El Presidente cerró con broche de oro, inaugurando las casas de Petrocasa del conjunto comunal “Nuestra Señora de la Coromoto” en Guacara

El 30 de marzo del 2008, estuve compartiendo con la gente de La Coromoto, el entusiasmo y la satisfacción que estas personas reflejaban en sus rostros, me dio la impresión de que estaba leyendo un poema de Pablo Neruda, en cada uno de ellos. Tenían que ver, como limpiaban y dejaban todo listo para la llegada del Presidente Hugo Rafael Chávez Fría.

Desde el día anterior, todo el conglomerado de personas, que iban a celebrar con su Líder, se movían cuan hormigas atendiendo en todos los puntos, el detalle final que tenían que ponerle a ese grandioso logro. Todo fue alegría y esmero, en las últimas pinceladas para el gran evento.

La señora Nelly Ochoa, fundadora de ese Conjunto Comunal, a pesar de estar un poco mal de salud, ya que sufre de tensión alta, fue una de las primeras que adornó su hogar de la forma más dulce y hermosa, era la manera de expresar su agradecimiento a todas aquellas personas que hicieron posible esto que parecía quimérico.

El tiempo transcurría, mientras llegaban las personalidades que asistirían al Aló Presidente y a la instalación de Pedeval. Los medios de comunicación, bueno en verdad confieso que el que vi fue a Venezolana de Televisión, los demás brillaron por su ausencia, pero eso no nos extraña, ya que se trataba de un beneficio para el pueblo, que el gobierno le otorgaba, por el derecho que tiene todo venezolano de poseer un techo digno.

Todos querían tomarse una foto, salir en cada una de ellas, según me decían, que era para que el mundo viera la verdad de nuestra revolución, que nuestro Presidente esta cumpliendo y gracias a la buena ideología socialista que ofrece, cuatrocientos noventa y cinco familias, han logrado el sueño de oro, que es tener un techo propio y mejor aún, construido por sus manos, con “El sudor de su frente”.

Daban ganas de llorar, al ver la expresión de cada rostro, las historias que cada uno de ellos comentaba, por lo que tuvieron que pasar para estar hoy con los pies firmes, bien asentados en esa tierra que ahora era suya.

Recuerdo a mi madre, cuando por fin tuvo algo propio y nos llevó a vivir en él, nos dijo “Ahora si pueden brincar y saltar todo lo que quieran, por que esto es de ustedes”. La alegría era indescriptible, por supuesto que brincamos y saltamos hasta más no poder. Por eso hoy puedo entender a todo aquel que nunca tuvo un techo y que por su esfuerzo y el apoyo de un hombre, que no alberga ningún sentimiento mezquino, que es capaz de no dormir ni descansar, con la sola idea de proporcionarle un bien a su pueblo. ¿Quién lo ha hecho por el pueblo venezolano? Que yo recuerde, muy pocos.

Hoy se cierra con broche de oro, el trabajo y los sueños que tanta gente depositó en las manos del Presidente, con esta maravillosa inauguración para dicha de los venezolanos y esperanza de otros pueblos hermanos. No será la última ya que por ahí ya vienen construyéndose otras más, que serán la bendición para estos pueblos hambrientos de justicia social.

Esto no termina aquí, ahora es que hay tela que cortar. Los beneficios que el pueblo está recibiendo, tenemos que darlos a conocer, por todos los medios posibles. Estoy comprometida en esta bellísima tarea y esperando que muchos de los nuestros se sumen a la divulgación de nuestro logros, que son los logros de América Latina….de todo el Sur.

¡PATRIA SOCIALISMO O MUERTE!

¡¡VENCEREMOS!!

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