Tanto silencio era sospechoso, medraban y buscaban la forma de evadir responsabilidades, de no comprometerse, o de emitir opiniones que generaran ambigüedades y confusión, sobre la iniciativa tomada por el gobierno nacional, de convocar a un Referéndum Consultivo, para que el pueblo, en quien reside la Soberanía Nacional, fuera consultado sobre un tópico, de interés patrio como es la Defensa de la Integridad Territorial de la República de Venezuela.
Lo que ignora este sector, es que estos temas inherentes al sentimiento patrio, toca nuestras raíces, porque el territorio, elemento fundamental de la existencia de un Estado, está arraigado en lo más íntimo del ser nacional y que cuando se trata de defenderlo, no hay ideologías de por medio, no hay intereses políticos, no hay diferencias sociales ni religiosas, sencilla y llanamente es algo inherente a la propia existencia de un Estado y a el Alma de un pueblo, que como es el caso venezolano, lo ha heredado luego de intensas luchas de sus próceres independentistas.
A Venezuela, nadie le ha regalado territorio, Sus próceres, sus líderes históricos, desinteresadamente en lo personal, recorrieron este continente sembrando libertades, creando países, alejándose muchas veces de sus propias familias, para enfrentarse a naciones colonialistas que pretendían perpetuarse en estos predios para continuar explotándolos, y con esa lucha dotaron a estas repúblicas de gobiernos independientes, soberanos y con territorio propio. Ese fue el propósito de la gesta libertadora formar patrias. Simón Bolívar, sabiamente lo expresaba: "Formemos una Patria a toda costa y todo lo demás será tolerable".
Ese esfuerzo que cada vez que lo estudiamos lo apreciamos inconmensurable, está hasta en los tuétanos de cada venezolano y cuando hablamos de sentimiento patrio observamos que él está presente en su quehacer diario, en la cultura, en la música, en los poemas, en la pintura, en la letra de sus canciones, en el sentimiento de cada uno por la defensa de su territorio, en fin en su historia; sintetizándose en una sola frase: Venezuela es de los venezolanos.
Por tal razonamiento, la única explicación que podemos dar, acerca de que un sector de venezolanos, que representan a una corriente ultraderechista, mantengan una posición ambigua, dubitativa, frente a la Defensa de la Integridad territorial, que hoy se concreta en el Rescate del Esequibo, es que ellos, en el fondo, tienen intereses comunes, con los mismos poderes, que están detrás, de la Controversia, impulsado enfrentamiento entre dos países que por su cercanía, deben ser vecinos y convivir en paz, para sobre la base de la división, pescar en rio revuelto y apoderarse de las riquezas naturales que la naturaleza prodigó y que históricamente han ambicionado.
Asumir una postura neutral frente a un tema tan delicado, acudir al expediente del "Libre Albedrio", para evadir responsabilidades y dejar al voleo, a especie de azar irresponsable a sus seguidores, con el ánimo y propósito, el fondo, de enfrentarse al gobierno, al menos en mi memoria, no tiene precedente en Venezuela. Por contrario, hay episodios de nuestra historia que cuestionan este tipo de conductas. Cuando Cipriano Castro, como Presidente de Venezuela tuvo que enfrentar el Bloqueo contra el país en 1902-3, recogido de esta manera por los historiadores: "1902 y principios de 1903 las marinas de guerra del Imperio Británico, el Imperio alemán y el Reino de Italia bloquearon las costas y puertos de Venezuela exigiendo el pago inmediato de las deudas contraídas por el gobierno, no dudo, ni apeló al Libre Albedrio para defender el país, país por cierto a la sazón, muy débil en comparación con la potencias agresoras.
¿Cómo actuó el Presidente Castro? WikipediA, lo reseña así:
"Durante este conflicto el régimen de Castro decreta una amnistía general y maneja un discurso político de corte nacionalista enfrentado a las potencias extranjeras a la par que los acorazados alemanes e ingleses hunden varios buques de guerra venezolanos y bombardean La Guaira, Puerto Cabello y la isla de San Carlos. Sin flota para enfrentar a los agresores, el presidente Castro se defiende con retumbante proclama: «¡La planta insolente del"
No dudo Castro, y en proclama para llamar a todo el pueblo a defender su patria enfatizó "Venezolanos, venezolanas, la planta insolente del extranjero ha profanado el sagrado suelo de la Patria", es la primera oración de la proclama con la cual Castro logró mover la fibra patriota del pueblo en medio del bloqueo y bombardeo de las costas del país".
No se escondió Castro, no evadió responsabilidades ni mantuvo una actitud ambigua o dubitativa, hasta soltó a sus enemigos políticos para que Venezuela, toda, como un solo hombre una sola mujer defendieran su país a pesar de desventajosa situación en la que se encontraba el país enfrentado a Goliat.
De allí que la postura de ese sector de la ultra derecha venezolana, carente de orientación a sus seguidores, no solo pone en entredicho su conducta como "dirigentes", porque no tienen capacidad para dirigir, sino que crea una gran interrogante: ¿ Como actuarían frente a una coyuntura similar a la del Esequibo?. ¿Entregarían el territorio? ¿Se cruzarían de brazos y apelarían al Libre Albedrio?. Las preguntas las dejamos al aire para que los venezolanos reflexionen, pero en lo personal, considero que la gran mayoría de los venezolanos le darán una respuesta contundente el tres de diciembre votando Si, Cinco Veces en Defensa de la Integridad Territorial y su postura quedará para la historia como una insensatez, que le dio la espaldas a su propio país y al sentimiento nacional por una Venezuela, independiente, Soberana e integra, territorialmente.