17/10/12.-Ayer martes, se llevó a cabo el segundo debate entre los candidatos que aspiran a convertirse en presidente de los EEUU. Por un lado, el demócrata Barak Obama, que aspira a su reelección, por otro Mitt Romney, republicano, ex gobernador de Massachusetts. Según los sondeos, el primero perdió en la primera contienda televisada vista por 70 millones de personas. Pero, al parecer, la victoria, en este segundo debate, la obtuvo Obama, recuperando terreno en la carrera electoral por la Casa Blanca.

Este “Reality Show”, característico del sistema bipartidista estadounidense, donde la elección es de segundo grado, representa, según analistas, una muestra de la política del espectáculo que se recrea en el imaginario del habitante promedio de los EEUU, donde el “estilo” prima sobre la “sustancia”, donde el feedback del público se mide vía Twiter y donde el performance de cada candidato se evalúa cual American Idol, según David Brooks, corresponsal de La Jornada de México.

En fin, al parecer, este segundo show lo ganó el presidente Obama, consiguiendo un respiro en la campaña. Según sondeos, el 46% de los consultados declaró como ganador en este debate al demócrata, frente a un 39% que le otorgó la ventaja a Romney. Sin embargo, en el primer debate, los sondeos le dieron una clara ventaja a Romney, con el 67% de opiniones a su favor.

Los votantes indecisos fueron los encargados de realizar las preguntas a los candidatos. En el debate se abordaron temas como la situación económica y las políticas para enfrentar la recesión, la energía, el precio del combustible, el tema de género, la inmigración, la política interna sobre el manejo de armas, así como la política exterior, especialmente en lo concerniente al Medio Oriente y China. Sobre América Latina, Romney mencionó su interés de adelantar acuerdos de libre comercio con nuestros países, a modo de pequeños “ALCA”.

Un Obama agresivo, acusó a Romney de querer privilegiar a los ricos al bajarle aún más los impuestos, y de promover “las mismas políticas que nos llevaron a esta situación” de crisis económica, agregando Obama que “lo último que necesitamos es regresar a las políticas que nos trajeron aquí (…) yo fundamentalmente estoy en desacuerdo con eso (...) esa política de arriba para abajo no funciona”.

Por su parte, Romney replicó y dijo que la actual gestión ha fracasado en su intento de “hacer despegar la economía”, aprovechando para comentar sobre el tema de la alarmante deuda que tiene este país, señaló: "Hemos pasado de una deuda nacional de 10 billones de dólares a una de 16 billones. Si el presidente resultara reelegido, alcanzaríamos los 20 billones de dólares de deuda. Eso nos conduce por el camino de Grecia".

En cuanto al uso de la energía que este país devora por cantidades exorbitantes, para seguir recreando su cultura consumista, el republicano manifestó que "encontramos que la producción de petróleo cayó 10% y la de gas 9% (durante la gestión Obama). ¿Por qué? porque el presidente recortó la mitad de los permisos y permitió la perforación en tierras del Estado".

Al respecto, Obama respondió: "Romney dice que tiene un plan global pero de hecho su plan es dejar que las compañías petroleras escriban la política energética. Entonces en su plan toma en cuenta el petróleo y el gas pero no tiene en cuenta a las energías limpias", subrayó.

Sobre la protección a la clase media, Romney señaló que “las familias de ingreso medio han sido aplastadas durante los últimos cuatro años”, agregando que 23 millones de desempleados, millones más en asistencia alimenticia y 50% de estudiantes egresados sin trabajo reprobaban la política actual. Sin embargo, el actual Presidente se defendió, recalcando que se ha logrado detener el retroceso mediante sus políticas económicas ante una recesión que está al borde de compararse con la acontecida durante la Gran Depresión.

En relación a China, que posee la mayor cantidad de deuda estadounidense y le pelea la supremacía de la producción industrial, Romney increpó a Obama al declarar que "China ha manipulado su moneda año tras año, y el Presidente ha tenido la oportunidad de denunciarlo, pero se ha negado. En el primer día (de asumir el cargo), denunciaré a China" concluyó al respecto; a lo que Obama respondió: "Gobernador, usted será la última persona en ponerse firme con China. (...) Tengan en cuenta que el gobernador Romney ha invertido en empresas que fueron pioneras en el traslado a China, y actualmente invierte en firmas que fabrican equipos de vigilancia para que China espíe a sus propios ciudadanos".

Sobre la inmigración, Obama acusó a los republicanos de obstruir los intentos por concretar en el Congreso una Ley que aborde el tema, recordando al mismo tiempo que Mitt Romney declaró en su momento su admiración por la ley antiinmigrante de Arizona, informando que su asesor sobre políticas migratorias es el creador de esa ley.

Bob Mondello, un crítico de cultura de National Public Radio, ha señalado que este tipo de evento “está manipulado para que las cosas parezcan que la competencia es muy reñida porque nadie vería eso semana tras semana si el resultado no estuviera en duda. En las contiendas políticas, los medios frecuentemente son acusados de hacer algo parecido, enfatizando encuestas que sugieren que la pelea está muy cerrada… Pero las cosas que los reality shows nos han acostumbrado a buscar, son lo superficial, cosas que no tienen mucho que ver con gobernar”.

Habrá un tercer debate, será el 22 de octubre en el estado de Florida, donde el principal tema a tratar será lo referente a la política exterior. El show continuará.