Cuando muchacho había un juego. Otro nos extendía el brazo y con un movimiento como de pinza, seleccionaba las partes y decía, Lomo, Lomito y lo mío y en lo mío se afincaba el apretón, a la altura del brazo y el músculo reaccionaba aumentando su tamaño.
Laurita, Jefa del Comando Sur, a la cual ya le estoy tomando cariño, quiere jugar ese juego, pero ella ni tonta ni perezosa, quiere ir directa, a la presa, nada de pellejo, bofe o mondongo, a ella, lo que le gusta es el Lomito, y no lo oculta.
Por eso en su visita a Argentina, lanzó al arco un verdadero gol y expresó cual es el Lomito, que ella ve en América Latina. Ese Lomito, no lo quiere Laurita, al estilo Ruso, "Sgtrogonoff", Laurita dice que a ese guisado le echan mucha pimienta; tampoco lo quiere al estilo chino, salteado con vegetales, Laurita, está clarita, ella no es vegana. La yuca, le apetece, de vez en cuando y de cuando en vez, pero de allí no pasa.
Laurita, quiere el Lomito, pero al estilo norteamericano Al "Grill", a la parrilla, tierno, vuelta y vuelta, con french fries y su ración de Kétchup, nada de acompañamientos indeseados, como pan negro o de centeno como en Rusia, ni pan al vapor como lo chinos, no tiernito, vuelta y vuelta, sin aditivos extraños y sobre todo que en su interior sea rojo y en su exterior rosado.
Al sentarse a la mesa, rodeada de altos dignatarios argentinos, Laurita, en la tierra de las carnes, sin ni siquiera ver el Menú, que le presentaba El Mozo, pidió a sus anchas lo que le gustaba. Por cierto, que llamó la atención, la ausencia de Cristina.
Apuntando con el dedo, que utiliza también para el gatillo, indicó:
De Uds., quiero el Litio, de Venezuela el Petróleo y si es liviano mejor; Cobre y Oro donde haiga, como ensalada, me pones los bosques del amazonas y abundante agua, agua dulce, como sabemos que hay en la región.
Al oír el servicio solicitado, un mesonero venezolano, de la diáspora, que trabajaba en el restaurant, de los 500.000 mil, que según el Presidente Alberto hay por esas tierras, guardando su postura, exclamó: Perrooooooo, mientras que el Mozo, argentino, agregó "Mas náaa". Y Laurita respondió, eso, por los momentos, luego les pediré el postre.
Claro, Laurita, no le dio tiempo ni a los mozos, ni a los mesoneros realizar sus rituales formas, de colocar, platos y más platos, paños y mas paños, ni las frases de costumbre "Buen Provecho", "Buen Apetito", su Menú, ya lo había memorizado, pues en otras oportunidades lo había repetido.
Dije al principio, que le estaba tomando cariño a Laurita, a pesar de que en las fotos, siempre aparece con un medallero, como si ha peleado en mil batallas y una cara muy ceremonial. Pero esa conducta ambiciosa, esa manía por apoderarse de los recursos de los demás, esa manera brusca de pretender que son el ombligo del mundo y que todos le deben pleitesía; por todas esas cosas y otras más, me van alejando de ella y en vez de verla como amistosa, cariñosa, tanto, que me atrevo a utilizar el diminutivo Laurita, para entenderla, se me parece más bien a la Maestra "Conchaetoro", de la película Matilde. Austera, ruda, imponente, agresora, irrespetuosa, repugnante.
Pues, Laurita, sí es cierto que tenemos el apreciado Lomito que Uds. Necesitan, pero este debe ser cocinado a nuestra medida, con nuestras propias especies, tomate margariteño, ají dulce apureño, culantro pero no tanto etc. etc. y sobre la base de ser buenos comensales, degustarlo, para beneficio de toda la humanidad, pero, no a la machimberra, sino, con nuestras condiciones, con nuestro propio guiso y en igualdad de condiciones.
Así que Laurita, por favor, modérate, frena tu apetito, quizás sin el medallero y es uniforme verde con el que posas para las cámaras, que hoy es repudiado en todo el mundo, te veas mejor. Hasta pronto Laurita, pórtate bien.