Gobierno Bolivariano firma convenio de cooperación estratégica con la corporación automotriz venezolana ZGT

Modelo FACE de la ZGT

Modelo FACE de la ZGT

Credito: MPPCTII

25 de septiembre de 2010.-Como parte de las políticas revolucionarias para mejorar la calidad de vida del pueblo venezolano y combatir la especulación, impuesta por las empresas trasnacionales junto a la burguesía nacional, el Estado venezolano crea una empresa conjunta para el ensamblaje de vehículos

Este viernes se llevó a cabo la firma del convenio para constituir la empresa conjunta para el ensamblaje de vehículos entre la Corporación Automotriz ZGT, primera ensambladora con capital 100% venezolano, y el Gobierno Nacional a través del Ministerio del Poder Popular para Ciencia, Tecnología e Industrias Intermedias, que tiene un 51% de participación en esta alianza estratégica.

La iniciativa constituye una muestra de la confianza que tienen los empresarios privados venezolanos en las políticas de desarrollo económico impulsadas por el Gobierno Bolivariano, ya que surge como una evolución del proyecto de ensamblaje de los Vehículos Tiuna, que hasta la fecha ha arrojado resultados positivos.

La tecnología automotriz que se utilizará en esta empresa conjunta, proviene de la empresa china Chery, que garantiza la formación de los trabajadores venezolanos y la transferencia tecnológica, esencial para consolidar la soberanía e independencia del país. Cabe destacar que la selección del personal que formará parte de la ensambladora se llevará a cabo a través de la articulación con los consejos comunales, la Universidad Bolivariana, y la Unefa, entre otros.

La creación de esta alianza estratégica impulsa la industrialización en el país, como parte de la consolidación de un nuevo modelo productivo socialista, ya que este proyecto no se limita al ensamblaje de piezas importadas, sino que impulsa la sustitución de importaciones a través del desarrollo de los autopartistas venezolanos, con la incorporación de partes nacionales desde la puesta en marcha de la planta. Empresas recuperadas por el Estado venezolano como OciMetalmecánica, Auto Seat de Venezuela y Rialca estarán incorporadas desde el primer momento en este proceso de sustitución de piezas importadas.

Así mismo, está prevista la creación de unidades productivas con la participación de los consejos comunales para trabajar en el montaje de los cauchos en los rines, el moldeado de las tuberías para el fluido de los frenos, entre otras actividades vinculadas al proceso de ensamblaje que favorezcan el desarrollo productivo en las comunidades.

Además de potenciar el avance industrial del país, a través de la comercialización de vehículos de calidad a precios justos y accesibles para el pueblo venezolano, el Gobierno Bolivariano combate la especulación, impuesta por las empresas trasnacionales que dominan todavía el mercado nacional automotriz. La planta iniciará producción para dos modelos de vehículos, un compacto y un sedan, que se ofrecerán al pueblo a menos del 50% de los precios promedio del mercado capitalista.

El primer modelo es un compacto cuatro puertas con motor de 1.3 litros, con equipamiento completo, que tiene un costo de 58.000 Bs F, mientras que en el mercado capitalista los modelos similares tienen un precio promedio de 103.075 Bs F, es decir, que constituye un ahorro de 44%. El segundo modelo, tipo sedan con motor de 1.8 litros y equipamiento completo, tiene un precio de 80.000 Bs F, mientras que en el mercado capitalista los modelos similares tienen un precio promedio de 179.823 Bs F, que se traduce en un ahorro de 55%.

Para garantizar el acceso del pueblo a estos vehículos de calidad y buen precio, el Gobierno Bolivariano tiene prevista la instalación de puntos de venta y de servicio a fin de asegurar los repuestos a los usuarios y usuarias, así como la prestación de servicios post venta a bajo costo.

En relación al financiamiento, se realizará a través de la Banca Pública, para evitar que se alteren los precios de venta, y garantizar tasas de interés preferenciales y sin inicial.

Con esta empresa conjunta se avanza hacia la consolidación de un nuevo modelo de gestión, que en el marco de la batalla económica permite al Estado venezolano diversificar el aparato productivo nacional e impulsar el desarrollo industrial, favoreciendo el trabajo productivo y la satisfacción de necesidades del pueblo.


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