Desde la primera semana de 2008 funciona la disquera oficial Tendrá la capacidad para repetir un total de 15 millones de CD y DVD cada año

Centro Nacional del Disco replica el sonido del Estado

La masterizadora es única en el país y una de las pocas de Suramérica.

La masterizadora es única en el país y una de las pocas de Suramérica.

Credito: YONY TRIGO

La cónsola es de última generación

La cónsola es de última generación

Credito: YONY TRIGO

Caracas, 2 de marzo 2008 / Anda suelto el animal, canta Xulio Formoso, acompañado de los acordes del piano. Anda suelto el animal es el final de cada una de las estrofas del poema. An da suelto el animal de Franciso Sesto es uno de sus tantos textos que fueron llevados a la música y luego recopilados en tres CD y un DVD. Las letras del ministro de la Cultura quedaron inmortalizadas, al integrar una de las primeras producciones hechas realidad por el Centro Nacional del Disco (Cendis).

Desde la primera semana de 2008 comenzaron los trabajos formales de la primera disquera del Estado en su sede propia, construida en la zona industrial de La Trinidad. El edificio, que tuvo un costo de BsF 15 millones, cuenta con todos los equipos necesarios para la creación en masa de producciones discográficas. Todos de última generación.

"El objetivo es poder grabar un disco a aquellos que no han tenido acceso a las disqueras, a los que no han sido tomados en cuenta", comenta desde su oficina el presidente del Cendis y también cantante Xulio Formoso.

Los lineamientos de la institución, sin embargo, establecen que la fundación es de carácter político "y cultural, por supuesto, pero político", dejan claro en sus principios fundamentales.

"El Cendis es una realidad única en el mundo, hasta dónde sé no hay ninguna industria de este tipo creada por el Estado", dice el presidente y agrega que producen contenidos grabados "en nuestros estudios, pero también apoyamos a los ministerios, gobernaciones y a las intituciones del gobierno que soliciten nuestra colaboración".

Equipos únicos. Producir 500 títulos por año y llegar a la capacidad de replicación de 15 millones de CD y DVD cada 365 días son las metas a largo plazo que se ha planteado el Cendis. Dentro de la infraestructura, las maquinarias lucen sus caparazones nuevos, que demuestran el poco tiempo de haber arribado a Venezuela.

"El estudio de grabación fue diseñado de manera especial para obtener un mejor sonido. Se encuentra suspendido del suelo, aislado de las paredes, de todo tipo de ruidos", explica el presidente de la fundación. Una cónsola integrada, pro tools (programa de grabación), preamplificadores y un set de microfonía de 17 unidades, son parte funcional de los dos estudios de grabación, uno todavía en construcción.

Pero quizás el atractivo más importante de la disquera del Estado está en su masterizadora, la única en funcionamiento del país y una de las pocas que hay en Suramérica. El Cendis tiene la capacidad de grabado óptico sobre discos de níquel de formato CD, DVD5 y DVD9. El equipo también puede producir un molde de replicación por hora. La industria adquirió una inyectadora de plástico Nestal E-Jet, una replicadora VDL y una impresora serigráfica de discos ópticos. Con estos equipos se obtienen los discos con la información transferida del master, pueden replicarse mil unidades por hora e imprimir el arte final del compacto.



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