Anticorrupción Interpelación Popular Organizada (AIPO) convoca para este miércoles 25 de mayo a partir de las 3pm (en su sede del Edif. Banmujer, Av. Urdaneta, PB) una Asamblea de Emergencia en el Sector Salud debido a la violación sistematica a los más elementales derechos humanos de la población venezolana. Denunciando el secuestro del sistema de salud por parte de mafias vinculadas directamente a altos funcionarios de gobierno, AIPO propone una agenda de discusión y acción para hacerle frente a esta lamentable situación. A continuación el documento de convocatoria:

Al Pueblo Afectado

Convocatoria para organizar una movilización nacional por los crímenes de lesa humanidad que se están cometiendo en el sector salud.

Miercoles 25 a partir de las 3 de la tarde: lugar AIPO, Edif Banmujer, Avda Urdaneta, PB

1. Destitución y cárcel para los entes responsables

2. Auditoría de las entidades públicas y privadas

3. Control popular del sector salud

4. Plan de emergencia

5. Formación de la “Asociación Civil de Víctimas de Crímenes de Lesa Humanidad” producidos por las mafias organizadas

¿Por qué se produce este Cisma del sector salud dentro del proceso revolucionario?

Se están cometiendo sistemáticamente crímenes de lesa humanidad contra los ciudadanos y la nación, subsumidos en la corrupción, elementos que nada tiene que ver con la actual situación de crisis de divisas, sino de un aparataje conspirativo, surgido desde los años ochenta, a pesar de que en los años setenta nuestro sistema público de salud fue un ejemplo en todo el continente americano, que se fue creando dentro del sistema público salud dentro de un proceso paulatino de privatización de la salud que nunca paró, a pesar de todas las promesas que se hicieron en la Revolución Bolivariana.

El sistema público de salud en el país está quebrado. Toda esta situación va acompañada del absoluto fracaso de los proyectos tanto de creación de tecnología propia como de fabricación de insumos médicos y abastecimiento de hospitales, paralelo al fracaso, igualmente deliberado, que se hizo con toda la industria alimentaria, con lo cual estamos observando que no se trata solamente de cofradías mafiosas que hayan afectado un lado de la vida de los venezolanos sino de toda una inmensa conspiración contrarrevolucionaria que viene actuando desde hace más de 10 años contra todos los proyectos soberanos de la nación que intentaron crearse a nivel industrial, científico, tecnológico, alimentario, educativo o productivo.

La formación del sistema de salud “Barrio Adentro”, ha sido reventada por este núcleo conspirativo y mafioso que como nunca en el país hizo fracasar por completo los distintos niveles de integración concebidos para el sistema de salud pública. Tanto así que ya ni siquiera los CDI, unidades majeadas directamente por la cooperación cubana, en estos momentos cuentan con los insumos básicos. Estamos entonces ante un total fracaso de la medicina preventiva y alopática que se intentó construir en los últimos 15 años como uno de los proyectos bandera de la Revolución Bolivariana.

Nos encontramos ante una mafia y una conspiración que se fue configurando de la siguiente manera:

1. Secuestro del sistema de salud por las distintas mafias de la salud. Se fue conformando una cofradía constituida por todos los ministros del proceso, salvo por el primer ministro de salud de Chávez, Gilberto Ochoa, quien fue el único que intentó quebrar las grandes mafias de la salud en el país. El sistema de salud pública a cargo del Seguro Social del país fue secuestrado por un crepúsculo de militares comandado por Carlos Rotondaro y Diosdado Cabello.

Hasta el sol de hoy nadie conoce qué cantidad de dinero fue aprobado para todo el proyecto de la salud.

Cabe decir que Rotondaro ha sido denunciado desde hace más de 10 años por parte del movimiento popular organizado. La ministra Indira Conrado está manejando actualmente toda la administración de recursos de la salud por debajo de cuerdas y con la anuencia directa de la ministra Melo.

Dentro del IVSS, el negocio fue refaccionar y reconstruir los hospitales bajo su tutela, llegándose a ejecutar solo hasta un 20%.

Chávez ordena que debido al crecimiento poblacional se debían unificar los hospitales al mando de un Ministerio de la Salud, situación que nunca se logró debido a la repartición de poderes dentro del manejo hospitalario cuyos negocios consistieron en:

2. Manejo de contratos de refacción y remodelación de hospitales.

3. Compra de aparatos de alta tecnología y equipos médicos, cuya mayoría se encuentra en estos momentos funcionales en una enorme cantidad de clínicas privadas y nuevas clínicas. La parte restante de los aparatos que logró llegar a los hospitales se deterioró, debido a que en las refacciones sin tener en cuenta la configuración técnica de los aparatos, sin tener en cuenta que existe una dirección de patrimonio nacional que hasta el sol no se le conoce rendición de cuenta alguna.

Varias veces intentamos pedir a patrimonio que se nos entregase una auditoría de la cantidad de aparatos que se habían comprado en el país durante el proceso revolucionario y nos aplicaron silencio administrativo.

4. Compra de medicamentos de alto costo, medicamentos para enfermos crónicos y hasta vencidos. Toda esta compra fue controlada por una dirección de medicamentos denominada SUMENCEFAR.

5. Generación de partidas dobles de profesionales y trabajadores.

6. Conformación de Proveedurías dispuestas al control del abastecimiento de farmacias que fueron adquiridas presuntamente por la cofradía militar. Ejemplo: Badan.

7. Conspiración salarial que produjo la fuga de gran parte de nuestra inteligencia médica formada en el sistema público educativo ya sea hacia el sector privado o para el exterior. (Fuga de los anestesiólogos).

8. Quiebra del Seguro Social. Los trabajadores del sector público pasaron a ser tratados dentro del sector privado, haciendo que además entraran a cotizar seguros privados, importándole gigantescas cantidades de capital al sistema privado de los HCM. Esto es una prueba más de que le han dejado a la maquinaria mundial de acumulación de capital y que en nuestro país es más sórdido en la medida en que una enorme cantidad de capital venido de la renta petrolera para el sector salud se ha evaporado por completo mientras que en otros países al menos ello ha servido para sostener la funcionalidad del sistema de salud.

9. Creación de empresas de maletín para la compra-venta de equipamiento de cirugías, laboratorios y reactivos, etc.

10. Compras de Puerto.

Aipo. Comité Promotor por la defensa de la vida y la salud