A partir de los seis meses de vida el niño puede consumir otros alimentos

5 de agosto de 2014.- “La leche materna es el único alimento que el niñ@ necesita para los primeros seis meses de vida. Otro tipo de alimentos o bebidas, incluso agua, aumentaría el riesgo de que tenga diarrea u otra enfermedad. Es la primera inmunización del bebé, no existen formulas alternativas para su protección”, puntualiza Unicef (Fondo de las Naciones Unidas para la Infancia).

Tal aseveración es respaldada por la Organización Mundial de la Salud (OMS) cuando afirma que la lactancia materna reduce la mortalidad infantil y tiene beneficios sanitarios que llegan hasta la edad adulta.

Tomando en cuenta esto, desde 1992 la OMS, Unicef y más de 120 países del mundo reconocen la Semana Mundial de la Lactancia Materna. Simultáneamente en Venezuela los órganos estadales adscritos al Ministerio del Poder Popular para la Salud (MPPS) desarrollan su celebración.

Desde el pasado viernes 1º de agosto, se han efectuado en Bolívar rueda de prensa, visitas a medios de comunicación, conversatorios, Asambleas Comunitarias de Salud, distribución de material informativo en la calle, carteleras alusivas didácticas, caminata. Este miércoles se efectuará un encuentro con embarazadas y lactantes.

La dieta necesaria para los niñ@s

Alejandrina Rodríguez, comisionada estadal de Lactancia Materna adscrita al Instituto de Salud Pública (ISP), destaca que el proceso de amamantar debe comenzar dentro de la primera hora de vida del niño y debe realizarse en forma exclusiva hasta los seis meses; una vez cumplido ese tiempo, además de la leche materna se pueden incluir otros alimentos en la dieta.

Al respecto Oneida Medina, directora estadal del Instituto Nacional de Nutrición (INN), precisó que al complementar la leche humana con otros alimentos se debe tomar en cuenta la importancia de dar al pequeño comidas saludables y nutritivas, de acuerdo a los requerimientos por edad.

“De seis a nueve meses debemos empezar a alimentar al pequeño con verduras en forma de papillas y sopa; cereales como arroz y maíz; y frutas como lechosa, mango y cambur, nada de cítricos. Hay que tomar en cuenta que a partir de esta etapa se debe suministrar agua, antes no es necesario, pues la leche materna proporciona todo lo que el niño requiere”.

“Desde los nueve meses, si el bebé toleró los alimentos anteriores, se le puede dar avena, caraota, arveja, lenteja, pescado y pequeños trozos de yema de huevo. No es recomendable darle enlatados, gaseosas ni bebidas instantáneas; de hecho, nutricionalmente estos no son beneficiosos a ninguna edad”.

Una práctica respaldada por la ley

En Venezuela existe la Ley de Promoción y Protección de la Lactancia Materna, cuyo artículo 2 reza: “Todos los niños tienen derecho a la lactancia materna en condiciones adecuadas que garanticen su vida, salud y desarrollo integral. Asimismo las madres tienen derecho a amamantar a sus hijos con apoyo de los padres…”.

En el artículo 6 indica: “el Sistema Público Nacional de Salud debe desarrollar políticas y planes dirigidos a la promoción, protección y apoyo de la lactancia materna”.

El artículo 345 de la Ley Orgánica del Trabajo explica: “durante la lactancia, la mujer tendrá derecho a dos descansos diarios de media hora cada uno para amamantar a su hij@ en el Centro de Educación Inicial o sala de lactancia respectiva. Si no los hubiere, los descansos previstos serán de una hora y media cada uno”.

Asimismo, la Ley Orgánica para la Protección de Niños, Niñas y Adolescentes en su artículo 46 establece que las instituciones tanto públicas como privadas proporcionarán las condiciones adecuadas que permitan a la madre amamantar.

Primer acto de soberanía alimentaria

Yojaira Perales, representante de Amamanta Bolívar, expresó que la institución está enfocada desde su fundación a mejorar la calidad de vida de madres y niños. En la celebración de la Semana Mundial gradúan a los niños que cumplen con la lactancia exclusiva hasta los seis meses y complementaria hasta los dos años o más, y entregan su respectivo diploma.

Por su parte, el jefe del Municipio Sanitario I, Omar Núñez, puntualizó lo positivo de este primer acto de soberanía alimentaria que además contribuye a cuidar el ambiente, ya que no genera desechos y es totalmente natural.

Dina Luces, enfermera coordinadora de Atención a la Familia del ISP, invitó a toda la comunidad a ser vocera de los beneficios. En el bebé fortalece la maduración del sistema nervioso central, aumenta el coeficiente intelectual, ayuda al desarrollo de una dentadura sana y protege de enfermedades.

En la madre permite al útero retomar su tamaño normal, disminuye el sangramiento y riesgos de infección postparto, contribuye a perder el peso adquirido durante el embarazo, previene el cáncer de mama y ovario.

“Lo más importante es que se trata de un acto de amor que representa la unión no sólo entre madre e hijo sino con el padre y todo el núcleo familiar. La leche materna simplemente es insustituible”. Oriana Arias/ Fotos: Miguel Pérez