25 de mayo de 2015.- El vicepresidente de la Comisión de Finanzas y Desarrollo Económico de la Asamblea Nacional, Jesús Faría, recalcó que el gobierno bolivariano mantendrá las políticas sociales dirigidas atender las necesidades de la población, a pesar de los efectos de la guerra económica y de la baja de los precios internacionales del petróleo.
"Aquí se han producido correctivos en los gastos (del gobierno) pero lo que no se ha producido es un cambio en el tema social, aún con el petróleo a 50 dólares el barril (desde un promedio de 100) se mantienen las grandes líneas de protección social: la filosofía y la voluntad política del gobierno", exclamó este lunes en una entrevista ofrecida por Globovisión.
Explicó que los problemas económicos, que provocan en el país la guerra económica, que mantienen sectores de la derecha buscan desestabilizar el país para tratar de derrocar al gobierno.
"Para impulsar un modelo económico se necesitan actores, resulta que los actores económicos que están llamados a ejercer esa función: de impulsar el desarrollo y la diversificación de la economía son los mismos que postraron a nuestra economía en el atraso, en la dependencia y en la visión absolutamente parasitaria", señaló.
Recalcó que estos sectores económicos y políticos buscan mantener una expectativa negativa sobre el país para lo cual impulsan acciones de especulación y desabastecimiento.
"Cuando se observa que hay productos de consumo masivo, y otros, que contienen una tasa de ganancia de 100, 200, 500 o mil por ciento, el que pone el precio es un comerciante absolutamente inescrupuloso y quiénes generan expectativas negativas tiene profundo poder mediático y económico", indicó.
Recordó que estas acciones de desestabilización generadas por grupos de oposición en el país están impulsadas por el gobierno de Estados Unidos.
"El Departamento de Estado (EEUU) tiene un guión que ha desarrollado en casi todos los países donde se instala un gobierno que basa su política en la dignidad nacional , en la soberanía".
Ante los efectos negativos que provocan la guerra económica en la población venezolana, el gobierno mantiene políticas para atender a las necesidades de la población.
"No es que no hayan problemas, sino que hay un conjunto de circunstancias que están golpeando al pueblo venezolano, pero también hay un conjunto de políticas que le están dando respuesta. El año pasado la inflación aumentó en un 67%, eso se dice de una manera recurrente en medios de comunicación, lo que no se dice es que el salario mínimo aumentó en un 69%", resaltó.
Asimismo, recordó que ante los problemas que se presentan en lo económico un gobierno impulsado por la derecha no tendría políticas sociales.
"Si aquí estuviera gobernando la derecha, no habría ningún tipo de aumento, ni tampoco habría políticas sociales que atiendan al pueblo", señaló.
Faría hizo la salvedad de que la revolución heredó "una economía arruinada incapaz de fomentar el desarrollo y la gran crisis de la Venezuela republicana implosionó en los años 90, pero actualmente existe un proceso de transición que busca transformar la economía hacia un modelo que sea productivo.
También resaltó la importancia de la multipolaridad en las relaciones internacionales que mantiene el país con el resto del mundo, con lo cual se han alcanzado diversos proyectos de intercambio que traen beneficios en lo económico.
"Por eso estamos en función de la multipolaridad, hemos buscado otro rumbo de integración latinoamericana, vínculos estratégicos con China, Rusia y vamos a ir acercándonos a eso, vamos a ir tomando como patrón para el ahorro internacional una moneda distinta al dólar estadounidense. Eso no solamente dependerá de nosotros, sino de cambios importantes que se están dando en el mundo, donde China adquiere un gran peso económico y Estados Unidos van en franca decadencia".
