25 de Agosto.- El presidente de la República, Nicolás Maduro, indicó este martes que cada uno de los espacios de las comunidades y sectores populares deben convertirse en una trinchera de lucha para fomentar los nuevos valores de paz y convivencia, forjados durante la Revolución Bolivariana.
"Hay dos caminos: el camino de la patria, de la Revolución, de la paz, de crear, del amor, de la convivencia, del respeto a la vida, y el camino del capitalismo, los antivalores y el culto a la muerte (...) Por eso, cada trinchera de trabajo debe ser una nueva trinchera de lucha para los nuevos valores·, expresó el jefe de Estado en su programa Contacto con Maduro, que transmite Venezolana de Televisión, desde el Círculo Militar, en Caracas, donde se lleva a cabo una feria productiva, organizada por el plan Jóvenes del Barrio.
Maduro indicó muestra de los antivalores, productos del capitalismo, se refleja en la frontera entre Colombia y Venezuela, donde se quiere imponer un capitalismo paramilitar. "En la frontera nos han impuesto un capitalismo, mucho más que el noeliberal, es el capitalismo paramilitar. La oligarquía colombiana quiere que le demos la gracias por llevarse los productos y eso no lo podemos aguantar. Y con firmeza voy a actuar", subrayó el Mandatario Nacional.
Por otra parte, los participantes de la feria mostraron los productos y herramientas, realizada por ellos mismos, para fomentar el desarrollo económico y social en el país. Entre estos se encuentran aros de basquetboll y máquinas para hacer ejercicio.
"Nosotros lo que queremos es generar espacios que están en ocio, recuperarlos con estas máquinas", expresó Eduardo Sánchez, joven fabricante de la máquina para hacer deporte.
En este sentido, el Primer Mandatario señaló que se realizará una reunión con el alcalde de Caracas, Jorge Rodríguez, para que "los jóvenes del barrio construyan los equipos que vayan a servir a los parques" que se construyen en la ciudad.
El Plan Jóvenes del Barrio tiene como propósito escuchar las propuestas de esta población y aprovechar sus potencialidades para alejarlos de la violencia e incluirlos en alternativas de estudio y trabajo. Desde una perspectiva pedagógica alternativa, el plan se plantea la formación en el barrio, esto implica que los jóvenes aprendan algún oficio que permita contribuir con el desarrollo de la economía comunal.
