¿Qué diferencia esencial hay entre gobiernos de hombres o de mujeres? Son igualitos de injustos, ladrones y capitalistas

1. Mujeres presidentas en Inglaterra, Alemania, Israel, Argentina, Bolivia, Chile, etcétera, así como en otros países más, con altos cargos, serán un dos por ciento; pero, díganme alguien, ¿ha habido alguna diferencia esencial en beneficio de los sectores mayoritarios de trabajadores? Yo nunca he visto lo distinto porque hombres y mujeres han gobernado de acuerdo a algunas leyes o reglas que el capitalismo impone a nivel global. Lo mismo he visto con gobernantes gordos, altos, bajos, negros, jóvenes o viejos; todos hacen lo mismo porque tienen que subordinarse a los dueños del capital, a las necesidades de la banca, la industria, en gran comercio, los medios de información.

2. En el capitalismo quien tiene el poder son los principales dueños de capitales en forma de dinero en los bancos o en grandes propiedades materiales. Ellos son los que mandan en todo y los funcionarios de gobierno sólo son sus mandaderos. Por ello dicen: "tiene el gobierno no el poder". Por ello me da risa que en México las mujeres se sientan felices que sus compañeras ya tengan acceso a muchos cargos de gobierno y que ahora dos mujeres de diferentes partidos políticos compitan por la Presidencia. En el país el 99 por ciento de los gobiernos han estado en manos de hombres y el uno por ciento en manos de mujeres. Pero todo es y será igualito.

3. La Teacher en Inglaterra, la Merkel en Alemania, la Meier en Israel, la Indira en la India, la Kirchner en Argentina, la Bachelet de Chile, la Añez de Bolivia, etcétera, no hicieron algo que las diferenciara de los nefastos y ladrones hombres. Los únicos gobernantes que por su ideología buscaron establecer la igualdad, al encabezar revoluciones, fuero: Lenin, Mao, Fidel Castro; pero tampoco pudieron ir adelante porque el capitalismo y el imperialismo, los despedazaron. Todo ello lleva a la convicción de que estos problemas no son de hombres o mujeres; son problemas que sólo pueden acabarse al luchar y enterrar el capitalismo, la desigualdad social, la explotación.

4. Por ello, estos juegos políticos que me "matan de risa" desde hace décadas, al ver las confrontaciones de políticos y partidos por más dinero y poder; sobre todo cuando lo electoral se impuso en 1977 y nos destruyó como izquierda radical, profundizo más mi idea de que es un engaño, una manipulación que le hacen a la mayoría de la población entreteniéndola mientras la esquilman. Espero que pronto las mujeres que se engañan luchando contra los hombres, se den cuenta que la lucha es la unión de los llamados "sexos opuestos" contra el sistema político, económico, social capitalista que domina todo. Por ahora gobernar es subordinarse al sistema dominante. (3/IX/23)

 



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Pedro Echeverría


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