07/11/12.- Ante la acusación presentada por el Ministerio Público, fue condenado a tres años y seis meses de prisión el exsecretario de Seguridad Ciudadana de la alcaldía de Maracaibo, comisario Eddie Ramírez (55), tras admitir haber solicitado dinero a una pareja de manera irregular, durante un hecho ocurrido el 09 de junio de 2011, en Maracaibo, estado Zulia.

La fiscal 12° de esa jurisdicción, Yanis Domínguez, ratificó la acusación contra el exfuncionario por la comisión de los delitos de concusión, violación agravada de residencia con abuso de funciones y privación ilegitima de libertad.

Tales delitos están previstos y sancionados en la Ley Contra la Corrupción, el Código Penal y la Ley Orgánica Contra la Delincuencia Organizada, vigente para el momento del hecho.

Ante los argumentos y pruebas presentados por el Ministerio Público, el Tribunal 7° de Juicio de Zulia dictó la referida condena contra Ramírez, quien permanece recluido en el Centro de Arrestos y Detenciones Preventivas El Marite, ubicado en Maracaibo.

Es importante destacar que por este hecho ya fueron condenados a cuatro años y cinco meses de prisión, los exfuncionarios Edgar Antonio Guerrero (30), Atilio Rafael Acosta (32) y Juan Carlos Revilla (34), por la comisión de los delitos de concusión, violación de residencia con abuso de funciones, privación ilegitima de libertad y acto falso.

En horas de la tarde del citado día, una de las víctimas, quien laboraba en un centro de atracciones acuáticas en Maracaibo, denunció ante el Ministerio Público que Ramírez junto a Guerrero, Acosta y Revilla se presentaron en su trabajo y lo obligaron a salir de su empleo.

Seguidamente, se trasladaron hasta la vivienda donde la víctima residía con su cónyuge, quien había trabajado como doméstica en una residencia, en la cual se habían extraviado joyas valoradas en 400 mil bolívares, según el propietario.

Una vez en la vivienda de las víctimas, Ramírez y el resto de los funcionarios ingresaron sin orden de allanamiento y los despojaron de 600 bolívares en efectivo, de una lavadora y electrodomésticos.

Además los esposaron, agredieron y amenazaron con un arma de fuego, indicándoles que debían asumir el hurto y buscar las prendas sustraídas para no llevárselos detenidos.

Ramírez ordenó la aprehensión de la pareja y luego los dejó en libertad por no tener orden de captura ni haber sido aprehendidos en flagrancia como lo indica la ley; sin embargo, le retuvieron la documentación a una de las víctimas, exigiéndole a cambio una elevada suma de dinero.

Adicionalmente, los funcionarios le indicaron a los agraviados que debían encontrarse al día siguiente en una entidad bancaria de la localidad para que les dieran el dinero.

Previa coordinación con los fiscales del Ministerio Público y funcionarios policiales, las víctimas acudieron al sitio para la entrega controlada del dinero; sin embargo, los hombres notaron la presencia de las autoridades y huyeron del lugar.

Tras la investigación, los representantes del Ministerio Público solicitaron al Tribunal 7° de Control del estado Zulia, el 10 de junio de 2011, una orden de aprehensión contra Ramírez, la cual se concretó el 10 de noviembre de ese mismo año, cuando fue detenido por funcionarios de la Policía del estado Táchira, quienes en un operativo de rutina lo verificaron a través del Sistema Integrado de Identificación Policial mientras se encontraba en la ciudad de San Cristóbal.