de la memoria y cuenta del Ministerio del Poder Popular para la Alimentación (MAT), reportan producción de poco más del 14% de su capacidad, registrándose más días paralizadas que de labores, igual sería el caso de las enlazadoras como La Gaviota que en casi 2 años han permaneció paralizada más de 95% del tiempo.

Para la URT y la UNETE, las escaseces de azúcar refinada y harina precocida e incluso de algunos enlataos recae en el Gobierno Nacional, afirman que estas empresas y sus gerencias han "jugado con el hambre del pueblo" y "sorprendentemente" no han cumplido con su responsabilidad social en la crisis alimentaria que se vive en el país.

"Los trabajadores, nuestras familias no pueden conseguir estos productos, y si lo logramos son a precios exorbitantes, mientras sectores del gobierno mantiene casi paralizadas a empresa que los pueden producir (…)," aseguro García.

Para estos gremios la sociedad debe organizarse y obligar al Gobierno a poner a funcionar a su capacidad a estas platas necesarias para alimentar a la población, a la ves de incrementar la producción en el campo.

Los CLAP

El Vocero de la URT y UNETE también hizo referencia a los Comites Locales de Abastecimiento y Distribución (CLAP) al indicar, que, apoyan toda forma de participación popular en cualquier espacio de la economía nacional como parte de la solución a la crisis, no obstante, asegura que conformar estas estructuras solo con ciudadanos pertenecientes al partido de Gobierno, devela exclusión del resto de la población a la participación protagónica y discriminación por razones política.

"Creemos en la democracia, en la participación protagónica, pero hablar de ella, excluyendo a quienes no piensan igual, es una contradicción y un peligro (…) afirmo García.

Para la URT la exclusión de sectores de la población a los CLAP podría generar confrontación de pueblo contra pueblo, a la vez que sostiene no resolverá el problema de la escasez y/o desabastecimiento cuyo origen aseguran es debido al desplome de la producción nacional y de las importaciones.