Vicepresidente Ejecutivo José Vicente Rangel
REPUDIA DE MANERA CATEGÓRICA AGRESIÓN CONTRA DIPUTADO TAREK WILLIAM SAAB Y SU FAMILIA
27 Diciembre 2002. En la continuación de una práctica aberrante, consistente en humillar a personas bien sean funcionarios del gobierno o dirigentes de los partidos que respaldan el Proyecto del Presidente de la República, Hugo Chávez Frías, ayer, jueves 26 de Diciembre, se consumó una nueva acción en contra del diputado Tarek William Saab.
Tarek William se trasladaba con su esposa y dos hijos menores a la isla de Margarita en el vuelo 308 de la línea Aeropostal venezolana. En el propio vuelo comenzó un hostigamiento contra él y su familia ante la actitud cómplice de los pilotos y del personal de cabina. Una vez que descendió en el aeropuerto fue vejado por un grupo de personas que lo insultó e incluso llegó a agredir a su esposa Francis quien se encuentra en avanzado estado de embarazo provocando pánico entre sus hijos de siete y cuatro años de edad.
En Margarita ha habido una generalizada reacción de condena a este hecho, y yo debo manifestar como Vicepresidente Ejecutivo de la República y como ciudadano que lo repudio de manera categórica. Que además señalo que estos procedimientos que implican violación de los derechos humanos y acaban con las más elementales normas de convivencia ciudadana, tienen que ser rechazados por toda la colectividad. Con semejante actitud estamos avanzando por un peligroso territorio de violencia desbocada, exponiéndonos a reacciones defensivas que compliquen aún más la situación.
No voy a incurrir en la temeridad de hacer acusaciones irresponsables, pero llama la atención el silencio de los voceros de la oposición respecto a estos hechos. Estoy convencido que si estos voceros hicieran un pronunciamiento condenatorio incuestionable, y los medios de comunicación en vez de reseñar casi con deleite lo sucedido execraran actos de bajeza de este tipo, la situación no hubiese llegado a los actuales extremos.
Por eso, además del repudio, particular, se impone una serena reflexión acerca de lo que está ocurriendo y la urgencia de dar un corte a esta situación antes que se complique más. Hoy es el diputado Tarek William, antes han sido otros, y la pregunta es quién será mañana y qué consecuencias tendrá esta escalada miserable y negadora de la tradición de hidalguía y valor personal del venezolano.